La posición de España e Italia antes de la jornada 2 es de una comodidad un tanto inesperada. Las victorias en el estreno, con contundencia para España y con cierto apuro para Italia, han dibujado un panorama de ventaja que se ha consolidado con el agónico empate entre balcánicos.

El grupo B, -con España, Italia, Croacia y Albania- recibió el clásico apelativo de grupo de la muerte: es el único emparejamiento de la Eurocopa con dos campeones del mundo; además, tiene a la selección de Luka Modric, semifinalista en los dos últimos mundiales.

Albania se perfilaba como esa cenicienta que, sin apenas opciones de avanzar de ronda, podría ser clave para determinar el destino de sus competidores. El arranque de los albaneses con Italia evidenció que su ambición exigía más, aunque los transalpinos frustaron el ímpetu de Albania.

Los resultados tras una jornada y media han dejado a Albania y a Croacia en el fondo de la clasificación, con la opción para España e Italia de sellar su pase a octavos de final en Gelsenkirchen. El ganador estará en la siguiente ronda y tendrá las matemáticas a su favor para partir como cabeza de serie en los cruces; sin embargo, la casuística esconde una posibilidad que hundiría a croatas y albaneses y que sembraría la tranquilidad entre italianos y españoles.

Un pacto de no agresión, o mejor dicho, la sombra del 'biscotto' tan mencionado históricamente en la prensa italiana, entra en juego en la Eurocopa de Alemania. El empate resolvería el quebradero de cabeza con el que se pueden encontrar España e Italia en la última jornada, ya que en caso de que uno de los dos caiga llegaría al tercer enfrentamiento de la fase de grupos con la amenaza de quedar eliminado.

El reparto de puntos mantendría el abismo de 3 puntos que abrieron los de Luis de la Fuente y Luciano Spalletti, que para decir adiós a Alemania tendrían que caer fuera de los dos primeros tendrían que caer con estrépito en sus respectivos compromisos.

El empate parece una opción más satisfactoria para Italia, que no venció con la suficiencia de España en el debut y que tendrá a una Croacia más que necesitada a la espera. El desempeño de España con el bronce del pasado Mundial deja a la selección liderada por Carvajal, Rodri como favorita para liderar el grupo, que con la diferencia de goles cosechada podría permitirse un resbalón y aún así acabar entre los 16 equipos que se jugarán el título.

La historia del 'biscotto'

El término 'biscotto' (Pasteleo) fue popularizado por los italianos en 2004, aunque el primer recuerdo de un partido en el que un resultado favorecía los dos contendientes y perjudicaba a un tercero data de 1982.

El estadio de El Molinón fue testigo del 'arreglo' entre Alemania Federal y Austria que dio lugar al clamor desde la grada: "Que se besen, que se besen!", gritaban los espectadores desde la tribuna ante la falta de interés de los futbolistas en competir. El 1-0 clasificaba a ambas selecciones y dejaba fuera a Argelia. La conveniencia del resultado fue tan evidente la FIFA decidió unificar la última jornada de la fase de grupos de sus competicoines para, en la medida de lo posible, evitar este tipo de situaciones.

El caso que afectó a Italia y que dio lugar al 'biscotto' se produjo en la Eurocopa de Portugal 2004. La selección transalpina llegaba a la última jornada con la obligación de ganar a Bulgaria y esperar al resultado del Dinamarca-Suecia. La generación de oro de Italia, que dos años más tarde fue campeona del mundo, cumplió gracias a los goles de Antonio Cassano y Simone Perrotta; sin embargo, el 2-2 sobre la bocina obra del sueco Mattias Jonson ponía a Italia de vuelta a la bota.

El fantasma del 'biscotto' que tanto daño hizo a la azzura volvió a Italia en 2012 y, como en esta Eurocopa, con España y Croacia como parte implicada. La situación era distinta a la actual: España e Italia empataron en la jornada 1, Italia y Croacia hicieron lo propio en la jornada 2 y España y Croacia se medían en el desenlace con la opción de empatar para dejar fuera a los entonces entrenados por Cesare Prandelli.

"La conspiración es imposible. España saltará al campo para ganar", señaló el técnico italiano en la previa. "Vuelve la pesadilla del 'biscotto' ", tituló La Gazzetta dello Sport con el recuerdo de lo sucedido en 2004 todavía reciente.

El capitán de Italia durante aquel ciclo, Gianluigi Buffon, evidenció su confianza en España y en su deportividad: "Cuando eres consciente de ser más fuerte, no tienes miedo de nada y no haces cálculos, juegas para divertirte y divertir, para ganar", sentenció, algo que rondará estos días la mentes de albanos y croatas.

El triunfo de España sobre Croacia con gol de Jesús Navas, convocado también para esta Eurocopa, certificó el pase de españoles e italianos, que podrían pastelear este jueves, aunque salvo catástrofe y con la victoria de la primera jornada tienen buena parte del trabajo hecho.