Poco gasto, fuga de talento, prudencia, conformismo y austeridad a raudales. El mercado de fichajes ha dejado claro que la crisis del coronavirus ha golpeado con fuerza las arcas de los clubes españoles. LaLiga, otrora la gran agitadora de los culebrones veraniegos, sigue perdiendo músculo económico frente a la Premier League y la Serie A.

LaLiga ha pasado de ser un torneo que importaba talento a uno que lo exporta. Según datos de la web Transfermarkt, los clubes españoles han gastado este verano 410 millones de euros, más de mil millones menos de los 1.480 de 2019. En cambio, han ingresado 494: el balance, de 84 millones de euros en positivo, es la cifra más alta de la historia del campeonato.

El coronavirus ha afectado a las cinco grandes ligas europeas. Todas han invertido menos dinero que en los últimos cinco años. Pero la caída más acentuada ha sido la de LaLiga, cuyo gasto se ha desplomado en un 70%, tal y como indica el gráfico realizado en base a los datos de Transfermarkt.

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Especialmente llamativo es el dato de que el Real Madrid no ha gastado ni un euro. Tanto el conjunto blanco como el Barcelona han dejado ir gratis a varios cracks con el único objetivo de ahorrar en salarios.

El fichaje de Luis Suárez por el Atlético de Madrid resume en gran medida la situación de LaLiga española. El Barcelona, club al que pertenecía el jugador, necesitaba liberar masa salarial y para ello no dudó en dejar salir gratis al tercer máximo goleador de su historia. Ahora viste la camiseta de un rival directo.

Pjanic y Coutinho, las "estrellas" del mercado

Por suerte para LaLiga y para Javier Tebas, Luis Suárez seguirá jugando en los campos españoles. Sin embargo, el torneo ha perdido a nombres como Sergio Reguilón, Gareth Bale, Rafinha, Arturo Vidal, James Rodríguez, Álvaro Morata, Thomas Partey, Éver Banega, Achraf, Marc Roca o Santiago Cazorla. Y los que llegan no generan precisamente máxima expectación: Miralem Pjanic y Philippe Coutinho podrían considerarse las mejores transacciones, ambas del Barcelona. Otra cara conocida que regresa es David Silva, que apura su magia en la Real Sociedad.

Perdemos calidad y potencial en nuestra Liga. A nivel sentimental a uno le gusta tener a los mejores"

Luis Enrique

"Yo como seleccionador", analizó hoy Luis Enrique en rueda de prensa, "creo que hay una doble lectura en todo esto. Si me fijo en la madurez que van a coger los chavales jóvenes yéndose a una liga como la Premier, la Bundesliga o la Serie A, como seleccionador me parece bien porque van a madurar, van a aprender un idioma, van a vivir situaciones personales que les va a hacer crecer".

"Pero también perdemos calidad y potencial en nuestra Liga. A nivel sentimental a uno le gusta tener a los mejores en la Liga española".

Una Liga sin Neymar, Cristiano y Messi

El gran problema es que el panorama que se perfila a corto plazo es todavía más oscuro. Mientras el Real Madrid se embaucó en la millonaria reforma del Santiago Bernabéu, el Barcelona tiene sus cuentas tiritando. El resto de clubes tienen que asumir las pérdidas ocasionadas por el coronavirus (que serán mayores que en otros países menos golpeados por la pandemia) y LaLiga tarde o temprano tendrá que buscar nuevos asideros si se confirma la marcha de Lionel Messi a final de temporada.

La marcha de Neymar al PSG en 2017 fue un duro golpe para la reputación de LaLiga, que al año siguiente vio cómo Cristiano Ronaldo abandonaba el Real Madrid para fichar por la Juventus de Turín. Todavía queda Lionel Messi. Al menos una temporada más.