Anabel Pantoja continuaba navegando entre dos aguas en la guerra que mantiene su primo, Kiko Rivera, con su tía, Isabel Pantoja. "Estoy entre la espada y la pared" ha asegurado en la intervención en directo que ha hecho hoy en el programa en el que colabora, 'Sálvame'.
La sobrina de Isabel Pantoja se ha explayado comenzando su relato expresando el dolor que le produjo ver el programa 'Cantora: la herencia envenada', el cual tuvo que visionar en dos días ya que "de la persona que se habla es de mi tía y vi a mi primo mal. Me parece doloroso. No es mi intención investigar ni llegar a nada, para eso estáis vosotros. Espero que esto llegue a buen puerto. No ahora porque creo que ahora no se puede. Se están sacando muchas informaciones, ya Kiko a lo mejor no es responsable".
Anabel ha asegurado que ella no vio nada en la habitación de Paco, ya que se la ha señalado como la persona que estaba al lado de Kiko Rivera cuando descubrió la gran mentira de su madre y que los enseres de su padre seguían bajo el techo de Cantora. Pero sí ha confirmado que Kiko lo vio. Así como también ha afirmado que no está al tanto del reparto que se ha hecho de la herencia de Paquirri ya que "de números no hablo con mi familia. Tampoco de pinturas ni nada de eso. Cuando visito a mi familia, hago visitas familiares, no voy a hablar de testamentos".
Hasta ahora Anabel no ha sabido que rumbo ni posición tomar. Por lo que ha querido tender una mano tanto a su primo, "es mi primo que para mí ha sido como un hermano", como a su tía, "es la otra parte de mi familia que siempre respeto y le tengo que agreceder las cosas que ha hecho por mí", ofreciéndose en ambos casos para lo que necesiten.
"Ahora mismo estoy lejos de los dos, pero telefónicamente me tienen y tienen mi apoyo". Ofreciemiento que llega a pesar de que con la cantante aun no ha podido hablar tal y como ha asegurado "por parte de la otra persona no he hablado con ella, he hablado con quién tenía que hablar y sé que la cosa está crítica. No puede estar de otra manera, si lo estuviera, no sería persona". La persona a la que se refiere es su tío Agustín, a quien no va a nombrar para cumplir su deseo de ser anónimo.
Tras este relato Anabel no ha podido reprimir sus lágrimas y se ha derrumbado sincerándose: "Me hubiera gustado que mi primo le plantara cara en el salón de su casa". Son la primeras palabras que la colaboradora pronuncia posicionándose a favor de su tía y haciendo una observación crítica a la actuación de Kiko Rivera, quien ya le pidió que no se metiera en berenjenales, tal y como ha contado Anabel en varias ocasiones. Aún así, Kiko contará con el apoyo de su prima, en eso ha sido rotunda desde el principio.
Anabel comenzó esta interveción muy motivada ya que hoy le han quitado la escayola de la pierna. Fue el 19 de octubre cuando se rompió el peroné practicando surf. Una ruptura que le obligó a pasar la convalecencia postrada en el sofá de su casa, siendo testigo directo de la guerra entre su primo y su tía. Dedes ahí ha vivido situaciones muy duras, no solo por el mal trago que está pasando su familia, sino ella misma al ser objeto de insultos, tal y como ha denunciado en redes sociales.
Al margen de polémicas familiares, le queda una larga recuperación tanto física como emocional. Para la primera, mañana empieza con los ejercicios y confía en recuperarse pronto del todo para poder volver a viajar en condiciones e incorporarse a su puesto de trabajo.
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