El Ministerio del Interior ha encargado a la naviera española Trasmediterránea que flete tres barcos para trasladar a Argelia desde Alicante a unos 120 migrantes que se encuentran en situación irregular en España. El importe de la adjudicación, tramitada por el procedimiento de emergencia, asciende a 200.000 euros.

Argelia es uno de los países africanos con los que el Gobierno de coalición ha intensificado en los últimos meses las gestiones políticas para tratar de agilizar la devolución de migrantes llegados a España, lo que ha motivado visitas a Argel durante 2020 tanto de la ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación (Arancha González Laya) como del titular de Interior (Fernando Grande-Marlaska). En concreto, éste viajó el pasado 10 de agosto y se reunió con el presidente, Abdelmadjid Tebboune; el ministro del Interior, las Colectividades Locales y Planificación Territorial, Kamel Beldjoud, y con el titular de Asuntos Exteriores, Sabri Boukadoum.

De los 35.656 inmigrantes que habían logrado arribar a España hasta finales del pasado mes de noviembre (por vía marítima y terrestre), 10.930 eran de nacionalidad argelina, lo que supone más del triple que en el mismo periodo del año anterior (3.559). Argelia es clave por su ubicación geográfica para las rutas de las mafias que se dedican al tráfico de personas desde África a Europa, siendo un país tanto de origen como de tránsito.

El contrato es por 200.00 euros y supondrá el retorno de un máximo de 120 argelinos a su país

El pasado 1 de diciembre, la Secretaría de Estado de Seguridad declaró de emergencia la contratación de los servicios de flete de al menos tres ferrys para el retorno de migrantes argelinos desde Alicante "de manera inmediata". Interior ha justificado esta fórmula excepcional debido a la "ausencia de transporte regular" que ha provocado el cierre de las fronteras por la pandemia de coronavirus, eligiendo 'a dedo' a Trasmediterránea por tener "disponibilidad y la capacidad logística" necesarias para ejecutar el encargo.

De acuerdo con las condiciones acordadas, en cada uno de los tres barcos viajará "un máximo de 40 inmigrantes irregulares", acompañados por los policías que realizan el correspondiente servicio de escolta. El coste de cada desplazamiento se ha cifrado en 65.000 euros e incluye el traslado de los ciudadanos argelinos y de los agentes, la manutención de ambos grupos y el alojamiento en camarotes de los funcionarios del Cuerpo Nacional, siendo susceptible de que el gasto -según Interior- se pueda financiar con cargo al Fondo de Asilo Migración de Integración (FAMI) de la Unión Europea.

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El contrato que el número dos de Interior, Rafael Pérez, y el director general de Compañía Trasmediterránea SA, Francisco José Oviedo, firmaron electrónicamente el pasado día 11 no especifica las fechas en que tendrían lugar los viajes de retorno. Sí amparaba que éstos pudieran realizarse "desde el mismo día de la firma de la resolución de emergencia", es decir, desde el 1 de diciembre. En todo caso, los tres fletes tendrían que llevarse a cabo antes de que acabe el año.

El pasado 2 de diciembre, en declaraciones a Onda Cero, Grande-Marlaska aseguró que su departamento había empezado ya a hacer retornos de migrantes a los países de origen y tránsito, si bien no pudo precisar cuántas personas habían ya salido de España al no tener derecho a protección internacional.

Cierre de fronteras por la pandemia

En dicha entrevista radiofónica, el titular de Interior destacó la dificultad que han entrañado estas gestiones al estar cerradas las fronteras por la covid-19 y las enmarcó en la política migratoria "constante, determinante, seria y sincera" que el Gobierno de Pedro Sánchez está realizando desde que llegó al poder hacer dos años y medio.

En sus reiteradas comparecencias parlamentarias y declaraciones públicas, el ministro se ha referido a la lucha contra el tráfico de personas y la inmigración irregular como uno de los "ejes prioritarios" de su departamento. Según defiende, la estrategia se basa en la cooperación bilateral con los países de origen y tránsito, la prevención en origen mediante proyectos operativos específicos y el control de las fronteras.

De acuerdo con las estadísticas difundidas por Interior, hasta el pasado 15 de diciembre habían llegado a España por vía marítima 37.781 inmigrantes, un 52,8 % más que en el mismo periodo de 2019 (24.722). Ese año se cerró con un descenso del 57 % respecto a 2018, cuando se contabilizaron 57.498 llegadas.

La mayor presión migratoria la está sufriendo este año Canarias, a cuyas costas han arribado 21.452 irregulares (el 56,77 % de todos los llegados por vía marítima a España). Ello ha obligado al Gobierno a habilitar diversos espacios de acogida en Gran Canaria, Santa Cruz de Tenerife y Fuerteventura mientras se realizan los trámites que desemboquen en los retornos a los países de origen o en la concesión de protección internacional por ser personas vulnerables.