El Parlament, con los votos de la mayoría de JxSí y la CUP, ha dado luz verde este miércoles en comisión al dictamen de la ley del Código Tributario de Cataluña, que "refuerza" la estructura de la futura Ley de la Hacienda Catalana, una de las conocidas como "leyes de desconexión".

El dictamen, que ha sido aprobado en la Comisión de Economía con los votos en contra de PSC y SíQueEsPot -PP y Cs rechazaron participar y no han presentado enmiendas-, da así el visto bueno a llevar al próximo pleno la ley del Código Tributario y de aprobación de los libros primero, segundo y tercero, relativos a la Administración Tributaria de la Generalitat de Cataluña.

PSC y Podemos han votado en contra mientras PP y C's rechazaron participar en la comisión

La norma contiene los principios generales de la ley y "refuerza" y "ordena" organismos ya vigentes como la Agencia Tributaria de Cataluña o la Junta de Finanzas, según fuentes parlamentarias.

Además, también se crea un Instituto de Investigación Fiscal y un Consejo Fiscal, formado por administraciones públicas y sector privado, con entidades sociales del ámbito de la fiscalidad, y que prevé entre otros puntos un registro en el que se podrán inscribir voluntariamente asesores fiscales que cumplan un código de buenas prácticas, aunque en caso de incumplirlo pueden ser sancionados o, en casos graves, se informará a las autoridades competentes.

Una ley del código tributario que se enmarca, según esas fuentes, en el marco competencial autonómico actual, si bien establece una carcasa "imprescindible" con el objetivo de que pueda ser ampliada en la futura Ley de la Hacienda Catalana ya tras una eventual independencia, según han subrayado fuentes de los grupos independentistas.