El desastre anunciado del Mar Menor de este mes de agosto ha dejado un nuevo enfrentamiento entre el gobierno de Pedro Sánchez y un gobierno autonómico gobernado por el Partido Popular. Los reproches mutuos por las competencias sobre la laguna salada más grande de Europa han dejado paso a un acercamiento entre administraciones que tiene en su núcleo la revisión del Plan Vertido Cero.

Tras la visita de Teresa Ribera a las localidades costeras de la laguna y su posterior encuentro con el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, la ministra anunció que la solución del problema pasaba por dejar atrás el Plan Vertido Cero que la administración de Ribera había asumido tras su entrada en el Ministerio. Un plan que tenía previsto un coste de 620 millones de los que 400 recaían en la administración central. Sólo algunas de la actuaciones de ese plan que estaba en marcha se mantienen como la creación de una desnitrificadora y el colector de aguas freáticas del norte del Mar Menor.

"No tiene sentido invertir los más de 300 millones de euros que tenemos hoy ya identificados presupuestariamente en resolver y restaurar un problema si se sigue originando y no se atajan las causas que lo producen, porque sería tirar el dinero", argumentó ayer la vicepresidenta tercera en declaraciones a EFE.

A partir de este primer encuentro las administraciones crearán una comisión de estudio que negociará las actuaciones entre administraciones y revisará el Plan Vertido Cero tal y como está concebido.

El plan, asumido hasta esta semana por Transición Ecológica y el Reto Demográfico, incluía la creación de una red de pozos que depure el agua de los acuíferos y la incorpore a un sistema de regadío centralizado como el existente del agua proveniente del trasvase Tajo-Segura. Este despliegue de pozos no se considera necesario por organizaciones como Greenpeace que reclaman que se usen los pozos existentes y que se se abandone el trasvase Tajo-Segura que según ellos ha creado una cultura del regadío insostenible en el Campo de Cartagena.

R.O.

Un cinturón verde en el Mar Menor

La ministra sorprendió con su propuesta de creación de un cinturón verde que apenas bosquejó y que está por definir. Teresa Ribera debió escuchar con mucho interés las explicaciones de Pedro García, presidente de Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE). El ecologista -que lleva décadas trabajando por el buen estado de la laguna con ANSE y el apoyo de WWF- fue el acompañante de la ministras por la rambla del Albujón y por distintos puntos del litoral afectado del Mar Menor. Las soluciones basadas en la naturaleza son la apuesta de esta organización que defiende la creación de filtros verdes en el litoral del Mar Menor como los que se han creado, con éxito, en la Albufera en Valencia.

Una solución que no estaba en la agenda hasta la visita de la ministra, como nos reconocía Pedro García el pasado 11 de agosto durante la realización de un reportaje en Murcia para conocer la la situación del Mar Menor días antes de la aparición de miles de peces muertos en la laguna. Hemos recuperado el vídeo de la explicación que Pedro García nos dio de las soluciones basadas en naturaleza, en el mismo punto -la rambla del Albujón- en el que estuvo con Teresa Ribera.