'Leonesismo', según la RAE: "amor o apego por lo leonés". De cara a los comicios autonómicos de Castilla y León el próximo 13 de febrero, pese a no ser una piedra angular, sí jugará un papel electoral importante. Es por ello, que todos los partidos políticos que se presentan a nivel regional intentan convertirlo en un concepto maleable que adaptar bajo sus discursos. Incluso, aunque contradigan en parte ciertos aspectos del mismo.

La Unión del Pueblo Leonés (UPL) es la cabeza visible de este movimiento autonomista: persigue consolidar una región leonesa independiente de Castilla e integrada por León, Salamanca y Zamora, pero dentro del marco nacional. Es el denominado Leixit -un guiño al Brexit-. Esa es su máxima. "Lo vamos a conseguir", reza su programa electoral, que justifica esta meta por que con ello se manejarán mejor los recursos y los fondos europeos, se descentralizará el territorio y se hará una mejor planificación para el desarrollo industrial.

Luis Mariano Santos es secretario general de la formación y cabeza de lista a las Cortes por León. Explica a El Independiente que el leonesismo está presente en el debate político para el 13-F. Directa e indirectamente, la campaña "está girando alrededor del problema del leonesismo", dice.

Y el líder de UPL pone algunos ejemplos: "Santiago Abascal habla de la falta de inversiones y del maltrato que sufre León respecto a Valladolid. El PSOE hace una campaña en torno a la 'y' de Castilla y León, poniendo de manifiesto las diferencias que existen entre las dos regiones que componen esta autonomía". "Y, detrás de todo esto, lo que subyace es que más de la mitad de los ayuntamientos leoneses han votado a favor de una nueva autonomía diferente", señala Santos.

La UPL durante un acto electoral en Astorga (León).
La UPL durante un acto electoral en Astorga (León). @UPLeones

Referente leonesista

La UPL es una formación de larga trayectoria y de amplio arraigo institucional. Nace en 1986 por la alianza de varios movimientos leonesistas y políticos salientes de grandes partidos como Alianza Popular, la UCD o el PSOE.

Actualmente posee un perfil progresista en materias como la sanitaria, aunque su ubicación ideológica depende de a quien se le pregunte: centroizquierdista para unos, conservador para otros.

Cuenta con 152 concejales y un procurador en el Parlamento regional. Y, entre sus reivindicaciones está la creación de una autonomía ajena a Castilla comprendida por Zamora, Salamanca y León: el País Leonés. Un retorno, en definitiva, al estado de previo a la Autonomía castellano y leonesa.

Aprovechando el tirón

Es indiscutible que, en mayor o menor grado el leonesismo es parte del tejido social leonés; y todos los partidos se han referido a él de una forma u otra. El PP, para no caer en una especie de 'nacionalismo descafeinado', reivindica una especie de 'leonesismo útil'. Vehicula el sentimiento al mismo tiempo que el castellano, para, finalmente, reforzar ambos dentro del "castellanoleonesismo". "Una contradicción en sí misma" para el secretario general de la UPL.

El PSOE es quizá la fuerza más ambigua en este posicionamiento. Los socialistas defienden un leonesismo relacionado a la 'discriminación' económica en comparación con otras zonas comarcales provocada por los sucesivos ejecutivos populares. Sin otras variables, como las sociales. Esto, sostienen los de Luis Tudanca, se solventará cuando su candidato lidere la Junta.

Al margen de la cuestión monetaria, desde el PSOE "quieren que algunas sesiones parlamentarias o la propia sesión de investidura se haga en León, en la Colegiata de San Isidoro". Eso a Santos le parece "una falta de respeto" y un intento de "engañar a la gente". "Si tu quieres de verdad solucionar los problemas de Castilla y León, no te puedes conformar únicamente con eso. Así no se consigue absolutamente nada", añade el procurador.

"Cuando tratas de 'tonto' al electorado, lo único que haces es tirarte piedras a tu propio tejado", explica el representante de la UPL, que alude a la amalgama de posicionamientos presentes dentro de la estructura socialista. Tienen que saber si quieren que "Valladolid siga concentrando servicios, como quiere Óscar Puente -alcalde de la ciudad-, o que León empiece a tener la capacidad de adoptar las instituciones que se han centralizado durante estos años".

En línea con ese leonesismo, otro de los problemas que la UPL quiere paliar es el de la despoblación: "León pierde 5.000 habitantes al año y hay zonas como Zamora que se están despoblando a marchas forzadas". En eso, le ha salido un nuevo competidor directo: España Vaciada (EV). Santos valora positivamente la incorporación a escena de la plataforma, pero teme que en un momento puntual "advenedizos" se suban "al carro sin ningún criterio ideológico" en León y emulen su actuación. Hace clara referencia a EV en Valladolid: "tu no puedes favorecer la centralización y la economía socioliberal y después decir que crees en las inversiones en el mundo rural".

La "incongruencia"

En la precampaña hacia el 13-F, en un mitin en la leonesa Plaza de San Marcelo, el presidente de Vox Abascal señaló a la provincia como "una de las principales víctimas del estado de las autonomías": "León no es Valladolid", reivindicó. Se trata de un ataque de competencia electoral hacia el PP, al frente del gobierno autonómico desde 1987 y a quien acusa de haber hecho grande a la no capital, invirtiendo allí y haciendo más pequeña la provincia que más rica era".

Es indiscutible que el leonesismo es parte del tejido social leonés, y todos los partidos se han referido a él de una forma u otra

Pero, para Luis Mariano Santos, se trata de la "utilización de la causa leonesa" que ellos reclaman para fortalecerse electoralmente en la zona y aglutinar a grandes capas sociales. "Vienen a decir lo mismo que nosotros llevamos diciendo desde hace mucho tiempo de Zamora, León y Salamanca. Que son víctimas de una autonomía mal configurada -aunque lo usan como reproche al estado autonómico que rechazan, más que como sentimiento real- y mal gestionada durante estos 37 años".

Esta táctica iría en armonía con otra faceta que Vox está destacando aprovechando el tirón mediático de EV y el clima de descontento entre el sector primario: la ruralista. Vox intenta "captar ese voto leonesista, que es mayoritario. Nadie duda que es así, y Abascal intenta liderarlo", argumenta Santos, que, sin embargo, no ve peligro de que se desvirtúe la causa: "aquí ya vino Ayuso, intentó hacer ese mismo guiño y metió la pata porque no saben cual es la realidad. Desde su cortijo de Madrid no saben lo que pasa en las demás partes de España. También lo hizo Casado cuando habló de 'castellanoleonesismo'. Es una incongruencia en sí".

Llave de gobierno

El leonesismo vive su mejor momento político desde hace años: las encuestas de Castilla y León le dan hasta tres procuradores, mejorando en dos al que actualmente ostentan en las Cortes, el propio Santos. Esa representación puede ser esencial para decantar el próximo gobierno a la derecha o a la izquierda.

No obstante, y aunque desean influir en la política autonómica, la negociación de un proyecto de autonomía leonesa será esencial y troncal para iniciar conversaciones con Alfonso Fernández Mañueco y el PP, o Tudanca y el PSOE, las dos candidaturas que parten como favoritas en todas las encuestas. "No nos sentimos alineados ideológicamente con el PP ni con el PSOE, pero somos transversales. Si quieren que nos sentemos a hablar, la región leonesa es la base", indican desde la UPL.