Feijóo ya es presidente del PP, o más padre que presidente, que ya saben que él ha traído la adultez al partido como si trajera el tabaco y el Interviú. Pero también Rajoy era adulto, incluso era su único mérito, un mérito que demostraba comiendo caramelos de abuelo en el Congreso y hablando con refranes y sentencias de barbero, y ya ven cómo resultó aquello. Política para adultos se llama el libro de memorias o humores de Rajoy, ese Rajoy que, como un adulto, se fue a la güisquería dejando a Soraya con su gran bolso de folclórica para sustituirlo en la moción de censura. Cosas de la política adulta. Más cosas de la política adulta: para distanciarse de Vox, Feijóo les dedicó un “dejemos de repartir carnés, de ser más español que nadie”. Antes había dicho esto: “Cómo no voy a querer a los vascos, si tengo un hijo con el 25% como mínimo de su genética vasca”. Sí, ese sinsentido de repartir carnés cuando la nación es cosa genética, científicamente cuantificable. Esto debe de ser la adultez y, claro, la moderación.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El Independiente | El diario digital global en español
- 2 Sánchez huye en la nieve
- 3 Los informativos de las TV pierden 450.000 espectadores en 2024
- 4 No iba a escribir de la serie de Sorogoyen, pero...
- 5 Mohamed VI, el rey que no quería serlo y que usa a la UE para apropiarse del Sáhara
- 6 Ernesto de Hannover la lía en un restaurante de Madrid
- 7 Sánchez, ridículo imborrable
- 8 Polémica en Marruecos por el mapa mostrado por Sánchez
- 9 Este debe ser tu salario para ser clase media en España