El Gobierno vasco le había reclamado un gesto de desagravió a Pedro Sánchez por el papel jugado por las autoridades españolas de la época en el bombardeo de Gernika del 26 de abril de 1937. Por ahora no se producirá, no al menos en esos términos reclamado por el Ejecutivo de Iñigo Urkullu. Pero en este 85 aniversario del bombardeo sobre la localidad vizcaína sí se producirán pasos novedosos. El Gobierno de Pedro Sánchez enviará representación institucional al acto previsto para esta tarde -coincidiendo con la hora del bombardeo- en el cementerio de la Villa y a la conclusión del Consejo de ministros ha hecho pública una declaración institucional de condenad de lo sucedido en Gernika durante aquel día.

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha denunciado "que fue uno de los primeros ataques indiscriminados sobre población civil" que se se ha convertido "en un símbolo internacional contra la barbarie" por el "bombardeo contra personas indefensas": "Reconocemos a las víctimas, y el Gobierno de España condena por primera vez expresamente el bombardeo de Gernika", ha asegurado antes de defender los "principios de verdad, justicia y reparación" como "garantías de no repetición".

Además, esta mañana el presidente del Gobierno ha publicado a través de las redes sociales un mensaje en el que califica como "uno de los episodios más cruentos de la Guerra Civil" el bombardeo de Gernika "por parte de la aviación nazi y fascista" : "85 años después, recordamos este día y a todas sus víctimas. Porque la memoria es imprescindible para seguir construyendo una sociedad democrática y en paz". El mensaje va acompañado de un breve vídeo en el que se recuerda que el bombardeo se produjo "por orden de Franco" y durante el cual se destruyó la localidad y se "ametralló de forma indiscriminada a la población civil". Se recuerda que lo sucedido representa lo más cruel de la guerra y es parte de la memoria "vasca, española y europea": "resulta imposible recordar estos hechos y no establecer un paralelismo con la crueldad de Putin en ucrania y la importancia de mantener viva la memoria. Putin tampoco va a salirse con la suya".

El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria ha agradecido los pasos dados por el Ejecutivo de Sánchez, "a los que damos importancia" por el respaldo al reconocimiento del daño causado y reconocer "la verdad de lo que sucedió y tantas veces fue cuestionado".

El consejero del PSE, Iñaki Arriola, preguntado por el gesto de desagravio ha asegurado que el PSOE y su gobierno no se siente "heredero" de los Ejecutivos de la dictadura: "Somos herederos de los Gobiernos de la República", ha señalado. También el delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, ha evitado reconocer la necesidad de ese desagravio. Ha señalado que ellos nada tienen que ver "con ninguna fuerza sublevada", por lo que ha considerado que la declaración institucional que aprobará el Gobierno es un gesto suficiente.

A lo largo de toda la jornada en la localidad de Gernika están previsto numerosos actos que rememorarán lo sucedido. Está previsto que a los mismos también acudan representantes de la embajada de Ucrania en España. Además, refugiados llegados desde Ucrania han sido los encargados de activar las sirenas que recuerdan las que anunciaron la llegada de los aviones el 26 de abril de 1937.

El presidente Zelensky se refirió el pasado 6 de abril a lo sucedido en Gernika en su intervención ante la Cámara Baja. "Estamos en abril de 2022 pero parece abril de 1937 en Gernika", aseguró.