La excarcelación de seis ex consellers de la Generalitat, cuatro de ellos candidatos en las listas de JxCat y ERC, ha dado un nuevo vuelco a la campaña electoral catalana. Si bien el mantenimiento de Oriol Junqueras en prisión preventiva ha truncado las esperanzas de los republicanos de contrarrestar la campaña de Carles Puigdemont desde Bruselas, la salida de Carles Mundó y Raül Romeva ha dado aire a su discurso.

Igualmente determinante ha sido la excarcelación de Josep Rull y Jordi Turull en la candidatura de JxCat, protagonizada hasta ahora en exclusiva por Carles Puigdemont. Sólo Elsa Artadi ha tenido un claro protagonismo como portavoz oficiosa del ex president en Cataluña, pero siempre con un discurso absolutamente dirigido a presentar a Puigdemont como único argumento de la campaña. Ni siquiera la proliferación de independientes con perfiles públicos de peso como el dramaturgo Joan Lluís Bozzo, la seleccionadora de sincronizada Anna Tarrés o la ilustradora Pilarín Bayés han servido para romper la omnipresencia electoral del ex president.

Con la excarcelación de Rull y Turull, el PDCat, que había sido barrido de la candidatura de Puigdemont, ha vuelto a la campaña. "Son candidatos cien por cien del partido", reconoce una fuente próxima a la formación, y han insuflado ánimos en el equipo de Marta Pascal. Lo hacen con intención, tras ver cómo en el último mes el partido parecía anulado, y cómo ha sido ese partido, o sus dirigentes, los que han dado apoyo a las familias de los encarcelados, como destacó Turull en su primera comparecencia pública.

Al día siguiente de su excarcelación los ex consellers de Presidencia y Territorio protagonizaron una rueda de prensa ad hoc como único acto de campaña del JxCat. El ex presidente participó en ella por videoconferencia, pero fue su paso por la prisión el protagonista de la comparecencia. Desde entonces, Rull y Turull han protagonizado los actos de campaña en Cataluña -no así en Bruselas, donde por razones judiciales obvias no pudieron participar en la marcha del jueves- y entrevistas en todos los medios de ámbito catalán. El PDCat ha vuelto al primer plano.

Dudas sobre Rovira

Otro tanto ha sucedido con Carles Mundó, ex conseller de Justicia y compañero de celda de Junqueras en Estremera. Con un perfil político bajo hasta el 1-O, pese a su profunda fe independentista, Mundó se ha convertido en protagonista de campaña republicana desde la noche misma del lunes, en la que participó de forma inesperada en el inicio de campaña, situando todos los focos mediáticos en la pegada de carteles de ERC.

Mundó ha sido además el primer líder republicano que se ha atrevido a dejar entrever una línea de crítica hacia el ex president Puigdemont, coincidiendo con su ascenso en las encuestas a costa de los republicanos. El ex conseller ha afirmado en RAC1 que el ex president estaba absolutamente determinado a convocar elecciones la noche del 25 de octubre,"y yo hubiera entendido que tomara esa decisión; no sé si fue un error no convocarlas".

Una afirmación que cuestiona tanto la actuación de Puigdemont como la de la número dos de su partido, Marta Rovira, a la que todas las fuentes señalan como una de las principales responsables de que JxS siguiera adelante con la proclamación de independencia por su oposición a una convocatoria electoral.

Las palabras de Mundó avalan la tesis de algunos analistas que lo señalan como el portavoz escogido por Junqueras y su entorno para liderar una campaña marcada hasta ahora por los errores de Rovira. Su denuncia, sin pruebas, de que el Gobierno había amenazado con "muertos en las calles" a la Generalitat ha hecho mella en los republicanos, así como la original idea de proponer un gobierno honorífico presidido por Puigdemont y otro ejecutivo en manos de ERC. La gota que ha colmado el vaso fue su pobre imagen en el cara a cara con Inés Arrimadas en La Sexta, que ha restado apoyos a quien en su momento fue ungida como candidata por Junqueras.

Mención aparte merece Raül Romeva. Quien fuera cabeza de lista de JxS y mano derecha de Junqueras en el Govern ha sido el ex conseller al que más le ha costado incorporarse a la campaña. Lo hizo la noche del jueves en Valls (Tarragona) junto al portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, en un día marcado por la manifestación de Bruselas, pero Mundó recupera el protagonismo el viernes junto a Rovira en el mitin de Blanes (Girona). Una participación más discreta incluso, de momento, que la de la ex consellera Dolors Bassa, quien protagonizó un emotivo acto en su localidad natal al día siguiente de su excarcelación.