Iberdrola suma y sigue. La compañía liderada por Ignacio Sánchez Galán se ha anotado un 40% más de beneficios respecto al mismo período del año anterior gracias a sus negocios en el extranjero. En concreto, la empresa ha tenido unas ganancias de 1.485 millones de euros. Estos números son los primeros en los que la eléctrica ha tenido que abonar el impuesto a las eléctricas creado por el Gobierno.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo creció un 38% en el periodo de enero a marzo, hasta los 4.064 millones de euros debido, principalmente, a la recuperación del déficit de la tarifa regulada SVT en Reino Unido, el mejor desempeño en los países de la Unión Europea por
la normalización de la producción y las menores compras de energía a precios más bajos que el año pasado, así como por el crecimiento en Renovables y Redes.

Respecto a la cifra de ventas de electricidad, la empresa ha indicado que ha aumentado la cifra de negocio hasta los 15.460,6 millones de euros, frente a los 12.150 millones de euros del mismo periodo de 2022.

“La necesidad de una mayor electrificación con renovables, redes y almacenamiento para avanzar en la descarbonización y la autonomía energética está siendo reconocida ya por la política energética y la regulación en nuestros mercados principales, en línea con la estrategia que venimos desarrollando desde hace más de 20 años”, ha señalado el presidente la nota de prensa.

Las inversiones de la compañía alcanzaron los 10.400 millones de euros en el primer trimestre de 2023, lo que supone un 9% más que el mismo periodo del año anterior.

El 91% de la inversión se destinaron a renovables -4.600 millones de euros, de los que un 30% correspondió a eólica marina- y a redes inteligentes -4.800 millones- para acelerar la electrificación y fomentar la autonomía energética.