“Europa, Australia, ¡y el resto del mundo!”. Así daban el paso las presentadoras de Eurovisión 2023 a las votaciones en la segunda semifinal del certamen. Esto puede llamar la atención a muchos espectadores, que se preguntan por qué Australia participa en Eurovisión, un país que es, nada más ni nada menos, que nuestras antípodas. Esto tiene una explicación.

Aunque este hecho seguramente no sorprenda a los eurofans, sí que parece sorprendente que un país que no forma parte del antiguo continente europeo, si bien es cierto que no es el único caso. Israel es un país con larga trayectoria en el certamen musical y tampoco pertenece a Europa. En concreto, Israel lleva participando en Eurovisión desde 1973.

Así, también podríamos contar en la lista a más países no europeos que participan (o han participado) en el certamen, como Azerbaiyán, Chipre, Rusia, Turquía o Marruecos.

¿Y desde cuándo participa Australia en Eurovisión? Su primera participación en el certamen como país concursante, llevando así a un representante que se batiese musicalmente con el resto por el micrófono de cristal, fue en 2015.

La razón por la que Australia participa en Eurovisión

La entidad organizadora de Eurovisión es la Unión Europea de Radiofusión (UER).  Es dicha organización la que establece toda la normativa en torno al concurso internacional de música con más audiencia del planeta.

Según su normativa, los que pueden participar en el concurso son los países que entran en el Área de Radiofusión Europea, en el que aparte de Europa se incluyen los países que bordean el Mediterráneo (Irak, Jordania, Turquía, Ucrania…), lo que explica la participación de algunos de los países mencionados. Pero no el caso de Austraia, que es especial.

La UER se reserva el derecho de invitar a ciertos países en Eurovisión. Australia contaba con una comunidad muy grande de eurofans incluso antes de formar parte del certamen, por lo que se decidió invitar a Australia a participar en 2015. Desde entonces, ha formado parte oficial del elenco.

Por lo tanto, la razón definitiva por la que Australia participa en Eurovisión es la invitación expresa que recibieron de parte de la UER por su amor por la música y concretamente Eurovisión.

Además, cabe recalcar la potente industria musical que tiene Australia, con cantantes de la talla de Kylie Minogue, AC/DC, Sia o Iggy Azalea.

Ya en 2014, una cantante australiana, Jessica Mauboy participó en el certamen (como invitada) para hacer un número especial en la segunda semifinal de Eurovisión 2014. A partir de entonces, el país ha formado parte del concurso de manera oficial.

De hecho, su participación ha sido muy potente desde entonces. En 2016, en su segundo año como participante, acabó en segundo puesto, rozando la posibilidad de hacerse con el premio del micrófono de cristal.

Aunque no todo han sido éxitos. Desde que Australia está en Eurovisión como participante oficial, el país ha tenido puestos irregulares. En el Festival de la Canción de Eurovisión de 2018 en Lisboa (aquel Eurovisión en el que participaron Amaia y Alfred de Operación Triunfo), Australia apostó por Jessica Mauboy, que fue hizo la primera canción de Australia en el certamen, en 2014 (aquella que fue simbólica). Aunque Mauboy ya tenía experiencia en Eurovisión, su puesto fue el número 20.

En la misma línea, en el certamen del 2021, celebrado en Róterdam, el representante australiano Montaigne (que también iba a representar al país el año anterior, en 2020, pero el certamen de Eurovisión 2020 fue cancelado por el coronavirus) no quedó bien. De hecho, no consiguió pasar de las semifinales, de modo que no interpretó su canción en la final.

Teniendo en cuenta las normas, con las mismas, la UER también puede sancionar a ciertos países y no permitirles participar. Ese fue el caso de Rusia, al que se le echó de Eurovisión por la guerra con Ucrania.

Dado que la lista de países que participan en Eurovisión es un concepto abierto, podríamos encontrar otros países que nos den una sorpresa y en un futuro formen parte el concurso musical.

De ese modo, puede que en un futuro no solo nos preguntemos por qué Australia participa en Eurovisión, sino que puede que vaya habiendo más casos de países no europeos que se enfrenten al resto por el premio. E, incluso, que lleguen a ganar.