El lobo, el ganado y el ser humano. Tres esquinas de un triángulo que desde la inclusión del lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE) en septiembre de 2021 han vivido sus días más convulsos. Según denuncian los ganaderos, los ataques a sus animales y sus nervios se han disparado desde la fecha. Se sienten desamparados por el Ministerio para la Transición Energética y el Reto Demográfico (MITECO), ya que, aunque existen excepciones para que los órganos competentes de las comunidades autónomas puedan realizar las conocidas como extracciones (ejecución de los lobos que hayan atacado), la cartera encabezada por Teresa Ribera no ha autorizado ningún control poblacional de la especie, han confirmado fuentes del Ministerio a este diario.

Gaspar Anabitarte, secretario general de UGAM-COAG, condena en conversación con El Independiente "la trampa" del MITECO sobre el plan de gestión del lobo: "Cuando mandaron la versión final, las organizaciones profesionales agrarias le vimos posibilidades; sin embargo, tiene un punto que indica que para que la comunidad autónoma en cuestión acometa las extracciones el Ministerio debe emitir a la consejería de Desarrollo rural un informe dando su visto bueno".

Tal y como explica Anabitarte, "el problema es que dicho informe del Ministerio nunca llega a emitirse, lo que supone una clara dejación de funciones por parte de la Administración. No se ha llevado a cabo ningún control poblacional desde la inclusión del lobo en el LESPRE ni se va a realizar porque al Ministerio no le da la gana", lamenta el secretario general de UGAM-COAG.

Cambios en la gestión del lobo

Los ganaderos de Asturias y Cantabria, dos de las regiones que más sufren los ataques del lobo en España, critican las modificaciones introducidas por el Gobierno en la gestión del lobo. "Cuando Cantabria llegó a tener un plan de gestión del lobo en 2019 y redujo la tensión social que había por la problemática nos impusieron esto. La fortaleza de esa estrategia no estaba en que se evitase que los lobos dejaran de matar, aunque los ataques se estabilizaron, la gran virtud del plan cántabro era que la Consejería enviaba un guarda al día siguiente de que se produjese todo", apunta Anabitarte.

El representante de UGAM-COAG recalca que antes de la entrada del sistema actual "el ganadero sentía que alguien le atendía. Ahora mismo te encuentras 30 ovejas muertas y no solo no te asisten, sino que tienes un Ministerio cuya actitud es de tono menos colaborativa. El lobo está ahí y la gente del campo es la primera que conoce la amenaza. Al final a lo máximo que aspiran es a tener cierta paz porque sepan que se va a actuar si viene el lobo".

La queja de los colectivos agrarios ahonda en que el MITECO entorpece las extracciones del lobo al no emitir los informes preceptivos para poder realizarse, pese a los ataques diarios. En Cantabria, los ataques a la ganadería han supuesto la muerte de 2.436 reses en 2022.

Llamada de auxilio al Defensor del Pueblo

La ausencia de respuesta del MITECO a las solicitudes de las comunidades denunciadas por UGAM-COAG y UPA (Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos) ha llevado a las asociaciones a recurrir al Defensor del Pueblo. "Hemos tomado esta decisión porque no sabemos qué hacer. Le solicitamos al Defensor del Pueblo que inste al MITECO y que nos conteste, que es su obligación", asevera Anabitarte.

La sensación transmitida por los ganaderos es que existe "mala fe en la actuación del MITECO", al que acusan de haber perpetrado una estrategia "perfectamente calculada para lograr la proliferación del lobo hasta un número muy superior al necesario para un estado de conservación favorable, obviando los gravísimos daños que ello causa a las explotaciones ganaderas".

Las organizaciones agrarias consideran que la población actual de lobos es incompatible con su integración en el LESPRE. UGAM-COAG y UPA creen que el tema del lobo debe estar en la campaña electoral y que los partidos que se presentan en Cantabria tienen que "mojarse", ya que el posicionamiento de cada formación al respecto es "importante para el sector". Buen ejemplo de ello es el presidente de Cantabria y candidato del PRC a la reelección, Miguel Ángel Revilla, que ha anunciado recientemente que condicionará los posibles pactos de Gobierno con otros partidos al posicionamiento de estos respecto al lobo.