Pedro Sánchez da un paso más en la carrera hacia las generales del 23 de julio. A su objetivo de "pinchar la burbuja del sanchismo", que dejó que creciera sin calibrar su poder "corrosivo", este lunes sumó otro propósito: ir desgranando medidas. Algunas, de aprobación inmediata. Porque él sigue al frente del Gobierno y este martes su Consejo de Ministros aprueba un nuevo paquete anticrisis de respuesta a la guerra de Ucrania. El presidente confirmó que el real decreto ley prorrogará las principales medidas ya vigentes y además contendrá otras nuevas, como la desgravación del IRFP de un 15% para la compra de vehículos eléctricos, hasta el 31 de diciembre de 2025, que "incentiven esa transición verde".

Lo dijo este lunes el jefe del Ejecutivo en una nueva entrevista, esta vez en Hora 25, en la Cadena SER, en la que también aseguró que sí observa que se está reactivando el electorado progresista y que sigue creyendo que podrá vencer en las generales. Y también está convencido de que "en 20 días", el debate público en España "ha retrocedido en 20 años", por los pactos de PP y Vox.

El decreto sumará elementos "nuevos", también medidas pactadas con Bruselas y "compromisos" del Gobierno, como el derecho al olvido oncológico

"Se van a prorrogar la bajada del IVA de los alimentos, el abono al transporte público y se van a prorrogar todos aquellos elementos sociales que dije desde el principio de la guerra y van a estar siempre encima de la mesa", señaló. Pero además en el real decreto ley se incorporarán "algunos elementos nuevos" que tienen que ver con la "respuesta económica y social" y a las consecuencias de la guerra en Ucrania y "otros tienen que ver con medidas que o bien estaban pactadas con Bruselas y tienen que aprobarse, o bien son compromisos políticos del Gobierno de España".

Entre estos últimos, está el derecho al olvido oncológico, al que se comprometió en la campaña del 28-M y que se había quedado sin asidero del que colgarlo porque la disolución anticipada de las Cámaras impide tramitar proyectos o proposiciones de ley, pero no reales decretos leyes, que simplemente requieren de la convalidación del Congreso. En este caso, de su Diputación Permanente.

En el paquete anticrisis que aprueba este martes el Consejo de Ministros se incluirá, por tanto, una medida nueva como la deducción del 15% en el IRPF de la compra de vehículos eléctricos, iniciativa que va en línea con la transición ecológica verde.

Sánchez aseguró ser "consciente" de las dificultades que atraviesan los españoles por la subida de los precios, y por ello su Gobierno ya ha destinado 45.000 millones de euros a paliar los efectos de la inflación. Respecto a posibles medidas para frenar el alza de las hipotecas variables, una demanda constante que antes le hacía Unidas Podemos y ahora Sumar, el presidente reconoció que sigue hablando con la banca, que es "poco partidario" de "dar recursos económicos desde lo público al sector financiero".

"No creo que sea la solución, creo que tenemos que instar al sector financiero a que evidentemente facilite ese tránsito del tipo variable al tipo fijo en un contexto de endurecimiento de la política monetaria", razonó Sánchez. Era su respuesta a la propuesta de la coalición que lidera Yolanda Díaz de un bono extraordinario de 1.000 euros para ayudar a las familias vulnerables a pagar sus hipotecas por el repunte de los tipos de interés.

5.000 millones al año para llenar la 'hucha de las pensiones'

En ese sentido, también adelantó que el real decreto ley también incorporará una medida comprometida en campaña, el aval por parte del ICO a la compra de vivienda de los jóvenes o de las familias con menores a cargo, iniciativa también muy criticada por los morados por ir en contra de la filosofía de la ley de vivienda, que persigue la promoción de vivienda pública.

Cuestionado por las pensiones, el presidente recordó que su Gobierno aprobó en 2021 su revalorización conforme al IPC y en 2023 la reforma que hace posible su sostenibilidad. Su programa electoral añadirá además el compromiso de llenar la hucha de las pensiones con 5.000 millones de euros al año durante la próxima década para asegurar "la sostenibilidad del sistema a largo plazo".

Sánchez ironiza con la "regla del dos" de Feijóo: él tiene un cargo y dos sueldos, y debe "dar explicaciones" por ello

Tampoco aprecia el presidente propuesta del PP en materia energética. Este lunes, Alberto Núñez Feijóo planteó la reversión del cierre de las nucleares. Sánchez recordó que su Gobierno pactó ese calendario de clausura con las empresas, que llega hasta 2035, y que ahora la pregunta que han de despejar los populares es quién pagaría la factura, si los ciudadanos o el Estado. España, alegó, es conocida internacionalmente por su "apuesta inequívoca" por las energías financieramente competitivas como la eólica o la solar, mientras que l el coste de producción de la electricidad por la energía nuclear es "mucho más caro que el de las renovables".

"Me parece un drama que la derecha española no sea como la derecha alemana que ve en la transición ecológica una fuente de oportunidad de reindustrialización de nuestro país y también convertir a España en una referencia en la adaptación y mitigación al cambio climático", sostuvo, blandiendo su política de expansión de las renovables o medidas como la solución ibérica, que ha permitido bajar la factura de la electricidad en los hogares.

Otra de las propuestas de Feijóo es la de superar los 22 millones de afiliados a la Seguridad Social al final de la legislatura. Un objetivo que vino a calificar de modesto, porque cuando él llegó al Gobierno, en 2018, España contaba con 19 millones de afiliados y ahora son ya casi 21, con la pandemia de por medio. Así que el jefe del PP "está rebajando al 50%" lo conseguido por el Gobierno en los últimos cinco años. Pero Feijóo se hizo un lío cuando enunció su propuesta y su "regla del dos". "En vez de dos es 22, pero es dos, es dos por diez".

"Él llega al 22 multiplicando 2 por 10, pero hay un aspecto en que sí se aplica la regla del dos el señor Feijóo: tiene un cargo y dos sueldos", respondió Sánchez en Hora 25. Y es que el PSOE lleva una semana denunciando que Feijóo reconoció que cobra un sobresueldo de su partido, pero no dio detalles de su importe. "Debe dar explicaciones", le apremió. Este mismo lunes, el PSOE pidió al presidente del Senado, el socialista Ander Gil, que fuerce al jefe del PP a declarar cuánto de más cobra de su formación.

El "tráiler de una película tenebrosa"

A partir de ahí, la entrevista con el periodista Aimar Bretos discurrió por derroteros más políticos. Como la sensación que le recorrió la noche del 28-M, cuando su partido sufrió una debacle que achaca a la "desmovilización" del electorado progresista frente a una hiperactivación de la derecha. Pero después de las urnas los ciudadanos tienen otros dos elementos de análisis. Uno, que la disgregación de la izquierda perjudica a la España progresista, y que ha sido "corregido" con la conformación de Sumar. Dos, que PP y Vox "han decidido sin rubor gobernar allá donde puedan". En este mes se ha visto el "tráiler de una película tenebrosa". "¿Pero de dónde sacan a esta gente?", se preguntó, refiriéndose a los nuevos presidentes de los parlamentos valenciano, balear o aragonés, los tres de Vox, con posiciones antiabortistas, negacionistas de la violencia de género o del cambio climático, hasta antivacunas. "Los votantes de Vox", observó, "son mejores que algunos de sus representantes".

El presidente rechaza abstenerse si Feijóo es primera fuerza, porque la propuesta del PP es que "gobierne siempre" y pone como ejemplo lo ocurrido en Extremadura el 28-M

También cargó contra Feijóo por haber hablado de "divorcio duro", por haber aducido que Carlos Flores, el apartado de la Generalitat por haber sido condenado por violencia machista contra su exmujer, era profesor universitario. "¿Pero qué tiene que ver? Hemos retrocedido en 20 días 20 años en el debate público". Para Sánchez, que haya ya ayuntamientos como el de Náquera (Valencia), que retiran banderas LGTBI o que prohíben las concentraciones por la violencia de género "es reconocer sin ambages que la violencia machista en España no existe". "Por esto creo que lo preocupante no es que Vox se encarame en las instituciones con representantes, sino que el PP se haya ultraderechizado y que haya asumido esos marcos ideológicos", denunció.

Y para que no gobierne con Vox, ¿estaría dispuesto el PSOE a abstenerse?, le preguntó Bretos, recordando que Feijóo se comprometió en la SER a abstenerse si eran los socialistas los más votados. Para Sánchez, lo que está ofreciendo el dirigente gallego es que "gobierne siempre el PP". Y la respuesta de su partido es que no lo aceptará: "Resulta que si el PP es primera fuerza política el PSOE se tiene que abstener. Y si el PP es segunda fuerza se tiene que abstener, como está haciendo en Extremadura. Entiendo esta visión ventajista en el poder legislativo o el judicial, pero comprenderá que yo lo vea extraño. Las cartas están claras, la ciudadanía ha entendido que si PP y Vox pueden gobernar, dará igual que sean primera, segunda o tercera fuerza".

El líder socialista, preguntado de nuevo si es "de hielo", insistió en que no aspira a ser "perfecto", que claro que no es "agradable" que le dediquen apelativos como "Perro Sánchez", pero que en todo momento ha tratado de "no perder la calma y la compostura" y de recordar siempre que él es el presidente del Gobierno y que por tanto representa una institución. En ese punto, señaló que "no hay oposición política" en España. "Hay oposición en grupos mediáticos", sostuvo, "y en un poder económico que señala el camino a la oposición política y mediática", puesto que "hay personas que han creído siempre que este país es suyo". Como hiciera con Jordi Évole el domingo, se negó a señalar, a apuntar nombres concretos de empresarios, medios o periodistas, y volvió a apuntalar su tesis de la desproporción de voces progresistas en relación con las mayoritarias conservadoras, algo que no se corresponde, cree, con la realidad sociológica del país.

Está convencido de que logrará ganar el 23-J y que podrá gobernar con Sumar, pero recuerda que la responsabilidad de su partido es "intransferible"

Sánchez sabe que el 23-J se juega, de un lado, en la activación del electorado de izquierdas, pero también en la habilidad de su partido para impedir las fugas al PP, una transferencia que la encuestadora 40dB cifra en el 9% de los votos recibidos en las generales de 2019. A estos votantes templados el presidente les dijo que si están "preocupados por su economía", que tengan "cuidado" con las propuestas de derogación del PP, porque supondría "gripar el motor de la economía española, que va como un tiro". "¿Va a derogar la subida del salario mínimo, la reforma laboral, la revalorización de las pensiones...? ¿El qué?", se preguntó. Es ahí donde quiere conducir el PSOE a los populares, que expliquen qué es para ellos la "derogación del sanchismo", su eslogan electoral.

El máximo responsable de los socialistas está convencido de que logrará ganar las elecciones, porque observa en las últimas semanas una "reactivación del electorado progresista" que quiere "consolidar" los "avances" de estos años. "Lo tenemos a mano, tenemos al alcance reeditar el Gobierno de coalición", forjar una alianza con Yolanda Díaz, con la que se ha entendido "bien" en esta legislatura, pero la responsabilidad "intransferible" de vencer en estos comicios es de su partido, del PSOE, como ya avisó a los suyos en el último comité federal. De nuevo, auguró una participación alta. Y descartó la propuesta de Sumar de que se amplíen los horarios de votación de la jornada electoral por el calor. El Gobierno quiere conferir normalidad total al 23-J, y además la ley electoral es clara al respecto: los colegios se abren de 9 a 20 horas.