En este ecuador de la campaña electoral, donde ya se han pincelado las principales directrices de la misma, con un alto grado de componente bipartidista, donde los grandes partidos vuelven a tener el foco principal y sus extremos en cada bloque están pasando más desapercibidos que en otras contiendas, será decisivo lo que acontezca estos próximos días para afianzar el voto, movilizarlo o terminar de convencerlo. Ello, frente a la repercusión que tiene en estas generales el voto por correo a través del cual más de 2,6 millones de personas ya lo han planteado de los casi de 37,5 millones que pueden votar.

De todo el abanico de elementos en torno al que gira una campaña electora, caso de los mítines, los debates y las propuestas programáticas [que a veces pasan desapercibidas ante los discursos antagónicos], la cartelería, el eslogan y los vídeos promocionales de la propuesta o el candidato cumplen no un papel determinante, pero sí importante para impostar un marco en el electorado. En muchas ocasiones de manera indirecta, desapercibida, que refuerza el discurso de campaña.

Cada uno de las propuestas es muy diferente entre sí, aunque queda justificada por la posición de cada grupo político. Desde la de Gobierno que viene el PSOE, a la de aspirante de la oposición que busca entrar en Moncloa. Desde un tercero que quiere condicionar la nueva etapa política, a una nueva plataforma que quiere sostener el avance de las políticas ya cimentadas. Estas son las propuestas audiovisuales de PSOE, PP, Vox y Sumar.

PSOE / Pedro Sánchez

El Partido Socialista ha escogido el lema de campaña 'Adelante', una clara declaración de intenciones de lo que quiere transmitir. A simple vista se trata de una propuesta continuista, derivada de su posición de partido de Gobierno.

Tras su visionado, hay dos lecturas claras que pueden hacerse. La primera es la reivindicativa, la de ensalzamiento de la gestión realizada que ha permitido "avanzar". Todo, "pese a los baches en el camino", que aunque no se mencionan son la pandemia de la covid y la guerra de Ucrania, una constante en los discursos de Pedro Sánchez. La segunda lectura del spot es la apelación a la movilización del electorado de izquierdas para evitar un retroceso democrático afianzado durante décadas. Tanto al disconforme con algunas de sus decisiones o políticas, caso del público más centrista que no se ha sentido cómodo con los pactos con EH Bildu o ERC, como a los que están a un pie del abstencionismo tras su paso por Unidas Podemos y que está cansado de las pugnas de las formaciones a la izquierda del tablero.

Es el vídeo más complejo de los cuatro, y cuenta con mucha carga informativa condensada en 1 minuto y 10 segundos. La encargada de articular ambos relatos es un personaje anónimo, pero que no puede dejarse de destacar, porque es el prototipo de perfil que Sánchez busca afianzar. Mujer, joven, y en la treintena de edad o ligeramente pasados los cuarenta. Un prototipo generalmente comprometido con la causa feminista y que se ha podido sentir agravada por las políticas del Gobierno en este área. Sobre todo con legislaciones como la del 'solo sí es sí'.

El entorno elegido para el desarrollo del mensaje no es menor. Acontece en un paraje natural y tranquilo; en un atardecer, que puede reflejar el ocaso de la legislatura mientras se pide seguir 'adelante' para una nueva. "El camino no ha terminado", indica la protagonista a la vez que lo transita físicamente. Ya centrados en el propio mensaje, la reivindicación que se hace se acompaña con instantáneas. "Conozco este camino, yo era tan solo una niña. Me lo enseñaron mis padres, lo tejieron las vecinas, lo construyeron los pueblos. Hoy que lo cruzo de nuevo, adelante", comienza la narradora como introducción. Hace referencia a la conquista de derechos sociales desde la entrada de la democracia y se insta a continuar en esa línea.

"Hemos llegado muy lejos" y "hemos hecho que pase" se expone, reivindicando que esto se ha logrado con el PSOE, que recupera el eslogan de la campaña de abril de 2019, tras la 'foto de Colón'. "Hemos elegido lo que pensamos, lo que sentimos" se dice, añadiendo una foto del Orgullo LGTBI en plena polémica por la retirada de algunas banderas en ayuntamientos donde está Vox. Se enumeran los logros, como "las pensiones de nuestros mayores, el futuro de nuestros jóvenes, los empleos dignos con salarios garantizados". "Dijimos sí a derechos sociales, a políticas de bienestar, a contratos indefinidos, a familias obreras, a las madres y a la dignidad y a la Memoria", esto último con una clara intencionalidad de evocar la Guerra Civil y la dictadura para enlazarlo con el siguiente eje: la movilización frente a un gobierno de PP con Vox.

"Hemos visto a nuestros abuelos salir del terror y del miedo. Los acompañamos a votar y lo hicimos con todas nuestras fuerzas", se indica. "Somos una España que avanza mientras algunos retroceden, odian y destruyen". Y tras ello, piden el voto y la movilización frente un cambio: "este viaje no puede terminar aquí, adelante". A resaltar, es el único vídeo electoral en el que no sale el candidato pese a tratarse la del PSOE de una campaña claramente personalista liderada y con decisiones tomadas exclusivamente por Sánchez y su círculo más próximo. En este caso, se intenta reflejar que no está en juego la continuidad de los políticos, sino los derechos. Fuentes del PSOE indican el resto de contenidos audiovisuales son de elaboración propia, pero este spot se ha contratado de manera externa. Por confidencialidad no datan el origen.


PP / Alberto Núñez Feijóo

Hay una notable diferencia respecto al vídeo del PSOE. El eslogan escogido para la campaña es 'Es el momento'. Y sobre él se mueve todo el contenido de la grabación. Aunque hay que decir que el PP ya cuenta con otro vídeo complementario de diez minutos en el que Feijóo aborda su vida. Este spot, en cambio, es de oposición y muestra un único objetivo y mensaje: la salida de Sánchez del poder para que todo empiece a ir bien. Es simple, directo y clásico.

A diferencia de los socialistas, el PP evita hacer reivindicaciones concretas. Y es que se quiere adherir a la mayoría de personas posibles, y pronunciarse sobre cualquier cuestión no suma, de hecho puede restar. Sánchez es el objetivo tras cinco años, y ahora "es el momento" de ganarle en las urnas. No lo era en la moción de censura, se puede llegar a leer en un trasfondo, sino en esta ocasión. El PP, de hecho, argumentaba que las municipales y autonómicas, y después las urnas en las generales, serían "la mejor moción" a su gestión.

La apelación al público que hace el PP es amplia, para una mayoría suficiente. Gente que madruga, trabajadores que inician su jornada [varias personas salen de sus casas a primera hora de la mañana en el vídeo]. Son estudiantes jóvenes, obreros, barrenderos, jubilados, pescadores, floristas, fruteros... Cogen el transporte público, lo que es un llamamiento a las clases bajas-medias. Todo se desarrolla en una ciudad donde hay costa. Perfiles anónimos y plurales. Todos descontentos con las políticas del PSOE. "Nos han engañado muchas veces. A ti, a mí y a todos. Y ahora nos dicen que son cambios de opinión", apuntan respecto a la justificación del presidente del Gobierno tras los indultos a los líderes independentistas o a la entrada de Podemos en el Ejecutivo.

"Por su propio interés han marcado un rumbo contrario a la mayoría, han convertido en ley sus ocurrencias [sale una joven suspirando, por lo que puede enlazarse con las políticas de Igualdad] y lo hemos pagado caro durante cuatro largos años [tres palabras que se remarcan con firmeza] repitiéndonos cada día aquello de 'ya vendrán tiempos mejores'. En ese momento se añade un plano de un suelo adoquinado y una persona pasa de estar en la sombra a dejarse iluminar por el sol, por lo que se indica: "Ese momento ha llegado". La palabra 'momento' se reitera.

"Ahora es el momento de recuperar la ilusión y la esperanza. De que todo lo bueno que nos merecemos ocurra de verdad". Y tras esa frase, una mujer mira a una valla publicitaria en la que sale el cartel de Feijóo. Se carga a la imagen de Feijóo de la capacidad de cumplir ese cometido, solo al PP [frente a Vox]. Cierra el spot un corte del gallego en un mitin dando las gracias y aplaudiendo. Ante la petición de la autoría del vídeo, el PP no se ha posicionado al cierre de esta edición.


Vox / Santiago Abascal

El partido ultra ha escogido el lema 'Vota lo que importa'. En su promoción audiovisual, la cual han desarrollado ellos mismos, hay dos puestas en valor. La primera es el del liderazgo, apelando solo a él y a la 'épica' construida en torno a Santiago Abascal. Desde su etapa como concejal del PP en País Vasco mientras ETA estaba activa, hasta la última desde el Congreso de los Diputados. Por otro lado, hay una intención clara para reivindicar los valores tradicionales que sin Vox "no se protegen". Todo ello confluye con la exaltación del patriotismo como eje troncal.

"Si nosotros no estamos, nadie lo dirá", asegura el propio Abascal en el vídeo. Un órdago directo al PP, a quien se le recrimina centrarse solo en la gestión económica, y lo que sirve de justificación para querer entrar en un potencial gobierno.

La convergencia entre liderazgo y valores tradicionales tiene como finalidad última la protección de la nación, ese es el principal mensaje que expone Vox. Y por ello, la heterogeneidad es secundaria, no hay diferencias ante una bandera, que es la española. De ahí que las rojigualdas y la imagen de la masa social exhibiéndola sea recurrente. "Cuántos hijos de comerciantes, y obreros, y estudiantes, y parados; de médicos, de jueces, de hombres del campo, y de la mar se pondrán en pie olvidando cualquier diferencia cuando sientan amenazada su patria", expresa Abascal en un discurso parlamentario al que se atiende en el spot. "El futuro nos pertenece a nosotros, a los patriotas", delimita Abascal, esbozando quien tiene esa capacidad de cambio y quien entra en el canon de buenos españoles, todos los que no apoyan a los partidos del Gobierno y los socios.

Cuando se enumeran las profesiones anteriores, se habla en masculino. Es el target potencial de Vox, con entre siete u ocho votantes hombre frente a dos de cada diez mujeres aproximadamente. Señalar que el vídeo acontece con imágenes de Abascal, desde sus inicios, al comienzo de Vox micrófono en mano, hasta llegar a la tribuna de las Cortes. Eso evoca progreso y ascenso, pero también demanda de continuidad. Y todo sin importar las críticas por la defensa de esos valores que el partido cree necesarios: "los insultos nos los ponemos como medallas en el pecho".

Al final de un vídeo muy emocional, Abascal te apela directamente y te pide el voto con serenidad. El vídeo termina exhibiendo los principales eje de campaña, esos valores con los que se quiere reconectar: seguridad, familia, libertad, fronteras, industria y campo.


Sumar / Yolanda Díaz

Sobre esa serenidad precisamente, asienta la candidata de Sumar Yolanda Díaz un primer anuncio electoral. También en el personalismo exacerbado frente a la novedad y su único aval: su gestión en el Ejecutivo frente a la inexperiencia de su marca como tal. En primer plano, la actual vicepresidenta y ministra te habla mientras el plano se cierra sutilmente. Si cortes intermedios y con música tenue e instrumental de piano.

Es el más sencillo de los cuatro y tiene líneas paralelas con el del PSOE, pero sin reivindicaciones. Solo se establece la dicotomía nosotros-ellos. "Nuestra vida y prosperidad frente a los que creen que el país les pertenece": o la izquierda o el PP y Vox. Se recalca que estas elecciones no son unas cualquieras, sino que hay un futuro en juego. "Esta batalla va de tu vida, de nuestras vidas. Y la vamos a ganar". De seguido aparece el eslogan empleado, 'Es por tí'. Que como el PSOE, pone en primer plano a los votantes y no a los políticos, especialmente tras el ruido que ha habido en el proceso de acuerdo para la marca con Podemos.

Este jueves, Sumar ha publicado otro vídeo de campaña, en la mitad de la misma, para pedir el voto que contrasta notablemente con el anterior. Aquí sí hay reivindicación de la gestión [el SMI, el trabajo estable y permisos de cuidado]. Se ausenta el culto al liderazgo y se pone en el medio al elector [se intercalan imágenes de asistentes a actos de Sumar], resaltándose los perfiles clave: mujeres, jóvenes, trabajadores y ancianos, quienes tiene rostro expectante frente al discurso. Este se centra en configurar el por qué la formación magenta es necesaria: no se aboga por el ruido o los insultos y los gritos, sino por el utilitarismo y las certezas para que "la vida sea mejor y más fácil".

Hay nuevamente una llamada a la unidad frente a la pluralidad de fuerzas que componen el bloque de izquierdas, a veces con intereses particulares. "Sumar existe porque sabemos que la vida se defiende mejor con más gente", narra Díaz, que niega que haya reto incapaz de afrontarse. Y ante el PSOE, que puede estar copando gran parte de su potencial sufragio por voto útil, Díaz pide que no se vote por "miedo", sino por convicción para seguir profundizando en mejoras: "las cosas van mejor, aunque sigues sin llegar a fin de mes".

La campaña que está buscando hacer Sumar es propositiva frente a una claramente negativa del PSOE. Esa línea la sigue Sumar en sus propuestas audiovisuales, aunque los socialistas añaden algo de positividad cuando se enarbola la gestión. El PP también apuesta por la negatividad, por la oposición al antagonista, mientras que Vox huye de propuestas, aboga por la positividad y evoca a futuro simplemente. Sin confrontaciones.