El arranque de los viajes del Imserso se ve de nuevo amenazado por los recursos de las empresas turísticas que presentaron ofertas y quedaron descartadas tras la adjudicación de los tres lotes a Ávoris Corporación Empresarial (la división de viajes del grupo Barceló) por parte del organismo dependiente del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y que lidera ahora en funciones Ione Belarra.

El comienzo en plazo de la temporada 2023-2024 de viajes para mayores que organiza el Instituto de Mayores y Servicios Sociales peligra seriamente ante la cascada de impugnaciones ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales de los tres grupos que han quedado fuera de la adjudicación. En total, son 886.269 plazas (70.000 más que el pasado año). Soltour, Mundiplan y Seniorplan han presentado recurso contra la decisión de que tanto el lote de 'Turismo de Escapadas y Procedencia Europea' como el de 'Costa Peninsular' y el de 'Islas' vayan a parar a una misma compañía.

¿Quién está detrás de esas marcas? En primer lugar, Soltour es el turoperador del Grupo Piñero, propietario de la cadena de hoteles Bahía Príncipe. Va de la mano con Guest Incoming, una agencia de viajes receptiva para el Mediterráneo.

Por su parte, Mundiplan es una unión temporal de empresas (UTE) formada por la aerolínea Iberia, el gigante de los autocares Alsa y la agencia de viajes IAG7. Asimismo, Seniorplan está formada por Nautalia, Seniorplan y Autocares Vera, que se presentó al lote 3 de turismo interior y naturaleza. Nautalia es una de las mayores agencias de viajes, con más de 600 profesionales y más de 200 oficinas repartidas por todo el país.

El tribunal tiene un plazo de diez días para decidir si admite a trámite los recursos. Si la respuesta es positiva, habría que reevaluar todas las propuestas. Los propios recurrentes, que tenían hasta el pasado viernes de límite para impugnar, se muestran conscientes del perjuicio en cadena que sus impugnaciones pueden causar al programa.

"Soltour ha intentado en todo momento trabajar con la máxima celeridad para no entorpecer el programa del Imserso y por consecuencia, ni al resto de competidores, ni de hoteleros, ni proveedores y, por supuesto, para las personas mayores que participan del programa", expresan desde el turoperador del Grupo Piñero.

La compañía, que se presenta de la mano de considera que la adjudicación de los viajes no se hizo con arreglo a las bases del pliego de contratación. Y precisamente, para evitar tener que presentar recurso a la adjudicación, enviaron ya un alegato a la decisión provisional. “Nos preocupa mucho que nuestras quejas puedan provocar retrasos o perjudicar al resto de licitadores, a hoteleros y sobre todo a nuestros mayores”, destaca Tomeu Bennasar, CEO de Soltour Travel Partners. Ahora, esperan "un resultado favorable por parte de la Mesa de Contratación cuanto antes" y esperan que esta vez se tenga en cuenta la argumentación técnica presentada.

De momento, en Ávoris dicen seguir trabajand0 con normalidad a la espera de la resolución final de los recursos. En este sentido, esperan que el pronunciamiento del tribunal adscrito al Ministerio de Hacienda llegue a tiempo para que el programa se pueda comercializar sin mucho retraso respecto a las fechas habituales. Desde el Ministerio de Derechos Sociales trasladan que tan sólo se ha confirmado la presentación de recursos por parte de las empresas. "Todavía desconocemos si se admitirán a trámite, por lo que no planteamos un escenario de retraso del inicio de los viajes para esta temporada", explican a El Independiente.

Ávoris logró la máxima puntuación en los tres lotes de un programa cuyo valor está estimado en 842,9 millones de euros. La subvención del Gobierno es de 71,7 millones. El lote de Costa Peninsular tiene 443.887 plazas; el de costa insular, 230.039; y el de interior cuenta con otras 212.343. Los precios se incrementaron un 7,5% respecto a la pasada edición, con un presupuesto un 14% superior, unos 300 millones.

Cierres y ERE en los hoteles valencianos

Los hoteleros se muestran especialmente preocupados por la posible demora y se quejan de que el Gobierno haya dilatado el proceso. Los empresarios valencianos dicen verse "ante la imposibilidad de planificar actividad empresarial en los próximos meses" y advierten ya de la posibilidad de que se produzcan cierres de establecimientos y afecte al empleo. Precisamente, el Imserso no tiene solo un fin social como una prestación más por parte de la Administración, sino que también contribuye a mitigar la estacionalidad y a mantener los puestos de trabajo durante la temporada baja en las zonas turísticas.

A unos días de que arranque septiembre y tras una temporada de inicio de la recuperación de la actividad turística, los hoteleros de la Comunidad Valenciana avisan de que los directivos hoteleros se están planteando "cierres anticipados en los hoteles, e incluso peticiones de expedientes de regulación de empleo ante la incertidumbre de la puesta en marcha, y sin disponer de ninguna garantía sobre las habitaciones comprometidas previamente al programa".

En el año 2015, el programa no pudo ponerse en marcha hasta mediados de noviembre precisamente por los recursos empresariales. Pero por aquel entonces, tanto la adjudicación como las impugnaciones se hicieron antes del mes de julio. "Las noticias sobre los recursos presentados a la adjudicación del programa Imserso, hacen ponernos en la peor situación (...) el panorama para este año es desolador", sentencian.

En 2019, Mundiplan y Turismo Social se hicieron con los lotes, aunque el programa tuvo que ser suspendido por la llegada del coronavirus. Los pliegos de aquella temporada fueron recurridos, en aquella ocasión, por la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) por las tarifas que se imponían a los establecimientos.

En esta ocasión, la patronal valenciana considera que el programa que pretendía resolver carencias de convocatorias anteriores está demostrando "seguir estando mal diseñado, y sobre todo con una adjudicación tardía y de muy dudosa legitimidad".

En la temporada anterior, el Gobierno Valenciano todavía en manos del socialista Ximo Puig estableció una ayuda a los empresarios para compensar el escenario inflacionista y el incremento de costes que había hecho, según sostienen, "inviable el desarrollo de la actividad hotelera con el Imserso, a los precios a los que se había contratado, rondando los 22€/estancia/día".

En este sentido, reconocen que los más de 50 establecimientos hoteleros de la Comunidad Valenciana que participan en el programa "se vieron respaldados por el Gobierno Valenciano y la diputación provincial de Alicante". En este sentido, elogian que salieran "sin dudar a mantener la actividad laboral y económica de aquellos destinos donde los hoteles trabajan con Imserso: Benidorm, Peñíscola, Gandía, Finestrat, Guardamar del Segura, Torrevieja, Denia, Calp, Jávea, L´Alfas del Pi, Vinaròs, y Benicàssim".

Según sus cálculos, el gasto total de los turistas del programa de viajes para mayores en la región ascendió a 77 millones de euros, y contribuyó a mantener 3.000 empleos directos y 10.000 empleos indirectos. Tuvo también, añaden, "un efecto en toda la cadena de valor, como proveedores de productos y servicios, tejido comercial hostelero, pasando por excursiones y visitas culturales".