86 Premios Nobel han firmado una petición para la liberación inmediata de los niños secuestrados, dirigiéndose hoy a la ONU junto a embajadores israelíes y estadounidenses para instar a los líderes mundiales a actuar ahora.

La súplica, que presentó el sábado por la tarde el profesor Daniel Kahneman, en representación de los premios Nobel, y Alana Zeitchik y Liam Lindsay, familiares de las gemelas Emma y Julie de 3 años secuestradas y Amelia de 5 años, y frente a las familias de los niños secuestrados, pide la liberación inmediata de los niños secuestrados en Gaza.

Esta petición cuenta con el apoyo de 86 de los científicos y pensadores más destacados del mundo, incluidos Premios Nobel como Shirin Ebadi, Premio Nobel de la Paz 2003; Ellen Johnson Sirleaf, Premio Nobel de la Paz 2011; Daniel Kahneman, Premio Nobel de Economía 2002; Aaron Ciechanover, Premio Nobel de Química 2004; Patrick Modiano, Premio Nobel de Literatura 2014; José Ramos-Horta, Premio Nobel de la Paz 1996; Olga Tokarczuk, Premio Nobel de Literatura 2018, entre otros.

Los galardonados expresan un mensaje conmovedor: “A lo largo de la historia de la humanidad, se han desarrollado guerras, pero la humanidad siempre ha trazado la línea entre los actos de guerra y los crímenes de guerra. Ninguna guerra debería jamás tolerar atrocidades masivas. Ninguna guerra normalizará los actos de violación y tortura. La guerra nunca permitirá el cautiverio de niños pequeños inocentes en medio de un confinamiento infernal”.

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Sumándose a su voz, enfatizan, “durante el ataque, Hamás secuestró a cientos de soldados israelíes y civiles, incluidos niños de edades comprendidas entre 6 meses y 18 años. Los niños nunca deben ser considerados peones en el teatro de la guerra”.

Los premios Nobel afirman que "el alma de un niño es diferente a la de un adulto. Es nuestro deber proteger a los inocentes y proteger a los vulnerables. Es nuestro deber salvar a nuestros hijos. Las imágenes y palabras angustiosas que presenciamos hoy evocan recuerdos de tiempos más oscuros, tiempos que nosotros, la humanidad como colectivo, esperábamos dejar atrás".

Los firmantes de la petición declaran inequívocamente que el secuestro y el encarcelamiento de niños es un crimen de guerra y una profunda injusticia moral contra la humanidad en su conjunto. Su mensaje concluye con una demanda rotunda: "Dejen ir a los niños".

Embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan: "Tras la bárbara masacre llevada a cabo por Hamás, que trágicamente se cobró la vida de niños, mujeres y ancianos, la ONU parece haberse desviado de su misión principal de prevenir y combatir los horrores y los crímenes de guerra "Las Naciones Unidas aparentemente han pasado por alto el sufrimiento de los ciudadanos israelíes, incluido el secuestro de niños y bebés inocentes. Esta representa la última oportunidad de las Naciones Unidas para demostrar su relevancia y humanidad. Imploro al Secretario General que despierte a la profunda importancia de las vidas de niños secuestrados, hasta el punto de que su bienestar resuena profundamente en su interior, y que es inquebrantable en su compromiso de dar prioridad a los niños inocentes secuestrados por terroristas antes que a ayudar a aquellos en Gaza que apoyan la violencia bárbara de los terroristas. brújula moral apasionada, y le imploro sinceramente que preste atención de todo corazón a su mensaje".