Podría decirse que sobre la detención de Cándido Conde-Pumpido junior ha caído la tormenta perfecta. Su padre, el presidente del Tribunal Constitucional, está en el ojo del huracán a expensas de que el Gobierno apruebe la ley de amnistía y de que todo el peso de su validación dentro de la Carta Magna caiga sobre el órgano que preside. Y él, primogénito de una familia muy vinculada al Derecho, acaba de terminar una relación con la televisiva Lara Dibildos lo que le ha valido para copar parte de la prensa rosa y llevar su fama a los círculos del papel cuché.
Con todos estos ingredientes, el arresto del abogado penalista dejó a pocos indiferentes cuando saltó la noticia este domingo. El delito de agresión sexual grupal por el que la Policía Nacional lo tuvo casi dos días en el calabozo es discutido por su letrado que habla de una acusación totalmente inventada para, según insinúa, desprestigiar a su padre. La titular del Juzgado de Instrucción número 44 de Madrid vio consistencia en el relato de la mujer que lo denunció a él y a otros dos amigos que niegan los hechos.
La carrera de Conde-Pumpido Varela no ha estado exenta de controversia, con una imputación en la Audiencia Nacional incluida, si bien todo ha quedado siempre en agua de borrajas. Este año parecía estar siendo uno muy bueno para el letrado, puesto que en junio la Sociedad Europea de Fomento Social y Cultura le otorgó el Premio Toga de Oro a la excelencia jurídica. A la gala acudió rodeado de amigos entre los que es encontraba Rafael Amargo.
La defensa del bailarín, que está acusado de tráfico de drogas, la lideró durante un tiempo precisamente él que consiguió inicialmente que Amargo no entrara en prisión. Las imágenes de abogado y cliente al salir de los Juzgados de Plaza de Castilla con el auto de libertad en la mano recorrieron las televisiones españolas. Ambos se fundieron en un abrazo.
A sus 35 años, es socio fundador de su propio despacho de Derecho penal económico y siempre ha estado cerca de objetivos y focos colaborando en distintas tertulias de tele, vinculado siempre a la visión legal de los temas. Fue también defensor de Elpidio Silva cuando lo inhabilitaron por el 'caso Blesa' y el recorrido de su trayectoria ha estado vinculado a la sombra alargada de su padre, uno de los juristas más conocidos del país que ha pasado por las direcciones de los principales órganos judiciales españoles: desde la Fiscalía General del Estado hasta la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.
El 'caso Bandenia' y los correos a una jueza
Anticorrupción pidió en diciembre de 2018 imputar Conde-Pumpido junior por, presuntamente, blanquear un millón de euros en el 'caso Bandenia' de euros provenientes de negocios oscuros como el narcotráfico o la prostitución. Lo hacía, según el relato de Fiscalía, a través de una banca privada llamada Bandenia que no estaba registrada en España y que se analizaba como un supuesto chiringuito financiero. El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata lo citó como imputado, pero después de que lo negara todo el caso se archivó para él.
Tres años antes en 2015, vivió una de sus primeras polémicas contra una magistrada gallega. La jueza instructora del 'caso Pokémon', Pilar de Lara, que analizaba la corrupción política de, entre otros, el líder de los socialistas gallegos (José Ramón Gómez Besteiro) a quien él defendía, dijo que el abogado la había coaccionado en unos correos haciendo gala de sus "influencias" en el Poder Judicial. Él también negó los hechos.
La agresión sexual a la que se enfrenta es, posiblemente, una de las acusaciones más gruesas que ha caído sobre él. Fuentes policiales explican que la mujer de origen brasileño llamó a la Policía al salir del chalet del letrado y los agentes la acompañaron al Hospital para realizarle un informe médico en el que acreditaron que las lesiones que tenía eran compatibles con una violación. Fue por eso que los policías acudieron a detenerlo a él y a otros dos conocidos del abogado.
Sin embargo, su abogado ha desacreditado punto por punto lo que pone en la denuncia y lo ha definido como "barbaridades e infamias" en una entrevista en 'Onda Cero'. El letrado Ricardo Álvarez-Ossorio ha expuesto que la denunciante "si no era" una prostituta "tenía toda la pinta" aunque, según él, Conde-Pumpido nunca pagó por sus servicios. Se conocieron en un lugar de copas y ella pasó varios días en su casa "autoincertada" porque el letrado quería que se marchara y ella insistía en quedarse. "Se empieza a sentir asfixiado. Y cuando sucede esto esa mujer lleva en su casa más de tres días. Ya tiene situación de agotamiento de esta persona y le estaba pidiendo que por favor se fuera. Ella no se iba ni con agua caliente", explicó en la entrevista radiofónica. Al final, Pumpido la echó y ella llamó al 091.
Álvarez Ossorio, quien se ha confesado amigo de su cliente, es igualmente un reconocido penalista con un amplio conocimiento de los delitos de narcotráfico en la zona de Cádiz y de la Costa del Sol. Ha ejercido la defensa de numerosos narcos, tanto es así que en 2018 La Sexta acudió a realizarle una entrevista al que denominaron el 'abogado del diablo'. Para el letrado, este caso es "en 30 años de carrera el más palmario de denuncia falsa" y según su versión "llegará el archivo como llegará la imputación de esta señora".
Cándido Conde-Pumpido Jr en el papel cuché
Por otro lado, Cándido Jr. ha sido protagonista de la crónica social en los últimos meses gracias a su relación con Lara Dibildos. Se conocieron en abril en una boda en el Palacio de Liria, cuando la socialité estaba todavía superando el fallecimiento de su madre, Laura Valenzuela, un mes antes.
En julio, Lara Dibildos admitió que se estaban conociendo, pero viajaron juntos y disfrutaron de un verano lleno de planes románticos. En septiembre, durante una aparición televisiva en Antena 3 y tras haber celebrado su cumpleaños conjuntamente, admitió que estaba muy ilusionada por su relación. Hacía seis años que la socialité vivía y disfrutaba de la soltería, pero este romance había traído una alegría renovada a su vida, señaló.
En cambio, el pasado 24 de octubre Lara admitió en Mañaneros (de RTVE) que habían roto, una decisión de "mutuo acuerdo", tal y como confirmó después, y que no había tenido nada que ver con terceras personas. En teoría, había sido la convivencia la que había desgastado su relación, pero entre ellos no había "malos rollos" tras su ruptura. "La convivencia cuando ya tenemos una edad es más complicada", añadía.
Su faceta mediática incluye también numerosas apariciones como colaborador televisivo en Espejo Público. Y lo más inesperado, un grupo de rock español llamado 'Alijo'. Cándido es el líder de la banda y, aunque está inactiva, en mayo de 2022 admitía sentirse orgulloso de que tenían aún 1.600 oyentes mensuales.
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hace 1 año
Es muy posible que la denuncia de la brasileña no sea creíble. Otra cosa es que a este Cándido de nombre, que no de personalidad y hechos, yo no le compraría un coche usado. O sea, que no iría con el ni a la vuelta de la esquina.