Que la eutanasia sea una prestación más del Sistema de Salud en España es una realidad que está cada vez más cerca. Tras muchos intentos –más de una decena de veces lo habían llevado distintos grupos políticos al Congreso – ha sido hoy cuando el Pleno de la Cámara ha aceptado iniciar los trámites para aprobar la Ley de Eutanasia propuesta por el PSOE, con el único voto en contra del Partido Popular.
Los socialistas registraron el proyecto de ley el pasado mayo y, en una suerte de ensayo general, el Congreso ya admitió a trámite la despenalización de la eutanasia (sacarla del Código Penal) a principios de junio. Con esos mismos apoyos, el de Unidos Podemos, las mareas, el PNV y la mayoría del Grupo Mixto, además del de Ciudadanos (que se abstuvo en la despenalización) y los votos en contra del PP y UPN, hoy se abrirá el proceso para regular la eutanasia en España.
El apoyo de Podemos, que suma junto a las Mareas 67 diputados, es clave para que se pueda tramitar la ley y fuentes cercanas al partido han adelantado que así será a pesar de que apenas hace un año el PSOE no hizo lo mismo. Los socialistas votaron en contra de la propuesta de ley sobre la eutanasia que Unidos Podemos presentó en el Congreso. Aunque Podemos no encontró el apoyo del PSOE, fuentes del partido aseguran que la formación no hará lo mismo. “Antepondremos la solución a los problemas de la población a los tiempos políticos y necesidades del partido”.
También Ciudadanos confirmó que apoyaría la iniciativa del PSOE aunque están centrados en la tramitación de la Ley de Dignidad al Final de la Vida (de cuidados paliativos), que se encuentra ya en proceso de tramitación en el Congreso.
Una nueva prestación sanitaria
La ley propuesta por el PSOE incluye la eutanasia como una prestación más del SNS en el que el propio paciente, según sus “valores vitales”, con una discapacidad “grave”, un sufrimiento físico y psíquico “intolerable, insoportable e irreversible”, una “altísima” dependencia a otras personas y con un diagnóstico realizado por un profesional sanitario, quien deberá pedir la eutanasia.
Los médicos se han mostrado en contra de la eutanasia pero tendrían libertad de conciencia para practicarla
Una vez solicitada, y tras ser informado y formado debidamente por un profesional médico, deberá contar con una segunda opinión y, posteriormente, pasar por las comisiones de seguimiento de las distintas comunidades autónomas, quienes tendrían la última palabra como consecuencia de la transferencia de competencias en materia de sanidad. Este proceso no podría tardar más de 32 días desde la petición hasta la resolución final. Además, tal y como han asegurado los representantes del PSOE, los médicos podrían apelar a la objeción de conciencia para no practicarla.
Objeción con la que es probable que muchos pacientes se encuentren, ya que desde la Organización Médica Colegial, la profesión se ha mostrado en contra de la eutanasia.
España se convertiría, en el momento de aprobarse la ley, en el quinto país de Europa en regular la eutanasia tras Holanda, Bélgica, Suiza y Luxemburgo. Al otro lado del océano, Canadá y Colombia también aprueban legalmente la eutanasia.
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