¿Necesito un coach? Según Bernard Hiller, coach de actores y también de vida, todo el mundo debería tener uno. Una persona que les guíe y les ayude a tomar decisiones, sin importar el ámbito. Una especie de Pepito Grillo que te ofrece posibilidades y alternativas cuando no sabes cómo seguir adelante. "Actuar es una técnica, tienes que aprenderlo igual que tocar el piano", asegura Hiller, que ha estado en Madrid presentando su libro y ofreciendo una masterclass a aquel que quisiera aprender de su arte.

Bernardo Hiller nació en Buenos Aires hace 61 años. Sus padres eran judíos y habían huido de Europa, así que se establecieron en Argentina antes de volver a mudarse, finalmente en Estados Unidos. En Nueva York estudió interpretación, baile y canto, y rápidamente se estableció en Broadway. En su caso no se cumple la frase que asegura que quien sabe hacer, hace, y el que no, enseña.

A él empezaron a pedirle consejos sus compañeros y se dio cuenta de que tenía una oportunidad de expandir su profesión. No solo interpretar, sino también ayudar a otros a entender mejor sus escenas.

Así hablan de él sus alumnos

A día de hoy Bernard Hiller sigue trabajando como actor, recientemente en ficciones como Euphoria o Hunters. Sin embargo, su papel como coach es donde está recibiendo más alegrías. Según cuenta a El Independiente, en España en particular ha recibido especial interés por su libro Guía para la actuación del futuro: sé el artista que siempre has querido.

Dos de las alumnas que estuvieron en una de sus masterclass en Madrid hablan maravillas de Bernard Hiller. La actriz Laura González asegura que le conoció hace algunos meses cuando le regalaron su libro. "Ha sido una experiencia inolvidable", asegura sobre la clase. "Se la recomiendo a cualquier persona que tenga un sueño, sea actor o no, para que tome las riendas de su vida", añade.

Algo parecido a lo que cuenta Sonia Gascón, que también acudió a la clase especial en Madrid en donde el actor Álvaro Morte acudió como invitado y ponente. "Bernard te ayuda a abrir tu corazón y tu alma para tener una experiencia de la vida plena y para que eso se transmita en tu interpretación como actor", desvela.

Actuar no es llorar es conectar, según Bernard Hiller

Por supuesto, leyendo estos testimonios de sus alumnos apetece descubrir qué es exactamente lo que ofrece Bernard Hiller. ¿Por qué necesitan un coach actores de éxito como Robert De Niro o Leonardo DiCaprio si ya han triunfado?

El Independiente: ¿Qué hace un coach de actores?

Bernard Hiller: Para ser actor la gente tiene que ser abierta, libre, emotiva... es difícil. La gente no entra en la profesión así. La mayoría de la gente no quiere estar en el escenario, no quieren que les miren. Requiere muchas técnicas y trucos, les enseñas a utilizar la voz, a interpretar... y sobre todo, enseño a la gente cómo ser exitoso en su propia vida.

Hay que entender los códigos, lo que significan las escenas... los mejores actores enseñan algo de autenticidad de la propia vida. No es tanto llorar más, es conectar más. Todo el día estamos interpretando, en cada situación hacemos un papel diferente. Aquellos que alguna vez te han hecho daño es porque no han interpretado el papel que esperabas de ellos. No se puede vivir sin interpretar.

Todas las grandes estrellas tienen estrellas, pero tienes que encontrar al coach correcto para ti. Porque interpretar se enseña de maneras diferentes. No hay un profesor que encaje con todos los alumnos. Es algo personal. Trabajo con muchas estrellas en el set de rodaje y lo que hago es ver la escena y proponerles opciones para interpretarla, algo novedoso porque el público quiere cosas sorprendentes. Ellos escogen cuál es la opción que más les gusta.

El libro de Bernard Hiller puede comprarse en España.
El libro de Bernard Hiller puede comprarse en España.

EI: Marilyn Monroe era una persona que se centraba mucho en el método como actriz y todo el mundo rechazaba ese lado tan académico de ella.

BH: Era muy buena actriz en algunas de sus películas y tenía un coach. Pero al final es un estilo, no a todo el mundo le gusta el mismo. Por ejemplo, a mí me gusta Meryl Streep. Pero a otras personas puede que no les gustara.

Todo el mundo entrena, para todas las profesiones. Lo tenemos muy asimilado para profesiones como el fútbol, donde incluso los mejores deportistas del mundo tienen un entrenador.

Por ejemplo, Al Pacino tiene un profesor de interpretación con el que trabaja todas las semanas desde hace 35 años. Hay gente que no sigue entrenando, pero la gente con la que yo trabajo como Fernando Cayo quieren seguir mejorando. Siempre puedes seguir mejorando y cambiando tu forma de actuar, porque el público siempre quiere algo nuevo. Las audiencias han cambiado, quieren más del actor.

"Tú como protagonista no puedes juzgar tu propia actuación"

EI: Tú aseguras que no hace falta ser actor, que todo el mundo necesitaría un coach y que no hace falta que sea Bernard Hiller.

BH: Como actor yo mismo he tomado clases de interpretación, de baile, de canto... y es algo que hago profesionalmente. Sigo yendo a clases porque es como un músculo, hay que practicar. Pero sobre todo, porque tú como protagonista no puedes juzgar tu propia actuación, necesitas a alguien externo que te diga cómo ha sido. Y eso aplica para todo.

Hay gente que tiene tanta presión que necesita un coach, igual que está bien tener un dentista. Porque no se nos enseña cómo triunfar en la vida, nos tenemos ni idea de cómo hacerlo.

EI: ¿Podrían incluso tener un coach personas de alto nivel como el Rey o el Presidente?

BH: ¡Por supuesto! Mínimo para hablar en público. El secreto es: la gente exitosa tiene un coach, la gente normal no. Es una herramienta para ser más fuerte, pero la gente que no lo tiene piensa que es porque eres débil.

Yo también tengo un coach, hablo con él sobre los temas de los que dudo, es muy importante preguntar. Es de gente inteligente el tener dudas, y la gente inteligente tiene coach.

EI: ¿Alguna vez has tenido problemas con un director por las indicaciones que le has dado a un actor?

BH: No, saben que estoy ahí para ayudar. Siempre tengo en cuenta las indicaciones de los directores, yo no estoy dirigiendo, pero sugiero opciones para mejorar la interpretación. Por ejemplo, la indicación del director es que hay que ser más sensible en esa escena: pues yo trabajo contigo para que puedas conectar con tus emociones y puedas expresar esos sentimientos.

La mayoría de la gente no es auténtica, no están dispuestos a dejar que sus emociones se vean. No quieren desvelar sus secretos. Pero es lo contrario a lo que quiere la audiencia.

"He conocido a Meryl Streep, es como conocer a un ángel"

EI: Hace algunas semanas Meryl Streep estuvo en España y en uno de sus discursos dijo que la gente tiene una muy buena imagen de ella por los personajes buenos que ha interpretado. ¿Crees que eso es verdad y que no es para tanto o que simplemente es muy humilde?

BH: He conocido a Meryl Streep, es como conocer a un ángel. Es maravillosa. Pero como muchos actores de la vieja escuela, Meryl tiene algo muy importante y es que la mayoría de la gente no conoce nada de su vida personal. Lo mismo con De Niro o con Pacino, es una herramienta para transformarse en un personaje.

En otros casos sabes todo sobre el actor, toda su vida, con quién están acostándose, y qué han estado haciendo ayer. Creo que eso no es una buena idea porque te reduce el espectro de interpretación. Hay actores y hay personalidades como Stallone o Vin Diesel que son muy queridos por el público porque a la gente le gusta mucho su personalidad.

En el caso de Meryl Streep la he conocido, así que sé que es una persona extraordinaria, pero ¿sé cómo es como madre? No. Tampoco sé nada de su faceta como esposa. No es lo que me interesa. Lo que me ofrece ella es su interpretación. Yo no puedo escribir un libro sobre Meryl Streep pero sí sobre su trabajo como actriz. Así que sí, tiene razón, no la conocemos.

EI: Y por ejemplo has trabajado con Lindsay Lohan.

BH: ¡Estoy trabajando con ella ahora mismo! Es nuestra cuarta película juntos. Es muy buena, es una actriz fantástica, pero pide tener un coach porque es ambiciosa y quiere ser mejor.

EI: En el caso de Lindsay Lohan en particular parece que ha sido bastante maltratada por la industria del cine. Se la considera una mala actriz que hace malas películas.

BH: Cuando era pequeña era muy bien considerada, luego tuvo ese periodo loco pero es una gran actriz, está de vuelta, está mejor que nunca y tiene otra vez su vida en orden. Y no hace más que mejorar.

EI: Recuerda a actores como Zac Efron que han tenido un éxito enorme en algún momento y luego no han terminado de despegar.

BH: Sí, pasa mucho. Cuando tienes un éxito así de grande desde el principio necesitas a alguien que te ayude. Si no estás solo.

"Zendaya y su padre saben mucho del negocio"

EI: En el caso de actores como Efron o Robert Pattinson ahora están haciendo papeles más serios o más profundos, ¿es el caso de Lindsay Lohan?

BH: Claro. Ahora es una mujer, está pensando en su futuro y tomando decisiones más interesantes con películas más complicadas.

EI: Y tú sigues actuando. Recientemente en una serie tan popular como Euphoria, ¿cómo ves a las nuevas generaciones como Zendaya o Sydney Sweeney?

BH: Zendaya es brutal. También Sydney. Y como DiCaprio, que era un chico genial y muy guapo pero desde joven quería ser un actor y desde el principio tenía un coach. Ellas también.

Respetan a otros actores, como los británicos que todos tienen coach, pero aún no es normal en otros países.

Zendaya en una foto de archivo

EI: En el caso de Zendaya además ha venido de Disney Channel, así que ha recorrido mucho camino desde entonces.

BH: Todo el mundo empieza en algún sitio, pero si tienes buenos profesores, ayuda y guía puedes alcanzar el éxito. Porque el éxito no es un accidente, ocurre cuando te rodeas de la gente correcta. En el caso de Zendaya, ella y su padre saben mucho del negocio, están tomando las decisiones correctas.

EI: ¿Es el caso de actores con los que tú has trabajado como Milena Smit o Fernando Cayo?

BH: Claro. Yo solo trabajo con gente con la que creo que puedo ayudar. A mí me encanta trabajar con españoles porque están llenos de pasión y tienen ambición. Yo les ofrezco las ideas sobre cómo ser un actor internacional pero no puedo enseñarles qué es lo que le gusta a España. Yo sé lo que quiere Hollywood, que es lo que suele gustarle al mundo. Hay actuaciones muy fuertes, pero eso es el estilo de ciertos países, yo enseño más el estilo de Meryl Streep porque ellos quieren trabajar en Hollywood.

EI: ¿Los españoles quieren trabajar en Hollywood? ¿Y los alemanes o los franceses?

BH: Todo el mundo quiere. Porque es el sitio donde están los mejores del mundo. Pero si no lo quieren yo intento ayudarles a llegar a donde quieran. A ser la mejor versión de sí mismos.

EI: Hubo un momento en el que hacer cine y hacer televisión tenía dos recibimientos totalmente diferentes. Estaba peor visto hacer series que salir en la pantalla grande. ¿Qué ha pasado para que eso cambiara?

BH: Ahora ya no se nota esa diferencia. Netflix lo ha cambiado todo, el ejemplo es La casa de papel, por ejemplo, fue una locura porque lo encontró la plataforma y se volvió un fenómeno global. Todo ha cambiado gracias al streaming, es el mejor momento para ser actor porque hay más oportunidades que nunca.

EI: Hay más papeles para españoles, por tanto, ya no es solo Penélope Cruz haciendo el papel de latina cliché. ¿Estas oportunidades sirven también para que los actores se salgan un poco de estos parámetros?

Bernard Hiller en una imagen promocional
Bernard Hiller en una imagen promocional.

BH: Penélope Cruz tiene acento español, así que no va a interpretar a una chica de Texas. No podemos interpretar cualquier cosa, hay ciertos papeles que le tocará interpretar que tengan esos aspectos españoles o latinos. Por ejemplo, yo me tuve que cambiar el nombre porque en los castings pensaban que iba a ser español. Mi nombre real es Bernardo y no hablo español.

EI: ¿Y por qué te pusieron ese nombre? ¿Vivías en Argentina, no?

BH: Sí, mis padres eran supervivientes del Holocausto, entonces se mudaron primero a Bueno Aires, luego volvieron a Alemania y finalmente nos establecimos en Nueva York. Es una historia larga y triste.

EI: ¿Y cuándo supiste que querías ser actor?

BH: Desde pequeño, empecé a ir a clases de baile, canto y actuación.

EI: ¿Quién era tu mayor inspiración de pequeño?

BH: Me encantaba un actor llamado Sidney Poitier. También De Niro, Dustin Hoffman… me encanta El graduado, la película perfecta.

EI: Y ahora, te consideras más actor o más coach?

BH: Me considero de todo. Actor, coach y próximamente productor de la película Brundibar, que va a dirigir Andy Serkis.

EI: Entonces quién te inspira ahora en esta nueva etapa.

BH: Me inspira la gente que hace un trabajo precioso con su talento, como George Clooney o DiCaprio, que utilizan su fama para hacer un mundo mejor. Pero en general todo me inspira, caminar por la calle o conocer a gente nueva. Todo me inspira.