Mertxe Aizpurua (Bildu) ha salido este martes al paso de lo que ella ha calificado como "prisas" de Pere Aragonés por la celebración de un referéndum para la independencia de Cataluña.

La líder secesionista vasca ha recomendado al líder secesionista catalán que la convocatoria del referéndum de autodeterminación debe ir precedida de un debate "sereno", pues, a su juicio, "las prisas son malas consejeras en esta cuestión".

Así se ha pronunciado la dirigente de la coalición abertzale al ser preguntada sobre la entrevista de Aragonès en el Financial Times en la que pide valentía al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para pactar esa consulta y deja claro que ERC se asegurará de que el líder el PSOE cumpla todos sus compromisos.

Aizpurua -según informa Europa Press- ha mostrado su respeto por los planteamientos del político de ERC, pero ha apuntado que el tema del referéndum es "lo suficientemente serio" como para que haya "un debate sereno, tranquilo y despacio". "Las prisas son malas consejeras en esta cuestión", ha remachado.

En el citado artículo, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que sea "valiente" para acordar un referéndum, ya que se trata de una "oportunidad histórica" para resolver el conflicto catalán, además de que es la "mejor manera" de garantizar la estabilidad del Ejecutivo español.

Aragonès ha recordado que los votos de los catalanes han sido "cruciales" para evitar un gobierno en España que "involucre a la extrema derecha", pero también lo han sido para "forzar el inicio de una nueva relación entre Cataluña y España", informa Efe.

En ese sentido, ha celebrado el acuerdo para la ley de amnistía, que es "enteramente legal y coherente con el Estado de Derecho español y europeo", y también ha considerado que "esta nueva era de empoderamiento democrático" tras la investidura de Sánchez debe permitir "acordar cómo y cuándo" Cataluña votará sobre su futuro.

"Estamos ante una oportunidad histórica. Sánchez debe ser valiente y demostrar que, más allá de palabras conciliadoras, realmente quiere resolver el conflicto de soberanía con Cataluña. Resolverlo como lo hicieron el Reino Unido y Escocia, o como lo hicieron Canadá y Quebec", ha planteado el dirigente catalán.

Aragonès ha asegurado que "Cataluña está preparada para ganar o perder en un referéndum", pero lo que no puede pedir el Gobierno central es que "renuncie" a sus "derechos nacionales".

Aragonés asegura que no está pidiendo "nada que implique un ataque a ninguna otra nación del mundo y mucho menos a España"

"Apreciamos los primeros pasos", ha apuntado el presidente, "pero la voluntad de negociar no puede estar sujeta a intereses partidistas a corto plazo para asegurar la investidura del presidente o la continuidad del Gobierno. Sánchez tendrá que cumplir sus compromisos y nos aseguraremos de que lo haga. Somos responsables, pero también exigentes".

A su juicio, "Cataluña no pide nada extraordinario" ni está pidiendo "nada que implique un ataque a ninguna otra nación del mundo y mucho menos a España", con la que la Generalitat desea "mantener excelentes relaciones de vecindad dentro de la UE". "Simplemente queremos tener la oportunidad de decidir nuestro futuro", ha añadido.

Por ello, Aragonès ha instado al Gobierno español a "aprovechar esta oportunidad, como la mejor manera de reforzar su estabilidad" parlamentaria.

Y ha afirmado que el compromiso de su partido (ERC) con la negociación es también "un compromiso con la estabilidad, en un contexto europeo que presenta muchos desafíos".

"Seguiré trabajando hasta que se logre democráticamente la independencia de mi país, y no me dejaré intimidar por nada ni nadie. Por responsabilidad con la voluntad democrática de los ciudadanos de Cataluña y porque es una causa justa", ha sentenciado.