Diego (Alberto Ammann), urbanista venezolano, y Elena (Bruna Cusí), bailarina de Barcelona, se marchan a Estados Unidos con sus visados aprobados para empezar una nueva vida. Lo hacen bajo la premisa de impulsar sus carreras profesionales y formar allí una familia, pero al entrar en la zona de inmigración del aeropuerto de Nueva York son conducidos a la sala de inspección secundaria.
Allí serán sometidos a un desagradable proceso de inspección por unos imperturbables agentes de aduanas, así como a un interrogatorio extenuante, en un intento de descubrir si la pareja puede tener algo que ocultar.
Y, de paso, los agentes llevan al espectador en un viaje entre el thriller y el drama con tintes sociales sobre cuestiones como la migración y el racismo de tan solo 77 minutos de duración.
Este es el argumento de Upon Entry (Zabriskie Films), una de las propuestas más genuinas de las seleccionadas en la 38ª edición de los Goya que ya está disponible en Filmin y Movistar +. En los Goya, que este año se entregarán en Valladolid, ha sido nominada en las categorías Mejor dirección novel y Mejor guion original (Alejandro Rojas y Juan Sebastián Vásquez) y, por último, Mejor actor protagonista (Alberto Ammann).
En caso de ganar este último, no será el primer cabezón que se lleva: ya lo hizo en 2009, aunque en esa ocasión se convirtió en el Mejor actor revelación del certamen por su papel en Celda 211, donde compartió pantalla con Luis Tosar, Luis Zahera, Carlos Bardem y Antonio Resines, entre otros.
"Ahí tenía 31 años y ahora 45. Los directores de Upon Entry y el de Celda 2011, [Daniel Monzón], comparten que son buenas personas y que dejan a los actores una gran libertad, algo que no es común, al menos en mi experiencia. Hicimos cosas que no aparecieron en el guion y aparecieron en el montaje final", dijo el actor español-argentino, el pasado lunes 18 de diciembre, a los medios de comunicación asistentes al encuentro de nominados de los Goya.
"'Upon entry' es una película difícil, ni siquiera podíamos hacer planos generales'"
alberto ammann
La tradicional cita se celebró en el glamuroso Florida Park de Madrid. El acto, con un photocall previo que duró varias horas, contó con la asistencia de la mayoría de los artistas y técnicos de las que han sido las mejores películas de 2023 para el criterio de los académicos. "La próxima vez que nos reunamos, algunos de vosotros os llevareis un Goya a casa. Pero las películas no compiten entre ellas, el talento no compite entre sí. Los Goya son una celebración y una manera de hacer llegar nuestras películas a los espectadores", comentó el presidente de la Academia de Cine, Fernando Méndez-Leite, en la velada.
Ante los cerca de 190 nominados y nominadas que acudieron al encuentro, el presidente también subrayó el orgullo por el cine que se hace en España. "Contamos con películas que nos han emocionado, en las que nos hemos visto retratados, que han sido premiadas en festivales internacionales y que son el mejor ejemplo de la calidad de nuestro cine", añadió.
Una de ellas es Upon Entry, que además es la ópera prima de sus directores, aunque según apuntó Ammann, llevaba escrita siete años. "En todos los festivales en los que ha competido nos están dando algo, es una encestada interesante para una primera película", añade. Asombrado, recuerda la complejidad de haberla grabado en un espacio cerrado de cuatro metros cuadrados. "Todo es mérito de ellos, que han escrito el guion y han sabido dirigir una película difícil: había poco dinero para hacerla y una localización en la que no había posibilidad de quitar una pared ni de hacer un plano de cuerpo completo de nadie. La dirección de planos fue un acierto", reflexiona.
Pero, ¿Quiénes son los laureados showrunners? Nacidos en Caracas en 1976 y 1981 respectivamente, Alejandro Rojas ha escrito, dirigido y editado documentales sobre cine para televisión y ha trabajado como periodista cinematográfico. Por su parte, Juan Sebastián Vásquez ha sido director de fotografía en películas como Callback y El practicante, ambas de Carles Torras, siendo Upon Entry el debut de ambos.
En el escueto pero imprescindible reparto figuran también Ben Temple (Solo) y Laura Gómez (Orange is the New Black) como los secundarios encargados de llevar al extremo a una pareja, a priori, enamorada y afianzada.
El actor, que acudió al evento con una palestina al cuello como petición del alto al fuego en Gaza; está nominado con Manolo Soto (Cerrar los ojos), David Verdaguer (Saben Aquell), Hovik Keuchkerian (Un amor) y Enric Auquer (El maestro que prometió el mar); celebra la variedad de rostros en las candidaturas, así como la manera en la que "el nivel del cine en España sigue creciendo".
Sin embargo, denuncia la práctica de escoger a actores jóvenes por su belleza, darles papeles principales… y dejarles en la estocada después. "Hay una moda facilona de chicos y chicas guapos a los que les dan un personaje y luego se quedan sin herramientas en una industria bastante cruel, sin protección ni guía, y es algo que genera bastantes problemas", defiende.
En ese contexto tan competitivo, enarbola la importancia de la formación y del esfuerzo. "Hay que estudiar siempre y protegerse mucho, aunque Leonardo Dicaprio, Heath Ledger, por ejemplo, no estudiaron para ser actores. Eso sí, todo depende del lugar al que quieras llegar: si quieres ser Meryl Streep, tienes que dejarte el traste trabajando. Si quieres hacer comedia barata en la tele, no necesitas tanto", concluye.
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