La experta en el polígrafo de Sálvame Deluxe, toda una personalidad televisiva que en ocasiones pasa desapercibida, es ahora protagonista. Conchita Pérez asegura que es víctima de acoso por parte de José Antonio Fernández de Lanza, que también es supuestamente poligrafista, y que trabajaba en Antena 3 cuando se conocieron.

Un incidente hizo que Conchita conociera a Fernández de Lanza en la comisaría en 2007 y él la animó a que hiciera un curso para aprender a usar el polígrafo. En ese momento, la conocida televisiva no tenía nada que ver con la herramienta por la que después iba a ser tan conocida.

Estafada hace más de una década

Lo que le ofrecía Fernández de Lanza era un curso intensivo que ella tenía que pagar por adelantado. "En cinco días nos dio un papel firmado por él y nos hizo peritos polígrafos", cuenta ella. Pero los paraguayos con los que había compartido esta formación se volvieron a su país para descubrir que no está validado por ninguna institución superior. Es decir, no tenía ninguna validez.

Pese a la decepción, Conchita decidió ponerse manos a la obra y buscó una titulación válida para dedicarse profesionalmente a esta tarea.

"Yo me hice poligrafista en la American Polygraph Association, que solamente pueden ser gente que se hayan preparado en escuelas con directrices de ellos", ha contado Conchita en el programa de Herrera en COPE. Según ella, Fernández de Lanza decía ser el presidente de una asociación europea de polígrafos, algo que no existe.

Conchita posa junto a Belén Esteban antes de uno de los polígrafos.
Conchita posa junto a Belén Esteban antes de uno de los polígrafos. | @ConchitaPerez_

Cuando se lo echó en cara, Fernández de Lara dijo que Conchita se lo había inventado. Que había ido a imprimir por su cuenta aquel título firmado por él. Entonces empezó un acoso constante: "Dejé de contestar a sus llamadas telefónicas y comenzó un maltrato psicológico, personal y profesional", asegura la poligrafista en la revista Pronto.

Nunca fueron pareja

La revista ¡Qué me dices! publicaba en 2011 que Conchita y Fernández de Lanza habían tenido una relación de tres meses. Sin embargo, la poligrafista lo ha negado esta semana. "Ha habido un error, han dicho que fue mi expareja y nunca lo fue. Él se encaprichó de mí", ha contado en COPE. "Yo creo que él lo ha dicho", añadía, porque él se refería a ella como "mi churri".

Después de que Conchita descubriera el engaño comienza el acoso a su familia y amigos. "Es muy mala persona", dice la poligrafista cuando le preguntan por los motivos de este comportamiento. "Ha hecho muchísimo daño y ha puesto 2.300 incursiones (dicho por la policía científica) contra mí, es de muy mala persona", añade.

Según desvela, al principio lo hacía por teléfono pero ahora lo deja por escrito en las redes sociales en días y horas intempestivas, demostrando una especie de obsesión con la poligrafista.

Este individuo lleva 13 años difamándola y acosándola, considera ella, creando nombres de empresas imitando los de Conchita. En 2011 la poligrafista gana el juicio contra él, pero la abogada de Fernández de Lanza le dijo que no pagaría nada porque está jubilado. Sin embargo, la protagonista de esta enrevesada historia continúa persiguiendo a los posibles clientes de su competidora.

Además, Conchita deja claro que este señor nunca estuvo capacitado para dedicarse a su profesión. "Él ni tiene estudios básicos, ni es poligrafista, ni tiene por qué dar cursos de ello", insiste.