A través de un comunicado, un grupo de militantes del PSOE exige al partido que su Código Ético incorpore "el rechazo explícito al ultrajante negocio de la prostitución como condición inexcusable para el cumplimiento del principio de ejemplaridad de los cargos públicos", y piden que su incumplimiento sea "un motivo de expulsión de todo aquel que solicite, acepte u obtenga un acto sexual de una persona a cambio de un beneficio del tipo que sea”.  

Entre los firmantes están Amelia Valcarcel, la exministra Matilde Fernández, la exportavoz de igualdad en el Congreso del PSOE Ángeles Alvarez, la jurista Altamira Gonzalo, la filósofa Alicia Miyares, las exdirectoras del Instituto de la Mujer, Rosa Peris, Teresa Blat y María Duran, la exsecretaria de Estado Laura Seara o la presidenta de Mujeres Progresistas Yolanda Besteiro.

Es una modificación que consideran "coherente con la posición política del PSOE", y que debe ir en paralelo con un nuevo marco normativo" que favorezca "el cambio cultural que debe comenzar dentro de casa".

Además, destacan que esta ampliación del Código Ético se enmarcaría "en las recomendaciones de los organismos internacionales que reclaman medidas efectivas para reducir la demanda de prostitución y por tanto del tráfico de seres humanos, la explotación sexual y el pestilente negocio de los grupos criminales organizados".

En el escrito se comprometen a promover enmiendas en los próximos congresos, tanto regionales como federales, para realizar la modificación del Código.