El Gobierno, ante el parón del turismo: “Nuestra estrategia es por la calidad, no por la cantidad”

El turismo español, tras cinco años de récords, da señales de haber tocado techo. En julio, uno de los meses de más actividad del año, las llegadas de turistas internacionales sufrieron una caída del 4,9%, con un total de 10 millones de visitantes. En el conjunto del año, el dato ya se ha estancado, con un levísimo crecimiento del 0,3% en los siete primeros meses, hasta 47,1 millones.

Durante décadas, el sector turístico español ha proclamado la necesidad de apostar por un producto de calidad, de valor añadido, que permitiera que España como destino ser rentable sin necesidad de seguir recibiendo un público masivo. Que vengan menos, pero que gasten más.

Es un mantra de la industria turística en el que sólo se ha avanzado de manera tímida y sólo en algunos destinos. Y es una apuesta que el Gobierno también hace suya. La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, reconoce la “ralentización” de las llegadas, pero no ve preocupante la situación, y apuesta por un turismo de calidad, y no de cantidad.

“Tenemos que gestionar qué modelo queremos. Uno basado en la cantidad o uno basado en la calidad”, ha dicho la ministra tras su intervención en el 32º Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones, organizado por la patronal tecnológica Ametic, y que se celebra esta semana en Santander. “La ausencia de una hoja de ruta por parte del anterior Gobierno nos obliga a nos a definir una estrategia y vamos a apostar por una estrategia basada en la calidad”.

Maroto reconoce esa “normalización de los flujos”, pero subraya que “lo importante es el aumento del gasto turístico”. Según los últimos datos del INE, el gasto de los turistas que vienen a España (un dato que incluye también los gastos afrontados en su país de origen, no sólo los efectuados en destino) crece un 3% en los siete primeros meses del año, pero sufrió un descenso del 0,9% en julio.

Turismo de calidad, aumento del gasto… y una tercera pata de esa estrategia será la diversificación de los flujos turísticos. “Hay destinos muy saturados y eso está ocasionando problemas de convivencia con los residentes. Tenemos que diversificar esos flujos”, dice la ministra.