Liarse con 10 tíos para que te den un trabajo: Anne Hathaway y el lado oscuro de la fama

Anne Hathaway está en el mejor momento de su carrera. Ya no siente la necesidad de escoger proyectos solo por la respuesta de la crítica que podrían tener. También quiere hacer películas que a ella le gustaría ver y por eso se ha lanzado a protagonizar La idea de tenerte, que se estrena el 2 de mayo en Prime Video. Un filme que ella misma ha producido y que dará mucho que hablar puesto que adapta la historia de un fanfic (una historia escrita por un fan) sobre Harry Styles.

"Me alegra mucho ser parte de una historia que se regodea en el placer femenino", ha asegurado en una entrevista con Vanity Fair. Pero precisamente esa autoridad e independencia en Hollywood le ha ayudado a entender cómo de oscuro ha sido el lado de la fama que ha tenido que vivir para llegar hasta donde está ahora.

Castings que daban asco

"En los años 2000 -y esto me pasí a mí- era normal pedirle a un actor que se besara con otros para comprobar la química, lo que es realmente la peor manera de hacerlo", ha confesado Anne Hathaway en una entrevista con V Magazine. No cita ninguna película, pero algunas de las más famosas de su currículo de aquella época son Princesa por sorpresa, Brokeback Mountain o El diablo viste de Prada.

"Me dijeron: 'Tenemos diez tíos que vienen hoy y estás contratada. ¿No estás deseando liarte con todos ellos?'. Pensé que había algo malo en mí porque no lo estaba deseando. Pensé que sonaba asqueroso", ha añadido Anne Hathaway. Pero la actriz admite que era muy joven y tenía mucho miedo de ser calificada como "difícil". "Así que fingí que me hacía ilusión y me puse a ello. No fue una muestra de poder, nadie intentaba molestar o hacerme daño. Simplemente era otra época y ahora hemos aprendido", ha comentado la actriz.

El lado oscuro de Hollywood

No es la primera vez que se descubre que ciertos comportamientos aceptados en Hollywood son desagradables, particularmente con las mujeres. Por ejemplo, el término casting couch hace referencia a cuando las diferentes pruebas para entrar a formar parte del elenco de una película pasan por sentarse en un sofá con un director un productor.

Un ambiente nada profesional en donde se producían todo tipo de irregularidades, como después se descubrió cuando saltó el escándalo del caso Weinstein.

En el caso de Anne Hathaway, ahora que tiene poder para escoger cómo hacer las cosas en su película, la actriz lo ha hecho a su manera. La historia sigue a una madre soltera de unos 40 años que se enamora del cantante de 24 años de una de las bandas musicales más populares del momento. Es decir, explora un tema delicado como es la diferencia de edad, pero invertido radicalmente a lo que ya se ha explorado.

Así escogieron a Nicholas Galitzine para el papel

Es el chico quien es más joven y, pese a su juventud, está en una posición de poder respecto a la persona más mayor de la relación. Según ha explicado, Anne Hathaway, el proceso para escoger a su coprotagonista fue largo e incluyó algo de construcción de personaje por parte de los aspirantes.

Le pidieron a varios actores que escogieran una canción que pensaban que le gustaría al protagonista y con la que harían bailar al personaje de Anne. "Hicimos un poco de improvisación. Me sentaba en una silla como si hubiera venido de cenar o de dar un paseo, le dábamos al play y simplemente nos poníamos a bailar juntos", ha comentado la intérprete en su entrevista.

Nicholas Galitzine escogió una canción de Alabama Shakes y en seguida se ganó una sonrisa de Anne Hathaway. Al director, Michael Showalter, también le encantó así que el actor de 29 años consiguió el papel. "Era ridículamente perfecto" para el papel.

El mejor momento de Anne Hathaway

Desde que comenzara su carrera, Anne Hathaway ha vivido diferentes etapas. De todas ellas, sin duda esta es la mejor. Según ella misma ha contado en alguna ocasión, al comienzo de su carrera nadie la consideraba sexy, se sentía muy encajonada por la idea que tenían los demás de ella.

Después de conseguir el Oscar en 2013 por su papel de Los Miserables, se dio cuenta de que estaba muy perdida. Había recibido mucho odio por su interpretación de Fantine y, según sus propias palabras, muchos directores no querían contratarla porque les daba miedo la mala percepción pública que había de ella.

Pero en los últimos cinco años, la vida de Anne Hathaway ha cambiado radicalmente. Ha dejado de beber, ha sido madre, ha cumplido cuarenta y se trata a sí misma con más cuidado. "Es la primera vez en mi vida que me conozco tan bien. No vivo en lo que los demás piensan de mí. Conozco mi propia mente y estoy conectada con mis propios pensamientos", ha admitido a Vanity Fair.