Jedet se ha sincerado sobre su salud mental en el pódcast de Laura Escanes. Las dos compañeras de profesión han hablado largo y tendido en Entre el Cielo y las Nubes, disponible en exclusiva en Podimo. Uno de los temas que han tratado en profundidad ha sido el de el trastorno límite de la personalidad (TLP) que sufre la actriz e influencer.

El trastorno límite de personalidad es una afección mental por la cual una persona tiene patrones prolongados de comportamientos turbulentos o inestables. Esto produce dificultad para comprender las emociones o tolerar el sufrimiento emocional.

Jedet toma medicación para la afección que sufre

Y así lo contó a Laura Escanes cuando ella le preguntó si leía los comentarios de los haters. Jedet explicó que ya le daban igual, pero admitió que la situación había cambiado ahora que tiene controlada su salud mental: "Yo tengo TLP que es trastorno límite de la personalidad. Tú no tienes el control sobre tu emoción, la emoción lo tiene sobre ti. Tu cerebro no produce de la misma manera que otros la serotonina, la dopamina. Mi cerebro son picos y podía pasar en un día por 40 estados anímicos diferentes. Eso me ha llevado a ser una persona muy violenta verbal y físicamente", confesaba la influencer.

Además, ha admitido que está sobria después de haber recurrido a las sustancias como una salida. Laura le preguntó cuándo se dio cuenta de que sufría de esta afección y Jedet explicó que cuando se siente arrinconada empieza a "nublarse". "Era algo que sabía que tenía, pero en el último año y medio se descontroló heavy. También el TLP te produce una sensación de vacío constante, comportamientos compulsivos, hay gente a la que le da por la droga, yo llevo 3 años limpia".

Admite haber sufrido brotes psicóticos

Jedet en el concierto de Isabel Pantoja de su gira 50 aniversario en el WiZink Center, el pasado mes de abril.

"Tuve varios brotes psicóticos, me quería morir y ahí ves algo que no está bien. Cuando me di cuenta de que estaba haciendo daño a mis seres queridos de forma verbal y físicamente, era evidente que tenía que tomar cartas en el asunto. Llevo en terapia 8/9 años, pero hay cosas que por mucho que trabajes en terapia, necesitas una muleta. Una medicación es un apoyo", ha confesado Jedet.

Según explica, a veces la solución no es solo ir a terapia. Su madre le había pedido que no contara públicamente que sufría de trastorno de personalidad límite pero ella no se avergüenza. "Forma parte de mí y con esto he aprendido mucho y me hace más responsable, tengo las riendas de mi vida y no quiero volver a ese punto", dice Jedet.

Según explica, además, en su casa no era una enfermedad desconocida, puesto que su abuelo tenía "unos comportamientos muy parecidos". "Yo crecí viendo esto pero lo asociaba a otras cosas. Desde pequeña tenía tanto miedo de convertirme en eso que fui a terapia desde pequeña para poder controlarlo", dice Jedet.