Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, no ha querido adelantar cuáles serán los próximos pasos del organismo en cuanto a la política monetaria. En su intervención tras la decisión de bajar los tipos en 25 puntos básicos por primera vez en ocho años, Lagarde ha dejado en el aire una nueva bajada de tipos. "Estamos moderando el nivel de restricción monetaria, pero el ritmo dependerá de los datos", ha asegurado la presidenta.

Lagarde ha apuntado que están decididos a garantizar que la inflación regrese al objetivo de medio plazo del 2% de manera oportuna y ha añadido que el BCE mantendrá los tipos de interés oficiales lo suficientemente restrictivos el tiempo necesario para lograr ese objetivo. Pero ha insistido en que las decisiones que se tomen en las próximas reuniones seguirán dependiendo de los datos para determinar el nivel apropiado y la duración de la restricción.

En particular, Lagarde ha recordado que las decisiones sobre tipos de interés se basarán en la evaluación de las perspectivas de inflación a la luz de los datos entrantes, la dinámica de la inflación subyacente y la fortaleza de la transmisión de la política monetaria.

"No nos estamos comprometiendo previamente con una trayectoria de tipos particular", ha repetido en varias ocasiones la presidenta del BCE, añadiendo que, en cualquier caso, la entidad está dispuesta a ajustar todos sus instrumentos dentro de su mandato para garantizar que la inflación regrese al objetivo de medio plazo y preservar el buen funcionamiento de la transmisión de la política monetaria.

En este sentido, a pesar de los avances de los últimos trimestres, Lagarde ha reconocido que las presiones sobre los precios internos "siguen siendo fuertes" a medida que el crecimiento de los salarios es elevado, por lo que ha advertido de que es probable que la inflación se mantenga por encima de la meta hasta bien entrado el próximo año.

A pesar de que la bajada de tipos estaba descontada, Lagarde ha explicado que uno de los gobernadores del BCE no estuvo de acuerdo. "No puede haber duda de nuestra determinación para devolver la inflación al 2%", ha asegurado Lagarde al ser cuestionada sobre si es oportuno bajar ahora los intereses. "La política monetaria todavía es restrictiva y lo seguirá siendo hasta que alcancemos el objetivo", ha añadido.

Por otro lado, en la rueda de prensa se ha preguntado sobre la posible fusión entre BBVA y Banco Sabadell. Lagarde ha declinado responder sobre el proceso y le ha pasado la "pelota" a Luis de Guindos, vicepresidente del BCE, quien ha puntualizado que "no comentamos sobre acuerdos que no han finalizado" y ha añadido que "haremos un comentario pero se limitará a la solvencia de los bancos".