El noruego Jens Stoltenberg ya tiene sucesor, tras una década como secretario general de la OTAN. El ex primer ministro holandés Mark Rutte superó los últimos escollos, como la candidatura alternativa del presidente rumano, Klaus Iohannis y las reticencias del primer ministro húngaro, Viktor Orban, de modo que tiene el camino despejado para que en la cumbre de Washington, entre el 9 y el 11 de julio, sea coronado.

Su último gesto con el primer ministro húngaro, Viktor Orban, muestra hasta qué punto estaba interesado Rutte en el cargo. En una carta que se acaba de hacer pública, Rutte le promete a Orban eximir a Hungría de contribuir a la defensa europea. Además, se retracta de unas declaraciones que disgustaron a Orban en defensa de la comunidad LGBTQ en Hungría, víctima de la discriminación del régimen iliberal de Budapest.

"Reconozco que algunas observaciones que hice en 2021, como primer ministro de los Países Bajos, causaron descontento en Budapest. En mi eventual papel como secretario general de la OTAN, mi prioridad será mantener la unidad y tratar a todos los aliados con el mismo respeto y comprensión", señala Rutte en la misiva.

Rutte dijo en 2021 que "Hungría no debería estar en la Unión Europea" en respuesta a la aprobación de una ley que prohibía mostrar en las escuelas material que, a juicio del gobierno, promovía a la comunidad LGBTQ. Dos años antes había denunciado que "el estado de Derecho estaba siendo pisoteado en Hungría".

El régimen de Viktor Orban no ha cambiado. Sigue acaparando poder y continúa pisoteando el estado de Derecho. Además, se ha acercado al líder ruso, Vladimir Putin. De esta forma, mantuvo bloqueado el último paquete de ayuda a Ucrania y prometió oponerse en fases posteriores a su ingreso en la UE. Tampoco será partidario de que Ucrania ingrese en la OTAN.

A su vez, en la carta Rutte se compromete a respetar el deseo de Orban de no aportar fondos para la defensa de Ucrania ni tampoco soldados. A cambio permitirá que los otros aliados sí lo hagan. "Una carta humillante", en palabras del director del ECFR en España, Ignacio Torreblanca.

Paso atrás del presidente de Rumanía

Sin embargo, quien sí ha cambiado es Mark Rutte, para quien es prioritario lograr el cargo en la OTAN. Una vez que Rutte ha logrado el apoyo de Orban, el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, ha retirado este jueves su candidatura. Rumanía es uno de los países del flanco oriental de la OTAN más decisivos en su defensa frente a Rusia.

Rutte dimitió hace un año cuando sus socios de coalición se negaron a restringir el derecho a la reagrupación familiar de los refugiados de guerra. Llevaba 13 años como jefe del gobierno y anunció que no se volvía a presentar por su partido, el liberal (VVD). En las elecciones ganó el Partido de la Libertad de Geert Wilders (PVV), de la derecha radical.

Wilders renunció a ser primer ministro para facilitar el pacto, en el que está incluido el partido liberal de Rutte. Wilders defendió, como lo hacía Le Pen, a Putin. Ahora se ha moderado, porque sabe que a la derecha radical lo que le ayuda a blanquearse es su política sobre Ucrania. Pero era filorruso. Dick Schoof, ex director de lso servicios secretos, sucederá a Rutte, hasta ahora en funciones.