CriteriaCaixa, holding que gestiona el patrimonio empresarial de la Fundación 'la Caixa', ha comunicado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ha alcanzado una participación del 9,99% del capital social de Telefónica mediante la adquisición de un bloque de acciones que representan el 4,91% del capital social de la teleco.
Con este porcentaje, CriteriaCaixa casi alcanza el que tiene el Estado en la teleco a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), del 10%. El holding se ha propuesto alcanzar como máximo un 10,01% del capital social de la operadora, adquiriendo acciones adicionales cuando se obtengan las autorizaciones administrativas requeridas para la adquisición de una participación indirecta en ciertas filiales reguladas de Telefónica.
CriteriaCaixa realizó su última operación de inversión en Telefónica el pasado mes de abril, cuando alcanzó un 5,01% de su capital, aunque dicho porcentaje pasó a ser del 5,08% después de la reciente reducción de capital de la operadora.
"Este nuevo incremento de participación se ajusta a la política de inversión de CriteriaCaixa, caracterizada por una gestión eficiente y prudente de su portafolio, focalizado en compañías con una atractiva política de dividendos, como Telefónica", defiende el holding.
Para CriteriaCaixa, la participación en Telefónica "tiene carácter estratégico y de largo plazo". En este sentido, CriteriaCaixa considera que su inversión "contribuirá a dotar de mayor estabilidad accionarial a la operadora, compañía esencial tanto para el país como para el sector a nivel internacional".
La relación de 'La Caixa' con Telefónica se remonta a 1987. Desde entonces, tanto 'La Caixa' primero, como posteriormente CaixaBank y ahora CriteriaCaixa, han mantenido su presencia en los órganos de gobierno de la compañía. Actualmente, esa representación la tiene Isidro Fainé, que es vicepresidente de Telefónica, y que este año ha superado los 30 años continuados de servicio como consejero de la compañía.
Te puede interesar
2 Comentarios
Normas ›Comentarios cerrados para este artículo.
Lo más visto
- 1 El inspector jefe de los 20 millones se reunía al lado de la Jefatura
- 2 José Luis Rodríguez Zapatero no existe, no es y no aparece
- 3 Quién es quién de la prole Jolie-Pitt y quién cambió su nombre
- 4 Momento Aldama en el Congreso
- 5 La manta de la que puede tirar Aldama
- 6 El entramado de los socios del 'narcopolicía': frutas, inmobiliarias y ropa
- 7 Aldama revela detalles del viaje de Delcy Rodríguez a España
- 8 Vidal-Quadras: detenido otro implicado en el ataque al fundador de Vox
- 9 El juez del ‘caso Koldo’ envía copia de la declaración de Aldama al Supremo
hace 5 meses
Más de una década lo perdiendo valor, tres cuartos partes de lo que valía hace una década y sin crear confianza, tranquilidad y seguridad. Hay que dar lo que piden, mercados, usuarios y hacer sentir los colores para así fidelizar.
hace 5 meses
Lo siento, no puedo entender cómo una compañía con un siglo de vida tengo tanto miedo e impedimentos a poner precios competitivos. Metió a O2 como Low Cost y hoy le sacan los colores operadoras rumanas nobeles y de menos peso. Ahora viene una anglosajona y pone precios que la exmonopolio y su filial no harán ni el gesto de pronunciarse. La segunda residencia queda lejos de ser una alternativa viendo los precios de las otras como primera residencia…, y así más de lo mismo. La pirateria otro hándicap para la exmonopolio, conozco más gente a mí alrededor ( clase media) con pirateria de años que pasando por caja. Subir los precios no es justificación de por el que no paga por el contenido por pirateo. Hoy esta compañía con esas más de 1.400 operadoras que hay en España como competencia ha perdido dos generaciones de cliente después de sus más de veinticinco años de liberación del mercado. Se necesitan muchos Amancios, Roog’s, Islas,, Galanes…, para crear confianza, fidelizar y hacer creer en los colores. Lo alternativo con menos y peor le saca los colores, la pone en evidencia y lo peor es que no hay reacción. Hay que involucrar a gobierno, organismo y autoridades en la piratería y en la sobreregulación.