'Apex' es el nombre con el que la casa de subastas Sotheby's ha bautizado a un estegosaurio, el más caro de la historia. El esqueleto de esta bestia del Jurásico se ha subastado esta madrugada en Nueva York por la elevadísima cifra de 44,6 millones de dólares, que multiplica el precio estimado de venta de 4 o 6 millones de dólares.

Tras 15 minutos de ardua batalla por la posesión del dinosaurio, Apex supera a Stan, el esqueleto de tiranosaurio rex que, hasta ahora, era el dinosaurio más caro jamás pujado, rozando los 32 millones de dólares en octubre de 2020. El esqueleto, uno de los más completos y mejor conservados de un dinosaurio, muestra el interés por estos fósiles en las pujas de todo el mundo.

La reliquia ha sido la pieza principal de la 'Geek Week' ('semana friki') de Sotheby's, en la que se subastan artículos de dos categorías: Historia Natural y Exploración Espacial. Así, junto al esqueleto de Apex, se han vendido impresiones de piel fosilizada y de tres huesecillos.

Un dinosaurio americano

Sotheby's ha indicado que el nuevo 'papá' de Apex es anónimo, pero que baraja prestar el esqueleto a una "institución estadounidense" pues "Apex nació en América y se va a quedar en América". El dinosaurio, de unos 3 metros de altura y 6 de longitud, fue descubierto hace dos años en el estado de Colorado.

Descrito por un experto de la casa como "el típico dinosaurio que uno ve en un libro para colorear", el estegosaurio no cuenta con señales de combate frente a otros depredadores, pero sí una evidencia que esclarece sobre la avanzada edad a la que pudo llegar: Apex tuvo artritis. Lo que no se ha podido determinar, según el New York Times, es su género.

Sin embargo, los paleontólogos no parecen estar a favor de la comercialización de los fósiles de dinosaurios. Preocupados por el aumento del precio, la privatización de las colecciones que albergan estos huesos imposibilitan el estudio que permite conocer más sobre estos gigantes que vivían en nuestro planeta.

Los estegosaurios vivieron a finales del período Jurásico, hace aproximadamente entre 156 y 144 millones de años. Sus distintivas espinas en la cola y placas en la espalda, hacen de este antiguo animal uno de los dinosaurios más reconocidos.