No se lo esperaba. Menos aún después del mal trago vivido por la aparición de una pancarta acusándole de "traidor", a él y a su compañero de la Real Sociedad, Mikel Merino, aparecida en Elorrio. Pero ayer a Mikel Oyarzabal sus amigos se propusieron quitarle el mal sabor y recibirle por todo lo alto en su pueblo, en Eibar. Lo hicieron por sorpresa, esperándole en la calle con una pancarta con el lema 'Zorionak, Mikel. Txapeldun' (¡Felicidades, Mikel, campeón!) y con bengalas mientras jaleaban su nombre.

Su numerosa 'cuadrilla' esperó a que el capitán de la Real Sociedad saliera de un edificio en el que se encontraba para darle la sorpresa. El momento, captado por numerosos aficionados que han comenzado a compartirlo por redes sociales, atrajo también a vecinos del municipio guipuzcoano, que al son de la canción de la selección española en esta Eurocopa, 'Potra Salvaje', de Isabel Aaiún, aplaudieron a uno de los futbolistas más determinantes en el torneo.

Oyarzabal fue el autor del segundo gol de la final que dio la cuarta Eurocopa a la selección española. Según los presentes, capitán 'txuri-urdin' recibió con sorpresa y una gran sonrisa el sentido homenaje de sus amigos, que lo envolvieron con la pancarta mientras coreaban su nombre.

El acto de desagravio se produce después de que el pasado sábado apareciera en el municipios vizcaíno de Elorrio una pancarta en contra de la "asimilación" por la selección española y con pintadas de "puta España" y "puta selección". En ellas se acusaba de modo expreso a los jugadores de la Real Sociedad, Mikel Merino y Mikel Oyarzabal, de "traidores". La localidad es el municipio de la familia del capitán de la Real Sociedad.

Se da la circunstancia de que en el vídeo difundido por redes sociales el grupo de amigos se concentra para recibir por sorpresa a Oyarzabal justo de espaldas a la sede de EH Bildu en el municipio de Eibar, un aspecto comentado por muchos de los aficionados. La coalición de la izquierda abertzale ha mantenido una posición crítica con el seguimiento y victoria de la selección española. Su máximo dirigente, Arnaldo Otegi ha reconocido que no vio la final de la Eurocopa por no ser "su selección" y no sentir ningún apego por la misma.