La justicia marroquí ha condenado este sábado a cinco años de prisión al ex ministro Mohamed Ziane, de 82 años, por la supuesta financiación ilegal del Partido Liberal Marroquí del que fue fundador y que él atribuye a la cacería política que padece desde que pidiera la abdicación de Mohamed VI en una entrevista a El Independiente, han indicado fuentes de su entorno a este diario.

Ziane, que cumple actualmente otra condena por cargos que él niega, ha recibido la comunicación de la sentencia en la madrugada de este sábado. La familia recurrirá un veredicto "con motivaciones políticas" por las continuas críticas del anciano al régimen alauí, tanto el monarca como el majzén, el círculo palaciego que gobierna "de facto" el país vecino.

La corte le acusa de haber malversado unos 100.000 euros al estado marroquí. “Dicen que, como no he obtenido escaño, lo que el Estado dio al partido tengo que devolverlo. ¿Cómo es eso? ¿Entonces dieron el dinero para la compra de votos? No era para realizar mítines o publicar programas sino para pagar gente para obtener votos y, si no los tienes, hay que devolverlo. Es así como se falsifica la democracia en Marruecos”, denuncia Ziane, quien rechaza la acusación y la considera una nueva fabricación para castigarle por sus opiniones políticas. Insiste en que el dinero fuero devuelto.

"Es consciente de que las verdaderas razones de su condena son políticas. Es el precio por hablar de asuntos que el poder no acepta que sean tratados en públicos", trasladan a este diario fuentes cercanas al ex ministro de Derechos Humanos en tiempos de Hasán II, el padre de Mohamed VI. "Estoy convencido de que no voy a salir de la cárcel y que voy a morir aquí", declaró en mayo a sus allegados tras asistir a una de las vistas del proceso judicial que le ha impuesto ahora la condena. Ziane declaró una breve huelga de hambre el pasado febrero para protestar por las condiciones en las que se halla recluido.

Cumple tres años de una condena previa

Ziane lleva 19 meses entre rejas y a sus 82 años se ha ganado el apodo del “preso más viejo del mundo”. El abogado rompió su silencio carcelario a finales de enero en una conversación exclusiva con El Independiente. Ziane volvió a cargar contra el monarca alauí y quienes gobiernan el país, una "banda de mediocres". “Me reafirmo en todo lo que dije antes. Si Mohamed VI está enfermo o no quiere reinar, se tiene que ir y que venga en su lugar su hijo, su hermano o su hermana. Me da igual”, opinó entonces.

Ziane se halla encarcelado en El Arjat, un centro penitenciario emplazado a unos 10 kilómetros de Rabat, en la ciudad vecina de Salé. Cumple una condena de tres años por una retahíla de delitos presentados por el ministerio del Interior que él niega completamente, entre ellos, "la ofensa a funcionarios públicos y la Justicia", "la injuria contra un cuerpo constituido", la "difamación", el "adulterio" o el "acoso sexual".

Organizaciones de derechos humanos como Amnistía Internacional han denunciado las nulas garantías del proceso judicial y han exigido su liberación inmediata. Ziane ha agotado sin éxito todas las apelaciones presentadas reclamando su excarcelación, entre otros, por motivos de salud. En su informe anual, Amnistía denunció que el régimen marroquí sigue aplastando los derechos humanos con la condena en los tribunales de quienes ejercitan la libertad de expresión; la persecución de los activistas saharauis; y la impunidad en las sucesivas masacres de inmigrantes en la frontera con España. El de Ziane era uno de los casos citados por la organización.

Petición de liberación por razones humanitarias

Ziane padece espondilitis anquilosante, una enfermedad inflamatoria que, con el tiempo, puede provocar que algunos de los huesos de la espina dorsal se fusionen. Este fenómeno hace que la espina dorsal pierda flexibilidad y puede generar una postura encorvada, con dificultades para respirar hondo. Ante el agravamiento de la enfermedad, la familia de Ziane ha reclamado reiteradamente su hospitalización fuera de un centro penitenciario donde existe una enfermería. Las autoridades han rehusado acceder a su petición.

La vigilancia sobre Ziane, que desembocó en su detención, se volvió especialmente severa desde que en octubre de 2022 concediera a El Independiente una entrevista sin líneas rojas, en la que denunció la deriva política y social de su país y el reinado ausente del hijo de Hasán II, a caballo de París y Gabón. “Que Mohamed VI esté fuera de Marruecos es totalmente anormal. No se puede dirigir un país por Zoom”, advirtió el veterano político. En las semanas que sucedieron a la publicación de la conversación, la prensa marroquí se cebó con Ziane en una campaña de difamación pública que se sumó a la creciente vigilancia policial en torno a su residencia. En las tribunas de los rotativos estatales le llamaron "traidor español" y "loco", entre otros insultos.

En mayo de 2023 la justicia marroquí confirmó la condena a tres años de prisión contra Ziane. La Corte Suprema de Marruecos, el máximo tribunal de apelaciones del país, ratificó el veredicto.