El juez Juan Carlos Peinado ha decidido citar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en calidad de testigo en el marco de la investigación que lleva a cabo sobre su esposa, Begoña Gómez, investigada por corrupción en los negocios y tráfico de influencias. La declaración tendrá lugar el próximo martes en el Palacio de la Moncloa, aunque no será la primera vez que un presidente comparezca como testigo ante un juez.

El primero en hacerlo fue Adolfo Suárez, que declaró voluntariamente en la Audiencia Nacional en junio de 1995 por el 'caso Banesto', trece años después de haber abandonado la presidencia. Suárez negó haber recibido dinero de Mario Conde a cambio de realizar gestiones en el Banco de España a favor de Banesto. Tres años después, en 1998, tuvo que volver a declarar por este mismo caso.

Felipe González, el 22 de septiembre de 1997, testificó ante los jueces un año después de abandonar la Moncloa, y lo hizo junto a Alfonso Guerra. Fueron citados ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo en el juicio del 'caso Filesa', en calidad de antiguos secretario general y vicesecretario general del PSOE, respectivamente. Al año siguiente, el 23 de junio de 1998, González volvió al Alto Tribunal, en aquella ocasión para comparecer como testigo en el 'Caso Marey', una de las causas de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL). Fue una declaración a puerta cerrada, de la que se guarda una imagen gracias al fotógrafo de El Mundo Fernando Quintela.

Rajoy fue testigo mientras era presidente

El primero en declarar ante un juez siendo presidente en ejercicio fue Mariano Rajoy, que lo hizo en la Audiencia Nacional el 26 de julio de 2017, dentro de la investigación del 'caso Gürtel' que afectaba a la financiación irregular del PP. Aquella citación provocó una moción de censura en el Congreso de los Diputados por parte de Podemos, que no salió adelante.

Un año después, Pedro Sánchez sí consiguió desalojar a Rajoy de la Moncloa con una nueva moción que justificó, precisamente, tras la sentencia de la Audiencia Nacional de la primera etapa de la Gürtel, en la que el Partido Popular fue condenado por lucrarse como partícipe a título lucrativo, así como también exdirigentes del partido como José Luis Bárcenas o Ana Mato.

El siguiente presidente en comparecer ante un juez, en marzo de 2021 y haciéndolo por videoconferencia por la pandemia, fue José María Aznar, que declaró como testigo en la Audiencia Nacional por la presunta 'caja B' del PP. Aznar negó haber recibido complementos salariales procedentes de una contabilidad paralela a la oficial durante sus años al frente del partido.

Cinco de siete

Pedro Sánchez será, por tanto, el quinto presidente del Gobierno en comparecer como testigo, y el segundo estando en la Moncloa. Sí será la primera vez que un juez se desplace a la residencia presidencial para tomar declaración. En 2018, Sánchez pidió la dimisión de Rajoy cuando éste fue citado ante la Audiencia "por degradar el cargo de presidente". "¿Usted se ha preguntado cuál es el marco de principios éticos que estamos exponiendo como nación ante el mundo con su declaración ante los jueces? ¿Cree usted que puede representar debidamente los intereses y la imagen de España en los foros europeos e internacionales tras su declaración de hoy?" dijo ante los medios de comunicación en la sede del PSOE en Ferraz.

Por tanto, tras la citación de Sánchez el próximo martes, de los siete presidentes del Gobierno que ha habido desde la aprobación de la Constitución Española en 1978, sólo hay dos que no han tenido que declarar ante un juez como testigos: Leopoldo Calvo-Sotelo y José Luis Rodríguez Zapatero.