La garrapata 'Hyalomma lusitanicum' ha registrado una preocupante expansión, principalmente en Cataluña, especialmente en las áreas metropolitanas de Barcelona y Tarragona. Este parásito no solo es conocido por su alta movilidad y capacidad para buscar activamente a sus huéspedes, sino también por ser un vector potencial de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) y otros patógenos.
Expansión y características garrapata 'Hyalomma'
En los últimos años, la ‘Hyalomma lusitanicum’ ha proliferado significativamente debido al aumento de las temperaturas y la falta de control sobre animales salvajes como jabalíes y conejos, que actúan como sus principales hospedadores. Un estudio publicado en 2022 reveló una presencia masiva de esta garrapata en 30 municipios del área metropolitana de Barcelona. Este año, su presencia se ha detectado en ocho comarcas más.
La garrapata 'Hyalomma' es conocida por su capacidad para moverse rápidamente hacia sus presas. Esta característica la hace especialmente preocupante, no solo en áreas rurales, sino también en entornos urbanos como escuelas e instalaciones deportivas.
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC)
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo es una enfermedad grave transmitida por la picadura de garrapatas infectadas, especialmente del género Hyalomma. Aunque también puede contraerse por contacto con sangre o tejidos de animales infectados, la principal vía de transmisión es la picadura. La FHCC fue detectada por primera vez en la península de Crimea en 1944 y posteriormente en el Congo belga, de donde toma su nombre.
En España, el primer caso de FHCC se registró en 2016, y desde entonces se han notificado otros dos casos. En 2023, un hombre de 74 años falleció en Ávila tras ser picado por una garrapata mientras participaba en una actividad cinegética. La enfermedad se ha convertido en un riesgo especialmente para aquellos que trabajan en la industria ganadera, agricultores, veterinarios y cazadores.
Síntomas de la picadura de la garrapata 'Hyalomma'
Los síntomas de la FHCC pueden ser graves y variados. En la fase pre-hemorrágica, los afectados suelen presentar fiebre brusca, dolor de cabeza y mareos durante cuatro o cinco días, además de posibles diarreas, vómitos o conjuntivitis. Posteriormente, la enfermedad puede evolucionar hacia una fase hemorrágica, con manifestaciones como petequias, hematomas y sangrados en mucosas y piel. La mortalidad puede variar entre el 5% y el 40%, siendo mayores de 60 años y aquellos con manifestaciones hemorrágicas y fallo orgánico los más vulnerables.
El tratamiento temprano y el soporte médico adecuado son cruciales para mejorar la supervivencia de los pacientes. En casos severos, la enfermedad puede provocar deterioro renal rápido, insuficiencia hepática o pulmonar después del quinto día de evolución.
Para minimizar el riesgo de picaduras de garrapatas, se recomienda llevar ropa larga y de colores claros, que facilita la detección de estos parásitos. También es aconsejable meter los pantalones dentro de los calcetines y usar camisas de manga larga. Los zapatos cerrados y calcetines largos son preferibles a las sandalias o zapatos abiertos. Además, el uso de repelentes que contengan DEET, picaridina o IR3535 en la piel y la ropa es fundamental.
Para reducir la presencia de garrapatas en el hogar, es importante mantener el césped corto, eliminar hojas caídas y reducir las zonas de sombra. Proteger a las mascotas con collares antiparasitarios y tratamientos preventivos, además de revisarlas regularmente, es crucial para evitar la introducción de garrapatas en casa.
Cómo retirar la garrapata 'Hyalomma'
Si se detecta una garrapata adherida a la piel, se deben seguir ciertos pasos para retirarla de manera segura. Utilizar pinzas de punta fina para coger la garrapata lo más cerca posible de la superficie de la piel y tirar de ella con un movimiento constante hacia arriba, evitando aplastarla. Después de retirarla, limpiar bien la zona con agua y jabón, desinfectar con alcohol y observar cualquier síntoma de enfermedad. Consultar a un médico en caso de fiebre o cualquier síntoma anómalo es esencial.
Aunque el reciente estudio ha indicado una baja prevalencia de virus patógenos en las garrapatas ‘Hyalomma lusitanicum’ en Barcelona y Tarragona, la expansión de este parásito y su potencial para transmitir enfermedades graves como la FHCC subraya la importancia de adoptar medidas preventivas y estar alerta. La vigilancia y el control de las poblaciones de garrapatas son esenciales para proteger la salud pública en Cataluña y en toda España.
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