El boxeador Enmanuel Reyes Pla ha asegurado, al menos, la medalla de bronce en la categoría de -92 kg. El púgil se ha impuesto en su combate de cuartos de final al belga Victor Schelstraete, por lo que luchará por un puesto en la gran final olímpica.

"Cogimos el bronce, ahora vamos a por el oro", celebró el boxeador al finalizar la gesta que devuelve una medalla olímpica al boxeo español 24 años después de la plata de Rafa Lozano en Sidney 2000.

La clasificación para la semifinal ata el metal para el hispanocubano, ya que boxeo premia a sus deportistas con un oro, una plata y dos bronces. La victoria de Reyes Pla se ha fraguado desde un primer asalto que le ha dado una ventaja que ha ido a más con cada puñetazo.

'El Profeta' ha sometido a Victor Schelstraete con una zurda letal y volverá de París con una medalla colgada del cuello. El boxeador ya evidenció en la previa de la pelea cuál es su objetivo en los Juegos Olímpicos: "Al rival que sea le voy a arrancar la cabeza. Voy a seguir trabajando porque lo que me espera es el oro. Sobre todo quiero dar gracias a Dios por la victoria. Cuando estoy bien mentalmente luego las cosas me salen bien en el ring, y hoy me salieron bien. El combate ha sido difícil, el chino era un rival exigente, muy fuerte, y lo puso difícil", afirmó Reyes Pla.

Enmanuel Reyes Pla peleará por un puesto en la final olímpica el próximo domingo 4 de agosto a partir de las 13.08 horas.

El español empleó defensas muy altas para neutralizar los golpes del belga, que estuvo un poco más activo en el segundo asalto. Reyes Pla, como en los primeros tres minutos, se dejó lo mejor para el final y mostró más frescura. A Schelstraete le entró algún jab certero, aunque el round volvió a ser para el español, esta vez por decisión dividida.

A 'El Profeta' solo le faltaba no cometer errores en el último asalto, con un belga ya muy fatigado. Aunque el volumen de golpes del español no fue el deseado, Enmanuel Reyes trabajó la zona abdominal, siempre manejando la distancia y alejándose de las cuerdas, incluso celebrando antes del round final.

La delegación española, que inició el día con un solitario bronce conseguido por el judoca Francisco Garrigós en -60 kg, ya puede dar por seguras cuatro preseas.

La jornada ha comenzado con la alegría del marchador Álvaro Martín, que después de buscar el oro en los 20 kilómetros de carrera ha podido morder el bronce en una lucha titánica con el ecuatoriano Brian Daniel Pintado, nuevo campeón olímpico, el brasileño Caio Bonfim, y el italiano Massimo Stano, oro en Tokio.

Inmediatamente después, la categoría femenina ha redondeado un estreno mágico de la marcha española en los Juegos Olímpicos. María Pérez ha conquistado una plata que abre el segundo cajon del podio olímpico para España.