La radiografía es clara. En España cada vez se heredan más casas. Es la consecuencia de una sociedad envejecida en la que las estadísticas reflejan cómo de año en año crece el número de viviendas que se reciben como herencia. Lo hacen a un ritmo muy superior al de la compraventa de pisos. Sólo el año pasado rozaron las 200.000 el número de viviendas que se transmitieron y registraron tras una herencia. Suponen un importante incremento respecto a las que se heredaban hace quince años, un 62% más. En ese periodo, en nuestro país se ha pasado de un volumen de compraventa de algo más de 413.00 viviendas en 2009 a las casi 587.000 del año pasado, lo que supone un aumento importante pero no tan elevado, el 42%.

En estos tres lustros la población de nuestro país ha aumentado en casi dos millones de personas. Los 48 millones de habitantes actuales apenas suponen un incremento del 4% de la población. La mayor transformación ha sido el envejecimiento social y el cada vez mayor peso demográfico de las generaciones del 'baby boom' y anteriores, de los que derivan la mayor parte de las herencias que se registran, bien en vida, bien tras su fallecimiento.

La secuencia estadística refleja cómo en comparación con lo que sucedía en 2009 el número de viviendas registradas fruto de una herencia no ha dejado de crecer de año en año. Sólo durante la pandemia el registro de derechos de propiedad cayó, para repuntar después con más fuerza. En 2021 se alcanzó un pico de 201.117 viviendas heredadas. Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística cifran en 199.741 las viviendas heredadas el año pasado.

Andalucía y Cataluña concentran el mayor número de viviendas heredadas en 2023. Una de cada tres se produjo en alguna de estas dos comunidades autónomas. En Andalucía se registraron 34.837 registros por herencia, el 17% del total en España, y en Cataluña 29.871, el 15%. Tras ellas figuran la Comunidad Valenciana (28.457), Madrid (23.119) y Castilla y León (12.537).

Fincas rústicas

Las fincas rústicas es otro de los bienes que se ha disparado en los registros por herencia en los últimos años. En número no alcanzan a las viviendas pero sí supone un incremento muy significativo del 27% en comparación a hace quince años. Sólo el año pasado se registraron como herencia 181.765 fincas con nuevos propietarios.

La evolución de este tipo de transmisiones o incluso de la compraventa de viviendas dibuja una radiografía desigual por comunidades autónomas. Los últimos datos publicados por el INE, correspondientes al pasado mes de junio, muestran que las compras en comunidades como las Islas Canarias o las Islas Baleares el mes de junio registraron un desplome muy importante. Así, en Canarias la compraventa de viviendas cayó un 20% respecto al año anterior y un 17,26% en las Islas Baleares. En comunidades como Aragón o la Comunidad Valenciana el descenso también fue muy importante, con un 14% y 13% respectivamente.

Una menor compra y venta de viviendas que se extendió por todo el país. Las apenas 50.000 adquiridas suponen una caída media del 6%. En la inmensa mayoría de los casos, el 80%, se trató de la compra de una vivienda de segunda mano.

En términos porcentuales, la comunidad autónoma donde más pisos se compran por habitante fue en junio pasado la Comunidad Valenciana, con 154 compraventas por cada 100.000 habitantes, seguida por Murcia, con 158 viviendas y Andalucía, con 152. En el lado contrario, los lugares donde menos pisos se venden son Galicia (78), el País Vasco (94) y Extremadura (103).

Permutas y donaciones

Sólo en junio, en nuestro país se registraron 139.704 nuevos propietarios de fincas urbanas. Entre ellas, en casi 25.000 casos lo fueron por ser beneficiarios de una herencia. En Andalucía sólo en ese mes se formalizaron 3.865 herencias de este tipo, seguida por las 3.790 de Cataluña y las 3.406 de la Comunidad Valenciana. En muchos casos se trata de las regiones con un mayor número de segundas residencias, donde las viviendas vacacionales tienen un mayor peso.

En la tipología de transmisiones recogidas en el registro de la propiedad además de la compraventa y la herencia también se documentan pisos obtenidos bien por una donación o bien por una permuta. En el primer caso la evolución de las donaciones ha sido más desigual. El año pasado alcanzaron las 34.316, una cifra inferior a la del ejercicio anterior y más aún a las 44.146 donaciones de 2021.

Las permutas, los intercambios de propiedad de una vivienda entre particulares sin que medie un pago, eran una práctica mucho más habitual hace años. En 2009, por ejemplo, en España se formalizaron 16.770 operaciones de permuta. Desde entonces este intercambio de propiedades de vivienda ha ido en descenso, hasta tocar fondo en 2020 cuando sólo se tramitaron 2.757 intercambios de propiedades de este tipo. El año pasado en España alcanzaron las 3.466 operaciones de permuta.