Cómo limpiar y cuidar tu barbacoa parece una tarea sencilla. Pero debemos saber que esta es una acción que tiene que hacerse cuidadosamente. No por otro motivo que porque en ella será donde cocinemos nuestra carne, pescado o verduras al aire libre.

De hecho, esto es un punto fundamental. Y es que no todos tienen -o pueden-permitirse cobijar esta herramienta de cocina, algo que debería hacerse, especialmente si son de carbón.

Por lo que, si están la mayor parte del tiempo a la exposición solar (o, al menos en una zona de nuestra terraza o jardín), requerirán de una buena atención para que esté siempre en buen estado.

Porque para muchosm un verano sin barbacoa en el jardín o en la terraza con la familia o los amigos es impensable. Pero no importa si la usamos todo el año o solo durante unas pocas semanas.

Toda barbacoa requiere que la sepas limpiar

Todas las barbacoas, sean del tipo que sean, eléctricas, de carbón o de gas, requieren un cierto cuidado, y toda barbacoa requiere que la sepamos limpiar. Es de esta forma que no solo tendremos con ello la seguridad de tenerla preparada en todo momento, sino que, además, lo que cocinemos tendrá mejor sabor.

Por lo general, suele bastar con limpiarla normal regularmente y una o dos limpiezas profundas al año, por ejemplo, al comienzo y al final de la temporada.

Limpiar tu barbacoa puede ser muy fácil si tienes en cuenta estos trucos /Shutterstock
Limpiar tu barbacoa puede ser muy fácil si tienes en cuenta estos trucos /Shutterstock

Entre las soluciones más eficaces para retirar la grasa y los restos de comida es usar un cepillo para parrillas, ya que están diseñados con cerdas de acero inoxidable para limpiar sin esfuerzo .

Desde El Independiente vamos a conocer algunos consejos para cuidar y limpiar tu barbacoa, pero también lograr mantenerla para que dure muchos años.

Es bueno limpiar la barbacoa antes de usarla

La limpieza de la parrilla antes de su uso es esencial para asegurar que los alimentos se cocinen de manera segura y uniforme Y para hacerlo, podemos seguir estas pautas.

Precalentar la parrilla

Antes de comenzar a limpiar la barbacoa, empieza calentando la parrilla a temperatura alta durante unos 15 minutos. Esto aflojará la grasa y los restos de comida, lo que facilitará su eliminación.

Cepillar la parrilla

Con una herramienta de cepillado de parrilla, rasparemos suavemente los restos de comida y la grasa de la parrilla. Comienza desde la parte superior y avanza hacia abajo para asegurarnos de que cubre toda la superficie.

Limpiar los residuos

Usa un cepillo para quitar los residuos del cepillado. Si nuestra parrilla tiene una bandeja extraíble para la grasa, hay que vaciarla y limpiarla.

Limpiar los quemadores

Con un cepillo de cerdas suaves, limpia los quemadores para quitar la acumulación de grasa y suciedad. Si no podemos quitar la suciedad, usaremos un palillo para limpiar la parrilla.

Inspeccionar la parrilla

Revisa la parrilla para asegurarte de que no haya residuos de comida o grasa en las superficies planas. Si encontramos algún residuo, limpia con un paño húmedo.

Cómo limpiar la barbacoa después de cocinar

Ahora bien; igual que es mejor limpiarla antes de utilizarla (sobre una vez anterior, se entiende), también lo es limpiar la barbacoa después de su uso. Y si es tras cada parrillada, mucho mejor.

Esto no es por otra razón que porque eliminaremos los residuos quemados y limpiando la parrilla de la mejor manera posible. Para eliminar las incrustaciones en profundidad, se recomienda utilizar un cepillo o un estropajo de hierro para frotar toda la superficie de la parrilla.

Seguidamente puedes continuar con la eliminación de los residuos de grasa y la limpieza de la parrilla con una esponja húmeda. Entonces, para evitar la formación de óxido en el metal húmedo, bastará con pasar la parrilla sobre una llama o secarla muy bien.

Realiza una limpieza profunda cada 3 meses para su mantenimiento

  • Es interesante hacer una limpieza profunda cada 3 meses, dependiendo de la frecuencia de uso. Lo importante es cuidar todos los componentes, no dejarlos sucios ni hacer limpiezas parciales que reducen el tiempo promedio de duración de todos los materiales.
  • Nunca debes apagar las brasas con agua.

Como mencionamos al inicio, es conveniente poner bajo resguardo tu barbacoa, evitando que esté expuesta a la lluvia o el sol permanentemente, o bien protegerla con una funda para barbacoa.