Han mantenido un discreto anonimato hasta ahora. La familia española del ex ministro marroquí Mohamed Ziane rompe su silencio en las páginas de El Independiente. La situación, alegan, lo justifica: su hermano lleva cerca de dos años en una cárcel marroquí por criticar al rey Mohamed VI. Tiene por delante otros seis años de cautiverio. Un duro castigo del que, a sus 83 años, dudan que pueda salir con vida.  

Ziane, apodado “el preso más viejo del mundo”, fue excluido de los indultos reales concedidos el mes pasado por el monarca alauí con motivo de sus 25 años de reinado. Hasta 2.476 condenados resultaron agraciados. Una clemencia que le fue esquiva a Ziane y que sus cuatro hermanastros españoles solicitan ahora que el rey se dispone a despachar una nueva ronda de perdones reales con motivo de la conmemoración anual de la bautizada como “Revolución del rey y el pueblo”, el fin del protectorado francés y del exilio del rey Mohamed V. El pasado año hasta 542 presos lograron la libertad por mediación real.

Una persona solamente por expresar su ideología política no debería estar en la cárcel

“Nos dirigimos directamente al rey para pedirle que le indulte. Es una persona de 83 años que está en malas condiciones. Se le nota muchísimo el deterioro. Está en los huesos”, señala a este diario Ángeles Andrades, uno de los cuatro hermanos españoles que le quedan a Ziane y con los que se crió en Andalucía. Otros dos han fallecido ya y cuenta con otro hermano afincado en Estados Unidos. Ángeles y sus cinco hermanos comparten padre con Mohamed y se criaron juntos. “Mi madre lo crió desde que tenía seis años. Su madre, republicana, tuvo que huir a Marruecos. Mi madre nunca renegó ni de su religión ni de su nacionalidad. Figuramos como hijos de madres solteras porque entonces no se aceptaba el matrimonio mixto”, rememora.

Mohamed Ziane, primero por la izquierda, junto a sus padres y sus hermanos españoles. | CEDIDA

Criado en Andalucía

Una infancia y toda una vida posterior en común que la familia española hace pública ahora para reivindicar la figura de Ziane y denunciar su largo vía crucis. “Una persona solamente por expresar su ideología política no debería estar en la cárcel. Si quieren que lo coloquen bajo arresto domiciliario. Si algo tenemos claro es que no va a durar cinco años entre rejas. Mucho sería si durara un año más”, desliza Ángeles. “Tiene problemas de espalda, corazón y riñones. Está muy deteriorado”.

De padre marroquí y madre española, Ziane es un conocido abogado y político marroquí que fue ministro de Derechos Humanos en los últimos años de Hasán II. Caído en desgracia, Ziane llamó a abdicar a Mohamed VI en una entrevista con este diario en octubre de 2022, semanas antes de ser detenido y enviado a la cárcel. "Que Mohamed VI esté fuera de Marruecos es totalmente anormal. No se puede dirigir un país por Zoom", denunció en un dardo que no pasó desapercibido en la corte alauí.

Ángeles vio por última vez a su hermano hace unas semanas, durante la vista de uno de los juicios a los que se ha enfrentado desde entonces. En mayo fue condenado a un lustro en prisión por el "desvío de fondos electorales públicos” del Partido Liberal de Marruecos, un cargo que él niega y que considera un nuevo episodio de la cacería política por sus declaraciones públicas. “Nos dejaron acercarnos a él y abrazarlo. Me dijo que está muy mal pero que no va a echarse atrás”, comenta Ángeles, convertida en portavoz de la familia española de Ziane, afincada desde hace décadas en la localidad gaditana de La Línea de la Concepción.

Es un hermano extraordinario que siempre se ha volcado con la familia. Y como figura pública siempre ha estado luchando por los derechos

“Ahí fue cuando vimos la situación en la que estaba. Es denigrante porque lo tratan peor que a un terrorista. Ni al mayor asesino del mundo no lo tratarían así. Cuando visita los juzgados, lo acompañan dos furgones; entran al tribunal por el sótano para que nadie vea en qué condición está. A la sala lo llevan cuando ya está todo el mundo dentro”, detalla Ángeles. Ziane no recibe visita desde hace unas semanas. “Le redujeron a diez minutos las visitas y las rechaza hasta que puedan ser de 20 minutos”, explica su hermana. Su familia española no tiene autorizados los encuentros en prisión porque no tienen prueba de su parentesco. “Estamos esperando a ver qué sucede para solicitar una prueba de ADN que nos reconozca como hermanos y nos permitan visitarlo”.

Mohamed Ziane a su salida del juzgado.

"Un idealista"

Separados por el Estrecho, Ziane ha mantenido durante años el contacto directo con su familia española. “Es un hermano extraordinario que siempre se ha volcado con la familia. Y como figura pública siempre ha estado luchando por los derechos; ha denunciado toda la corrupción que ha habido en el Gobierno; y siempre ha ayudado en temas políticos.  Es un idealista como yo. Es una persona que lucha por sus ideales, por los ideales de la gente, por la injusticia”, comenta Ángeles. “Es una persona muy querida en Marruecos. Si no hay protestas pidiendo su liberación es por el miedo. En la última vista hubo hasta 90 abogados que querían hablar y que no estaban de acuerdo con el fallo”.

Una voluntad de hierro a la que sus parientes españoles atribuyen sus problemas recientes: primero, la campaña de difamación de los medios de comunicación controlados por el régimen alauí; y, más tarde, su persecución judicial y su presidio. “Es una persona con carácter, muy cabezota”, señala. “Siempre hemos tenido miedo por él porque ha sido siempre muy directo con el Gobierno. Ahora le están castigando sobre todo por haberle dicho al rey que desde un país extranjero no puede gobernar y exprimir al pueblo. Él no se ha metido con la monarquía; ha dicho que se lo deje al hijo”, murmura Ángeles. En su familia española quedan pocas esperanzas de verle fuera de la cárcel. “Me temo que no tenemos muchas esperanzas. Hay miedo de que muera en prisión”, concluye.

Certificado de nacimiento de Mohamed Ziane. | CEDIDA

"Me siento muy español"

En la primera de las entrevistas que concedió a este medio, Ziane se jactó de haber luchado contra el franquismo, pero admitió “haber elegido ser marroquí”. “Me siento muy español, eso es segurísimo. Yo he decidido ser marroquí. Es un deseo mío”, replicó en un castellano con deje sureño. “A mediados de 1950 hubo las revoluciones de la independencia y un romanticismo revolucionario y elegí ser marroquí porque era construir un nuevo país, luchar contra el imperialismo y el colonialismo, creer en unos valores universales en los que sigo continuando creyendo”, alegó. “Hoy en día me puedo preguntar si efectivamente tomé una buena decisión. No lo sé pero no la voy a cambiar a los 80 años. No voy a cambiar la escopeta al hombro ni de rumbo”, esbozó.

Su condición de español de origen ha sido reivindicada ante la justicia por Ziane y grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados, entre ellos el PP, han mostrado su preocupación por su cautiverio instando al Gobierno a realizar gestiones para su liberación. En la familia consideran que España podría hacer más pero duda de que estén en condiciones de intentarlo. “Siempre he aconsejado a mis sobrinos solicitar la nacionalidad española e irse del país, porque ellos están preparados. Ziane se enfadaba conmigo cuando decía eso. Él siempre ha defendido los derechos de Marruecos y la aspiración de que Marruecos sea un país más desarrollado y que respete los derechos humanos, la libertad de expresión o conciencia. Ser un país realmente democrático, que no lo es”, admite Ángeles.