El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunirá el próximo viernes con su homólogo en Canarias, Fernando Clavijo, en La Palma para abordar la situación de la crisis migratoria que asola al país, pero especialmente tiene desbordadas a Ceuta y las islas. El encuentro, confirmado por Moncloa y el propio Clavijo durante una visita a entidades que gestionan los centros tutelados del archipiélago, según ha trasladado EFE, se producirá una semana después del aterrizaje del jefe de Gobierno nacional a Lanzarote, donde ha desarrollado sus vacaciones de verano.

"Esto lo normaliza todo. Estoy encantado porque en el seno de la normalidad de un presidente del Gobierno de España y otro de una comunidad autónoma podamos tener esta charla", declaró Clavijo, quien demandaba estos días que se produjese. La situación es de colapso en la comunidad. En lo que va de año, se ha superado ya en un 126% los registros del año pasado, y las llegadas de migrantes irregulares superan las 20.000.

Reactivado el debate esta semana, con incesantes llegadas a las islas y a otros puntos de la Península de fondo, se cuestionaba desde el seno canario y el PP, el principal partido de la oposición nacional, la "dejadez" de Sánchez en esta cuestión y la priorización del descanso estival o reuniones con Salvador Illa en Lanzarote en lugar de citarse con Clavijo. Este mediodía, la vicesecretaria de Políticas Sociales e Igualdad, Ana Alós, hacía una exigencia: que Sánchez dejase sus vacaciones, se reuniera con Clavijo y asumiera sus "responsabilidades". Y que, además, declarara la emergencia migratoria nacional y convocara un encuentro de la Conferencia de Presidentes. Tan solo tres horas después, se ha comunicado la reunión con el canario.

Bajo el contexto, el PP ha sido el primero en mover ficha de cara al nuevo ciclo de sesiones parlamentario. En rueda de prensa desde la sede nacional de Génova, Alós anunciaba que su partido, en el Congreso de los Diputados, cámara a la que pertenece, había registrado una batería de medidas con forma de proposición no de ley para afrontar el reto migratorio. La siguiente:

"El Gobierno ha estado mirando hacia otro lado. Echándole la culpa a las comunidades autónomas, cuando éstas han sido las únicas que han tenido solidaridad y han acogido. Exigimos al Gobierno que se comprometa con su tarea", expresó Alós. La vicesecretaria del PP calificó de "absolutamente inaceptable" la ausencia de ese encuentro con el líder de Coalición Canaria mientras que sí se ha citado con el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, de su partido. Y más que, durante su estancia, Sánchez "haya sido incapaz de acercarse" a uno de los "centros de menores". Como tampoco "ha hecho en la Península", poniéndose "de lado desde el principio" de la crisis.

Los populares retoman el tema migratorio tomando su pulso aprovechando el parón prácticamente de actividad de los partidos, con Vox y el PSOE ausentes y sin convocatorias de prensa. Tampoco desde el Gobierno en Moncloa, sin encuentros del Consejo de Ministros y reducida la agenda ministerial a algunas presencias en distintos actos menores. Esta mañana, a sabiendas del aumento en lo que va de año de un 66% de la inmigración irregular, se ha solicitado a la Mesa del Congreso la tramitación de varias medidas migratorias para su debate a pleno. Algo que, en septiembre, irá en concordancia con las acciones que tome el Ejecutivo para reencauzar la reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería. Ley que, por el voto contrario del PP, al no estar de acuerdo con los objetivos de socialistas, Sumar y Coalición Canaria, se tumbó.

En total son trece puntos en los que se reiteran varias ideas ya demandadas anteriormente: el incremento de los recursos humanos y materiales, así como la actuación en los lugares de origen de esa inmigración irregular. Se habla de aumentar el número de agentes y de "dotar de mejores recursos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado" para la "custodia de fronteras". Igualmente, aumentar el personal de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional, así como el científico y sanitario para reforzar la atención primaria y los procedimientos de asilo. Se pide solicitar a la UE el "despliegue de Frontex y de la Agencia Europea de Asilo para "ayudar a las policías en las costas, por aire y en la ruta atlántica". Que se dote a España de los mecanismos necesarios, como zona receptora de la Unión, para hacer frente al problema, "que es europeo".

A nivel internacional, también se expone la revisión de los acuerdos de cooperación con terceros países para su mejora y, entre otros, la "garantía de respuesta de estos de los expedientes de devolución" españoles. Asimismo, el despliegue de las Fuerzas españolas para luchar contra las mafias en las zonas de origen, "respetando la soberanía" de los lugares. Se insta, de seguido, a una mejora de la coordinación interministerial entre Exteriores, Interior, Defensa, Trabajo y Migraciones. Se recuerda, igualmente, uno de los requisitos esenciales de Génova para las comunidades autónomas durante la negociación fallida con el PSOE: el fondo de contingencia para contar con recursos regionales para la acogida.

Preguntada por si la asunción de estas medidas escritas por parte del Gobierno y sus socios sería suficiente para votar a favor de la reforma. O si se aceptaría vía real decreto ley la reforma caída en julio, tanto si se incluye o añadiendo una enmienda posterior, Alós no detalló y solo apuntó que éstas "son parte de nuestro plan" migratorio. Denunció que hasta la fecha el Ejecutivo solo ha querido imponer "repartos obligados". Ahí "acababan las funciones del Estado". Reiteró que para el PP es crucial convocar a los presidentes y declarar la emergencia migratoria. "Declárenla en España, porque existe, es real, los datos la avalan. Si no se pone freno, se puede llevar por delante el sistema de atención a la infancia", concluyó. Pero, sobre todo, hablar de la financiación. Durante las pasadas negociaciones "decían que es suficiente" la actual, pero "no lo es", afirmó, indicando que los convenios vigentes "sólo cubren el primer año y "algunas comunidades necesitan miles y miles de euros" para extender la atención hasta la mayoría de edad de los menores o para fomentar la integración.

En plena polémica por el post publicado este lunes por Xavier García Albiol, Alós evitó referirse a su compañero de filas. Pero sí hizo un alegato en favor de la inmigración regular. "Necesitamos a miles de personas. A gente que ya está desarrollando su trabajo. No podemos garantizar la calidad de vida de los que llegan de forma irregular. Si no ponemos freno a las llegadas, hacemos que estas personas no tengan una oportunidad y los dejamos en la economía sumergida" o dependiendo "de las ayudas sociales". "Necesitan trabajar y queremos que vengan", aunque de forma ordenada y regular, defendió la popular.