Era una sesión preparatoria de la reunión de ministros de la Conferencia Internacional de Tokio sobre el Desarrollo de África (TICAD) que celebra este sábado el país nipón y la Unión Africana. En plena reunión, un miembro de la delegación marroquí se ha acercado al embajador de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Lamine Baali, y le ha agredido tras arrojarse sobre él.

Las imágenes de vídeo que se han difundido muestran al miembro de la delegación marroquí abalanzándose sobre el saharaui en mitad de la sorpresa de los asistentes. La intervención del resto de diplomáticos ha detenido la agresión. El representante marroquí ha tratado de retirar la acreditación del diplomático saharaui. La sesión ha tenido que ser suspendida por el incidente.

"El vídeo muestra a la delegación del Estado ocupante marroquí agrediendo al embajador de la República Saharaui ante la Unión Africana, que participó hoy con sus homólogos de los Estados miembros de la Unión Africana en la reunión preparatoria de la Reunión de Asociación Japón-África (TICAD), que comenzó en Tokio. Es un acto vergonzoso y reprensible y muestra la naturaleza matona del régimen marroquí", ha denunciado el embajador saharaui en Nueva York, Sidi Omar, en su cuenta de X, anteriormente Twitter.

Fuentes saharauis denuncian que no es la primera que Marruecos trata de impedir la participación de los saharauis en las reuniones de la TICAD. La RASD es miembro de pleno derecho de la organización panafricana, de la que Marruecos se retiró en 1984 tras ser aceptada en el seno de la organización la RASD. El régimen de Mohamed VI regresó a la Unión Africana en 2017.

La Conferencia Internacional de Tokio sobre el Desarrollo de África (TICAD) se celebra desde 1993 por el gobierno nipón para "promover el desarrollo, la paz y la seguridad de África, a través del fortalecimiento de las relaciones de cooperación y asociación multilaterales".

El Sáhara Occidental, ex provincia española ocupada desde 1976 por Marruecos, es considerado por la ONU un territorio no autónomo pendiente de descolonización. Rabat ha obstaculizado sistemáticamente la celebración de un referéndum de autodeterminación para dirimir el futuro del territorio del que España sigue siendo potencia administradora.