Primero en Upday

 

Es el anuncio musical del año, quizá de la década, los Gallagher están listos para resucitar Oasis, o eso dice la prensa inglesa. Y es que, aunque la especulación y la rumorología sobre un posible regreso ha sido una constante desde que se separaron, la realidad es que el esperado regreso nunca ha estado tan cerca.

A tan solo unos días del 30 aniversario de su primer álbum, Definitely Maybe, los hermanos más mediáticos de Gran Bretaña (con permiso de los Windsor) están preparando una bomba cuyas dimensiones aspira a provocar una auténtica revolución en el centro de la música rock.

La información la publicaba este fin de semana The Sunday Times titulaba: "Reunión de Oasis y conciertos en Wembley el año que viene… ¿ es esta la definitiva, quizás?". En ella se explicaba que los Gallagher habrían resuelto sus diferencias y acordado una gira épica para el año que viene.

Portada de 'The Sun' con la vuelta de Oasis.

Acto seguido, el resto de las principales cabeceras británicas se hacían eco de la noticia llegando a ocupar este lunes las portadas de los principales periódicos, siendo The Sun la más llamativa con su Definitely No Maybes. Esto sumado a una publicación en redes por parte de ambos hermanos en la que se puede leer solamente "27.08.24, 8am" parece confirmar lo evidente. Ya no se trataba de una cuestión de rumorología fan, la maquinaria ha empezado a funcionar e incluso las primeras informaciones ya adelantaban algunas de las claves de la gira del reencuentro.

Noel y Liam, dos caínes condenados a entenderse

Quince años han pasado desde aquella pelea en París en la que Liam le rompió la guitarra a Noel y Oasis se disolvió para formar parte de la historia del rock. Por separado tampoco les ha ido mal, Liam mantuvo al resto de la banda con Beady Eye y Noel siguió su camino con Noel Gallagher's High Flying Birds, pero las canciones de su etapa juntos siempre han sido las más celebradas y esperadas en sus conciertos.

Oasis.

"Oasis era como un puto Ferrari, lucía bien, conducirlo era una pasada, y, de vez en cuando derrapaba si ibas demasiado rápido", recuerda Liam en Supersonic (2016), el documental dirigido por Mat Whitecross que muestra los orígenes y el ascenso a la posteridad de la banda de Mánchester.

Desde el principio, el grupo fue una lucha de poder, con dos hermanos compitiendo por el primer puesto, generando una tensión tan creativa como destructiva que fue capaz de impulsarlos a lo más alto. "La gran fuerza de Oasis residía en la relación entre Liam y yo. Y, a su vez, eso fue lo que acabó con el grupo", explica Noel.

"Yo no me involucraba en la parte musical, yo estaba en plan: 'Eso es cosa vuestra, yo me limitaré a salir ahí y molar un huevo'"

Liam Gallagher

Liam es la voluntad de triunfar, un frontman estiloso, carismático y rabioso hecho para brillar en el centro del escenario. Fue el quien, a los 18 años se le metió en la cabeza que quería ser una estrella y montó el grupo con sus amigos Paul 'Bonehead' Arthurs y Paul McGuigan "Guigsy", al que después se unió su hermano. Noel es el talento que hay detrás de algunas de las mejores letras de la historia de la música británica. El genio ensimismado y sensible que creció con una guitarra en la mano y un porro en la otra.

"Conozco a mi hermano mejor que nadie, Liam es como un perro y yo soy como un gato"

Noel Gallagher

En la antagónica relación de los Gallagher no hay ejemplaridad ni moraleja, solo son dos caínes que se necesitan mutuamente para conseguir estallar la dinamita creativa que son capaces de producir cuando están juntos. Una energía que ha conseguido enganchar a varias generaciones de adolescentes gracias a su capacidad para expresar en canciones la vitalidad caótica e impulsiva de la juventud.

Los 30 de 'Definitely Maybe' y el eterno retorno de Oasis

El momento elegido por los hermanos para solucionar sus diferencias no puede ser más idóneo, coincidiendo con los 30 años del lanzamiento de Definitely Maybe, con el que alcanzaron el primer puesto en las listas de Reino Unido apenas un mes después de lanzarlo.

Su principal compositor, Noel Gallagher, lo definió entonces en una entrevista como "doce canciones sobre estar vivo y pasarlo bien". "Y sobre estar triste pero sabiendo que las cosas mejorarán", añadió Liam justo después.

Toda una declaración de intenciones a la que pertenecen auténticos himnos britpop como Rock'n'Roll Star, Cigarettes & Alcohol, Supersonic, Slide Away o Live Forever. Un disco enérgico, fresco y sin canciones de relleno que juega sin complejos a la psicodelia y al punk en plena moda grunge, reivindicando con orgullo las influencias de referentes icónicos como los Beatles, los Rolling Stones, los Kinks o los Who.

Después de aquello llegó el éxito deseado y desde entonces no tuvieron ningún reparo a la hora de autoproclamarse la mejor banda del planeta, y realmente así lo creían. Quien sabe si ha sido la nostalgia que arrastran los aniversarios, la sanación que promete el tiempo, la necesidad de agradecer su apoyo a los incondicionales, las ganas de hacer caja, o una mezcla de todas ellas, pero el caso es que el retorno con el que tanto han soñado los fans desde hace 15 años, por fin está aquí.

Y es que el intercambio de insultos, faltas y el desmentido de cualquier atisbo de reconciliación ha sido una constante durante todos estos años, al igual que las especulaciones de regreso. La más sonada de los últimos años fue en 2015, con los 20 años de (What's the Story) Morning Glory? en el horizonte y unas entrevistas de ambos donde se dejaba entrever la posibilidad de que Oasis volviera a juntarse, pero Noel se apresuró a negarlo, alegando una mala interpretación de los periodistas. Él se separó de Oasis por una razón y esa razón seguía en pie.

Por su parte, Liam es el que más esperanza ha dado siempre a los fans dejando siempre claro que la época en la que fue el frontman de Oasis fue la mejor de su vida. Por eso, cuando en un vídeo de la discográfica publicado el jueves con motivo del 30 aniversario de Definitely Maybe, Noel se deshizo en elogios hacia Liam, parece que las paces ya están definitivamente (?) hechas.

«Yo no puedo cantar Cigarettes & Alcohol, Rock'n'Roll Star y todo eso. No tengo la misma actitud que él. Mi voz es media Guinness un martes, está bien. La de Liam son diez chupitos de tequila un viernes». Y añadió: «Lo que hizo fue inspirar a los chicos de delante a hacer algo, ¿sabes lo que quiero decir? 'Si él puede hacerlo, yo puedo hacerlo'. Y sigue haciéndolo ahora», se atrevió a afirmar sobre su hermano pequeño.

Y cuando Liam y su habitual desparpajo en redes sociales responde a un fan que le menciona en la información del Sunday Times con un: "Nos vemos en primera fila", parece que no hay nada más que hablar.

Un nuevo Knebworth para batir otro récord

Antes de la era digital, antes de internet y la invasión de las redes sociales, el último gran fenómeno rock fue Knebworth en agosto de 1996. Siguiendo la estela de Led Zeppelin en el 79, Mike Oldfield en el 80 o Queen en el 86, Oasis se propuso llenar dos días seguidos los campos de esta pequeña aldea inglesa con dos conciertos multitudinariamente épicos para un total de medio millón de asistentes.

Pero no solo eso, aproximadamente 2,7 millones de personas pidieron entradas, esto significa que 1 de cada 20 personas en Inglaterra intentó acudir a alguna de las dos actuaciones, convirtiendo aquello en el evento que nadie se podía perder, antes incluso de que se pusiera de moda el miedo a perderse algo (fomo).

Con el anuncio de la gira, los Gallagher se han propuesto volver a escribir en las páginas de la historia musical con una serie de diez actuaciones seguidas en el estadio de Wembley, batiendo el récord establecido por Taylor Swift y sus ocho conciertos de este año. Además, la gira incluiría una emotiva actuación en su Mánchester natal con un concierto al aire libre en Heaton Park. También se rumorea que podrían encabezar el cartel en Glastonbury, haciendo que en 2025 el verano tenga nombre propio.

Los medios ingleses hablan de precios que superarán las cien libras e incluso se atreven a especular con las ganancias totales que podrá generar tal acontecimiento. «Es una gira que podría recaudar fácilmente más de 400 millones de libras», afirman en The Sun, mientras calculan que, con las entradas, el patrocinio, la mercancía y la filmación, cada uno de los hermanos se embolsaría más de 50 millones de libras cada uno.