El 28 de julio de 2024 será recordado como una fecha histórica en Venezuela. Los ciudadanos, los que viven en el país y una minoría de los más de siete millones de exiliados, votaron a su presidente y lo hicieron sin miedo. El régimen liderado por Nicolás Maduro no se esperaba una derrota en las urnas. Ni tampoco que fuera tan contundente. Por eso no supo cómo apañar los resultados de forma que el fraude no fuera obvio. Y optó por ocultar las pruebas del delito, vamos, de su derrota.

Este mes hemos visto como la Venezuela coraje ha hecho frente a la Venezuela represora. La Venezuela de todos aquellos que se han atrevido a ir a las manifestaciones en las que se reclama que se muestren las actas electorales. La Venezuela de quienes informan con riesgo de su libertad. La Venezuela de los que desde las universidades, la Administración, o la Iglesia, han dicho a Maduro que ya basta. Enfrente tienen a la Venezuela que recurre a la difamación del disidente y a la persecución sistemática.

"Cuando terminen con los políticos y su entorno, irán a por los intelectuales", nos comentaba una periodista venezolana. Es el régimen del terror, que ahora cuenta con Diosdado Cabello al frente del Ministerio del Interior.

Los logros

María Corina Machado, a quien el régimen inhabilitó para ser candidata pero lo ha sido gracias a su hermanamiento con el ex diplomático Edmundo González Urrutia, decía la víspera de que se cumpliera el primer mes desde el 28J en una entrevista con la periodista Idania Chirinos en NTN24: "Hemos ganado apoyos monumentales de afuera. Desde el panel de la ONU, el Centro Carter, la UE, los expertos de universidades, todos dicen que las cifras del CNE no son creíbles y que las muestras de nuestras actas son auténticas. Nunca antes habíamos podido demostrar el fraude del régimen y nuestra victoria". 

Incluso un funcionario del Consejo Nacional Electoral, Juan Carlos Delpino, ha reconocido en una entrevista en The New York Times que tenía "serias dudas" sobre las declaraciones de victoria del presidente autoritario Nicolás Maduro. Delpino señalaba que el CNE falló al país. "Yo tengo vergüenza y pido disculpas a la población venezolana porque todo el plan que se tejió para tener unas elecciones aceptadas por todos no lo logré". Delpino, abogado, era uno de los dos miembros del CNE designados por la oposición.

¿Qué se ha logrado en este mes? María Corina Machado mantiene que hay orgullo por lo logrado el 28 y el 29 de julio, y a la vez indignación por la reacción del régimen. "Están actuando contra toda la sociedad: ancianos, periodistas, amas de casa, hasta niños están presos", señalaba en NTN24. Pero está convencida de que el avance hacia la libertad es incontestable e irreversible.

Por un lado, la comunidad internacional, todo el mundo democrático, ha replicado a Maduro que su deber es presentar las actas si quiere que se le reconozca como vencedor. Mandatarios de izquierdas como el chileno Gabriel Boric han acusado de fraude a Nicolás Maduro. El Centro Carter, que tenía el visto bueno del régimen como observador electoral, concluyó que no se daba las condiciones mínimas de una elección democrática. Y la ONU. Y la Unión Europea. Y Estados Unidos. Hasta Brasil o Colombia reconocen que la victoria de Maduro es cuestionable. Con quién cuenta Maduro? Con Cuba, Rusia, Irán.

El régimen así ha quedado deslegitimado y a Maduro esa legitimación le importa. Por eso celebra elecciones. Como dice en su cuenta de X Jorge Lazo Cividanes, profesor de Ciencia Política en la Universidad de Ottawa, "hay quienes piensan que la legitimidad es un concepto inútil o no importa. Y, no obstante, todos los dictadores la buscan. Lo hacen porque la represión es inversamente proporcional a la legitimidad. Y la represión a gran escala es un peligroso elemento para sostenerse".

La huida hacia delante del régimen ha llevado a Maduro a secuestrar a niños, ancianos, dirigentes políticos, responsables comunales, amas de casa... Son secuestros porque sus fuerzas de seguridad hacen desaparecer durante días a los que aprehenden, hasta que finalmente su familia y abogados los localizan. Incurren en desapariciones forzosas.

El director del Foro Penal, Alfredo Romero, ha dicho que es la mayor oleada de detenciones que ha vivido Venezuela en el siglo XXI. En declaraciones a El Independiente, Alfredo Romero decía: "Todo el pueblo venezolano se siente perseguido, intimidado, aterrorizado".

Según los datos de esta ONG, que se dedica a brindar asistencia a las familias de los secuestrados por el régimen, desde el 29 de julio hay 1.780 personas arrestadas, de ellas 114 adolescentes. Hay casos de discapacitados o de una menor de edad embarazada. También han castigado a las personas del entorno de la oposición, como el abogado Perkins Rocha, amigo de María Corina Machado, o a dirigentes políticos como Freddy Superlano, ex diputado de la Asamblea Nacional de Voluntad Popular. También hay una decena de periodistas: el último arrestado, este 28 de agosto, es Biagio Pilieri. Junto a su hijo Jesús, fue perseguido. La última ubicación de su móvil le sitúa en el Helicoide.

¿Hasta dónde está dispuesto a llegar Maduro en su campaña represiva? No parece que haya llegado al final. Para ejecutar sus políticas de persecución sin límites ha nombrado a Diosdado Cabello como ministro del Interior. En el último reajuste de su gobierno se aprecia cómo necesita sentirse pertrechado por la vieja guardia, Delcy Rodríguez en Petróleo, Padrino López en Defensa y un Diosdado Cabello que pasa a primer plano como brazo ejecutor de la represión.

A pesar de todo, María Corina Machado suscribe que "Maduro está en su punto de mayor debilidad. La represión brutal solo le hunde más y le aísla más". Y está convencida de que el camino de Venezuela hacia una transición, que será muy compleja, es inevitable.

María Corina Machado, en la calle

Mientras tanto, sigue mostrando coraje al salir a la calle en movilizaciones como la convocada este miércoles, al cumplirse un mes de la convocatoria electoral. "Cada día que pasa ellos está más aislados y nosotros estamos avanzando... Va a caer la tiranía, vamos a triunfar. No hay vuelta atrás", ha dicho María Corina ante miles de venezolanos.

Machado ha criticado la sentencia de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que el pasado 22 de agosto avaló los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE), después de realizar un peritaje técnico. Ahora demandan a Edmundo González Urrutia que se presente ante la Fiscalía, lo que evita debido a que un régimen como el chavista no garantiza que vaya a respetar su integridad física, su seguridad y su libertad.

"Nos dijeron que no íbamos a unir a Venezuela y levantamos a un país. Nos dijeron que era imposible hacer primarias e hicimos las más arrechas. Nos dijeron que no íbamos a poder demostrar el fraude y demostramos la victoria de Edmundo González al mundo entero. Y ahora dicen que el régimen no va a ceder y lo vamos a hacer ceder que significa hacer respetar la voluntad del 28 de julio", ha clamado la líder opositora, quien vive en la clandestinidad ya que el régimen mantiene su amenaza de detención.

María Corina Machado ha terminado su alocución cantando el himno de Venezuela: "Gloria al bravo pueblo/ Que el yugo lanzó/ La Ley respetando/ La virtud y el honor". Y se ha despedido con entusiasmo: "Viva Venezuela libre. Son unos valientes, carajo".

Y con toda convicción ha dicho a NTN24: "El 10 de enero tendremos Edmundo González Urrutia y será el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas". A las Fuerzas Armadas Bolivarianas, María Corina Machado ha vuelto a apelar: "Saben lo que tienen que hacer en el cumplimiento de la Constitución". Si lo hicieran, Machado tendría sus días contados. Tendrían que reconocer a Edmundo González Urrutia como presidente de Venezuela.