Se hablará de la brecha tecnológica de la Unión Europea y de los precios de la energía. También se mencionará la necesidad de atraer talento y de innovar, pero los costes laborales no estarán presentes en el análisis que el ex primer ministro Mario Draghi presentará en la Comisión Europea este lunes. Draghi avanzó las líneas maestras del documento a los presidentes de los grupos políticos del Parlamento Europeo esta semana y allí fue recibido con entusiasmo por un lado y con escepticismo por el otro.

La inflación ha sido una durante los últimos años una de las consecuencias económicas de la pandemia. Esto ha provocado que los costes laborales hayan aumentado para algunos sectores y también que el poder de compra de los salarios haya disminuido. Sin embargo, el italiano no entrará a valorar si la Unión Europea tiene que modificar el precio que pagan las empresas por sus trabajadores.

Los Verdes ven con buenos ojos lo de plantear la competitividad europea con un nuevo enfoque, pero el grupo de La Izquierda cuestiona, no solo el contenido del informe, sino la legitimidad del italiano y las reuniones que ha tenido con actores implicados para elaborar el mismo.

Si la anterior legislatura europea fue la del Pacto Verde, esta se plantea como la legislatura en la que la Unión Europea tiene que avanzar en industrias clave para competir con China y con Estados Unidos. La pandemia puso de relieve la importancia de la autonomía estratégica y los estados miembros trabajan para tener menos dependencia de terceros países.

Draghi ha incluido la relación con los competidores de la Unión Europea con los que asegura que deben mantenerse las relaciones comerciales clave a la vez que subraya los valores europeos.

Fuentes diplomáticas apuntan que el informe destaca los "frenos estructurales" que ha tenido la competitividad europea en las últimas décadas: la innovación rezagada, los altos precios de la energía -derivados de la guerra entre Rusia y Ucrania-, la necesidad de acelerar la digitalización y la falta de habilidades para los empleos del futuro se han convertido en un lastre para la Unión Europea.

Aunque desde los populares europeos califican de "revolución" lo que va a plantear Draghi, lo cierto es que él mismo expresó que algunas de sus ideas ya están en las líneas políticas que presentó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen tras su reelección el pasado mes de julio. Ante estas palabras, los Verdes le pidieron al italiano mayor concreción, "menos palabras vacías", aunque reconocen que el expresidente del Banco Central Europeo "ha hecho sonar la alarma" sobre los cambios necesarios en la UE.

El informe también incluirá menciones a las ayudas de estado y a la necesidad de mayor inversión. Habrá menciones a la defensa, un sector que ha cobrado todavía mayor importancia en los últimos años. En total, el documento que se conocerá este lunes contará con una decena de temas para los que Draghi ha elaborado recomendaciones concretas.

Según otras voces diplomáticas, el italiano hace un llamamiento a movilizar todas las herramientas a disposición de los estados miembros para garantizar una mayor competitividad: desde mecanismos legales hasta herramientas de financiación.

En el texto habrá similitudes con el informe encargado al otro primer ministro italiano Enrico Letta sobre cómo potenciar el mercado único europeo. Desde los grupos políticos esperan que así sea para que sea más fácil que las recomendaciones de ambos expertos se puedan materializar durante la próxima legislatura.

Cabe recordar que este informe fue encargado por la Comisión Europea en diciembre del año pasado. Hacer frente a las empresas de Estados Unidos y de China se ha convertido en un objetivo común para las compañías de la Unión Europea. Unir esfuerzos e invertir recursos de forma conjunta es la respuesta para muchos de los retos que tiene ahora mismo la UE, no solo en términos de competitividad empresarial, también como respuesta a las crisis geopolíticas o a los avances tecnológicos, como la inteligencia artificial.