El diputado del Bloque Nacionalista Galego (BNG) Néstor Rego ha pedido al ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska que cumpla con las recomendaciones del Defensor del Pueblo y deje de asignar intérpretes marroquíes a los saharauis solicitantes de asilo.

"La mínima sensibilidad y empatía política y humana debería llevar al Ministerio de Interior a tener en cuenta la situación que vive el pueblo saharaui por parte de Marruecos: décadas de ocupación, de persecución y de vulneración de sus derechos humanos", señala Rego en la pregunta por escrito al Gobierno presentada este jueves en el Congreso de los Diputados.

El Independiente denunció esta semana que, en un momento de incremento de saharauis que llegan al aeropuerto madrileño de Barajas y solicitan protección internacional, el departamento que dirige Grande-Marlaska sigue eludiendo la recomendación del Defensor y en las últimas semanas ha asignado a intérpretes de origen marroquí y en dariya (el dialecto árabe que se habla en Marruecos).

"Falta de empatía"

"Destinarles intérpretes de origen marroquí es una burla y una total falta de respecto a un pueblo que vive en unas condiciones infrahumanas en cinco campamentos en Tinduf, que sufren persecución, que tiene miles de personas presas políticas en cárceles de Marruecos, sometidas a torturas y privadas de derechos jurídicos y políticos, un pueblo sometido a constantes ataques por parte del ocupante Marruecos", arguye el diputado gallego.

A su juicio, "no puede entenderse que el Gobierno del Estado haya cambiado la tradicional posición del Estado español en defensa de la autodeterminación del Sáhara Occidental, en la línea de las resoluciones emitidas por la Organización de las Naciones Unidas, y haya asumido la posición de Marruecos". "Y mucho menos, podemos comprender la falta de sensibilidad del Gobierno a respeto de esta cuestión y habilitar intérpretes en dialecto hasaní", añade.

"Posición entreguista" del Gobierno de coalición

A la luz de los acontecimientos, el BNG pregunta a Marlaska las razones por las que "destina intérpretes en dialecto dariya y de origen marroquí para atender a las personas saharauis que llegan al aeropuerto de Madrid Barajas y piden protección internacional". "¿Por qué no destina traductores en dialecto hasaní que es el que utiliza el pueblo saharaui para, además de demostrar respeto hacia las personas saharauis, facilitar una adecuada comprensión y atención de las y de los que solicitan asilo en el Estado español?", se interroga. "¿No cree que demuestra poca sensibilidad y humanidad hacia un pueblo ocupado, que sufre persecución, vive en condiciones infrahumanas en campamentos en Tinduf, que tiene miles de presos políticos en las cárceles de Marruecos y que está sometido a constantes ataques por parte de Marruecos?".

El diputado también pregunta si el ministerio cambiará su modus operandi y exige conocer las razones por las que desoye al Defensor. ¿Recuperará el Gobierno la tradicional posición de apoyo a la autodeterminación del pueblo saharaui y abandonará la posición entreguista a Marruecos?", concluye.