Israel acaba de ejecutar una sofisticada operación contra Hizbulá, digna de serie de Netflix. La Inteligencia israelí ha intervenido todos los aparatos de comunicación por radio, conocidos como buscas, de un gran número de milicianos de Hizbulá. Hizo sobrecalentar las baterías a distancia que explotaron. Al menos 2.800 personas, entre ellos numerosos terroristas de Hizbulá, estarían heridos. Doscientos se encuentran en situación crítica, según informa el diario israelí Haaretz. Sin embargo, Hizbulá solo ha reportado tres heridos, entre ellos una niña. Ha resultado víctima leve el embajador de Irán en el Líbano, Mojtaba Amani, pero su estado no es grave. Irán es patrocinador de Hizbulá.

Una cadena de explosiones de numerosos mensáfonos ha causado cientos de heridos en varios puntos del sur del Líbano, el oriental Valle de la Bekaa y los suburbios meridionales de Beirut. "Una gran cantidad de personas con heridas diversas están llegando a los hospitales libaneses y se ha descubierto inicialmente que las heridas están relacionadas con la explosión de aparatos inalámbricos en posesión de los heridos", ha informado el Ministerio de Salud Pública del Líbano en un comunicado.

Todos los hospitales en las áreas han activado el nivel de "alerta máxima" y se preparen para lidiar con una "necesidad urgente de servicios sanitarios de emergencia".

Fuentes de Hizbulá aseguraron que se trata "la mayor brecha en su seguridad" en el último año de enfrentamiento con Israel. La operación es de gran complejidad por lo que se deduce que ha requerido de la participación de varias agencias.

Enorme brecha de seguridad

De acuerdo con la información manejada por Al Jazeera, se han empleado explosivos de alta potencia, incluso en pequeñas cantidades. Además, se ha insertado en cada localizador manualmente entre uno y tres gramos de material altamente explosivo, sin que eso dañe su funcionalidad. Los buscas eran unos aparatos de última generación adquiridos por Hizbulá recientemente. Hacía dos meses Hizbulá había prohibido los móviles a sus miembros y los había sustituido por estos buscas.

Llama la atención que Hizbulá no ha atribuido este ataque a Israel en un primer comunicado. Ha dicho que ha iniciado una investigación "para determinar las circunstancias que han llevado a las explosiones". Ha pedido que no se propaguen rumores que ayudan "en la guerra psicológica de Israel". En un segundo comunicado Hizbulá ha acusado a Israel y ha prometido que habrá "un castigo por esta flagrante agresión".

Topaz Luk, un estrecho asesor del primer ministro Benjamin Netanyahu, ha insinuado en un post en X que Israel estaba detrás de la explosión de aparatos de radio en todo Líbano, pero ha borrado el post poco después. La oficina de Netanyahu ha asegurado que Luk no ha actuado como portavoz del primer ministro en varios meses.

El jefe del consejo local de la ciudad de Shlomi, en el norte de Israel, Gabi Na'aman, ha solicitado a los residentes de la zona que permanecieran cerca de los refugios. "Debido a la singular situación de seguridad en la que nos encontramos desde hace una hora, les pido que, por precaución, permanezcan cerca de sus hijos y de sus refugios", ha declarado Na'aman.

En la mañana del martes, el jefe del Mossad, David Barnea, se ha reunido con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que a continuación ha visto a los máximos responsables del Ministerio de Defensa. Se especulaba que habría una escalada inminente en el norte de Israel. También es insistente el rumor que apunta a que Netanyahu quiere desembarazarse del ministro de Defensa, Yoav Gallant, y reemplazarlo por el diputado opositor Gideon Sa'ar. Este relevo se habría pospuesto por la operación en curso en el Líbano.

También han explotado mensáfonos en Siria. Siete personas han muerto en la localidad de Seyedah Zeinab, un bastión chií en Damasco, según informa The New York Times.

Irán es uno de los principales aliados de Hizbulá, grupo al que ha apoyado financieramente y con armamento desde los años 80. Teherán además capitanea el llamado Eje de la resistencia, una alianza informal anti israelí formada además de por Hizbulá por los palestinos de Hamás y los hutíes del Yemen, entre otros.