"Es absurdo prohibir una película que nadie ha visto. Es infantil pensar en ello. Primero que no se tiene que retirar ninguna película, que es una cosa en la que solo puedes aprender cosas, no es dañino, es algo artístico. Lo veo una exageración tan ridícula". Así ha respondido el cineasta Albert Serra durante una entrevista para el corresponsal de Europa Press Francisco Serrano a las peticiones de la organización animalista PACMA para prohibir la exhibición en el Festival de San Sebastián de su documental sobre la tauromaquia Tardes de soledad. La película, que se presenta hoy en el certamen, sigue al torero peruano Andrés Roca Rey durante la temporada taurina española.

El primer pase con público del documental ha sido recibido con aplausos, aunque muchos espectadores no ocultaban su despiste ante la primera lectura rápida de si Serra estaba a favor o en contra del festejo. "Mi película no está al servicio de ninguna causa, sino al servicio del cine", ha dicho en la rueda de prensa. "Si estuviera pensando en lo que dice la gente, no haría nada. Es una película y no tiene ninguna otra consideración, nunca la tuve en ninguna otra película mía, no voy a empezar ahora". PACMA ha convocado esta tarde una manifestación ciudadana en contra de la exhibición de la película.

Una película para todos

El realizador catalán, autor de títulos premiados en los últimos años como Pacifiction o Liberté –un particular homenaje a los libertinos franceses del siglo XVIII–, ha señalado que la polémica con PACMA no le interesa "mucho". A su juicio es un tema "irrelevante, triste y muy patético" porque "la tauromaquia ya existe" sin Tardes de soledad.

Serra, que se reconoce como taurino, ha querido aclarar que su película no es para taurinos sino para "aficionados al cine". Por ello ha invitado al público a "no opinar sin verla". "La película está hecha con inocencia y por eso puede reverberar hacia un poco de fantasía. No es un documental que está muy asentado en la realidad, sino que va flotando hacia otros caminos. Tiene algo de envolvente, de hipnótico incluso", ha explicado.

Un documental surgido en Barcelona

Tardes de soledad surgió de una propuesta del Máster de Documental de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, ciudad donde curiosamente los toros están prohibidos desde 2016. "El único tema que tenía era la tauromaquia y si no lo hacía yo no lo iba a hacer nadie", ha reconocido Serra. La película muestra la corrida, pero también momentos más íntimos, el ritual de vestirse o la celebración de los éxitos del torero con su cuadrilla. "La grandeza de Roca Rey fue que no puso ninguna condición y creo que la gente puede descubrir muchas cosas bonitas y le quita banalidad a este debate. Lo vemos de cerca, lo vemos en la intimidad y vemos qué es esto y el porqué del grado de seriedad que existe" alrededor de la fiesta, ha añadido el director.

En la rueda de prensa, Serra ha admitido que "le gustaba" la estética del "proceso lento de la muerte" de los animales. La agonía de los seis toros de la corrida que se presenta en Tardes de soledad ofrece los momentos más duros del documental. "Se ve cómo la vida les abandona, en un momento único porque el animal no tiene conciencia de que va a morir, no sabe lo que es la muerte, y ese proceso lento de cómo la vida le abandona lentamente me parecía poético, ese proceso raro de ver de esa manera", ha explicado el cineasta. Quizá en el hecho de que los primeros espectadores no sepan si Serra está a favor o en contra de los toros resida el primer éxito de su película.