En pleno atasco de las negociaciones entre Gobierno, patronal y sindicatos por la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, el Ministerio de Industria que dirige el socialista catalán Jordi Hereu acaba de poner en marcha un ensayo de la jornada laboral de cuatro días a la semana a la que se abre el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo en "algunos sectores" si se mantiene la misma productividad.

La Escuela de Organización Industrial (EOI), dependiente del citado departamento ministerial, resolvió hace unos días la convocatoria de ayudas dirigidas al impulso de la mejora de la productividad en pequeñas y medianas empresas (pymes) industriales a través de proyectos piloto de reducción de la jornada laboral.

Se trata de una demanda que planteó en 2021 el partido Más País de Íñigo Errejón a cambio de apoyar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de entonces. Así lo negocio con el departamento que por aquel entonces dirigía la exministra Reyes Maroto, que le prometió una inversión de 50 millones de euros.

Ahora, en plenas conversaciones sobre la reducción de jornada, el líder del PP cree que ese tipo de mecanismo es plausible. "El objetivo a medio plazo es conseguir una España en la que trabajando cuatro días a la semana podamos tener la misma productividad de otros países del mundo, que probablemente también van a ir a ello", dice en un reportaje de la revista Vanity Fair.

Aunque Errejón dice que ya no es la meta de la plataforma Sumar que encabeza la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. "Le suele pasar oye campanas y no sabe dónde. No va por ahí nuestra propuesta. Nuestra propuesta es la reducción de jornada laboral sin reducción de sueldo en un primer lugar o en un primer plazo para garantizar una jornada laboral de 37 horas y media sin reducción de salario para todos los trabajadores", sostuvo el diputado madrileño sobre la postura expresada por el presidente del PP.

La reflexión del líder gallego no ha gustado nada en las filas del PP de Madrid que dirige Isabel Díaz Ayuso. Si Feijóo se muestra abierto a incorporar principios de flexibilidad para trabajar un día menos a la semana, el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local del Gobierno de Ayuso, Miguel Ángel García Martín, se mostró completamente contrario argumentando que en un país que, "desde luego necesita mejorar la competitividad y la productividad", la reducción de la jornada "va en contra de los autónomos y de las pymes".

Medio millón para cinco empresas

La convocatoria de Industria ha tenido un éxito muy relativo, pues solo se presentaron a ella un total de 42 empresas. Finalmente, solo cinco de ellas se beneficiarán de financiación para acometer sus proyectos piloto por un montante total de casi 530.000 euros. Se trata de Industria Desmontadora Andaluza SL, Descontrol Editorial e Imprenta SCCL, Artemasol SL, Ingreen Innovación SL y Cachiman Grafic SLU.

Las cinco empresas beneficiarias de las ayudas de Industria son sociedades consideradas pymes, con personalidad jurídica propia y legalmente constituidas en España y que desarrollen una actividad industrial.

Para completar el programa piloto, la EOI llevará a cabo un estudio comparativo con otras iniciativas similares a nivel internacional. Para ello se analizarán los diferentes proyectos piloto que se están llevando a cabo en países como Reino Unido, Australia, Canadá, Portugal o Islandia. El objetivo de este informe es analizar en profundidad el resultado e impacto obtenido en función de los diferentes sectores, puestos de trabajo, tipología de proyecto o medidas tecnológicas o de gestión implantadas para aumentar la productividad. De él pretende extraer conclusiones o recomendaciones de carácter técnico "que permitan diseñar políticas públicas efectivas y eficientes".

Movilizaciones de los sindicatos

Al margen de esa prueba piloto, la reducción de la jornada a las 37,5 horas que se discute en el seno del diálogo social no muestra avances. Por su parte, los 'populares' hablan de introducir flexibilidad y de la posibilidad de aplicar reducción de jornada en función de los sectores productivos. Este punto constará en un apartado de la Ley de Conciliación que tienen previsto llevar al Congreso la próxima semana. 

De momento, los sindicatos CCOO y UGT se movilizan este jueves para defender la reducción de la jornada laboral hasta las 37,5 horas semanales para 2025. Se trata de una de las principales medidas comprometidas por el Gobierno de coalición entre PSOE y Sumar. Pero tras muchos meses de negociaciones con los agentes sociales, la situación no se desbloquea por la negativa de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) a aceptar que se haga mediante una ley y a través del cauce de la negociación colectiva entre patronal y sindicatos.

Los secretarios generales de ambas centrales sindicales -Pepe Álvarez y Unai Sordo- encabezarán este jueves en Madrid las movilizaciones delante de las sedes de la CEOE y de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) para exigir a la patronal española que desbloquee las negociaciones.

Precisamente, esa situación y la complicada aritmética parlamentaria con la que cuenta el Gobierno hace temer a los sindicatos que la reducción de jornada no sea aplicable en 2025 como estaba previsto, sino que tenga que retrasarse su entrada en vigor hasta 2026. La ministra de Trabajo y Economía Social, ha negado este extremo. La mesa volverá a reunirse el próximo 11 de octubre.