Los esfuerzos del nuevo gobierno municipal de Jaume Collboni no han fructificado. La inseguridad se mantiene como el principal problema para los barceloneses con unas cifras -destacada como el primer problema por el 27,7% de los encuestados- que la sitúan cinco puntos por encima del registro de año pasado y casi 15 puntos por encima de lo que reflejaba el mismo estudio hace solo una década. De hecho, se trata de la cifra más alta de la serie histórica de la Encuesta de Servicios Municipales que elabora anualmente el Ayuntamiento de Barcelona.

Pese a este dato los barceloneses aprueban el primer año de gestión de Collboni. Y lo hacen con una nota superior a la obtenida por Ada Colau en la recta final de su mandato, un 6,2 global, frente al 5,8 obtenido por la ex alcaldesa. En el haber de Collboni, la caída de la preocupación por la limpieza, que era el segundo problema hace un año y cae ahora a la tercera posición, señalada por un 9,3% de los 6.000 vecinos consultados.

Por contra, crece la preocupación por las dificultades para acceder a una vivienda, que se sitúa ya como el segundo problema, destacado por el 12,3% de los encuestados. Aún así, la preocupación por la inseguridad duplica a la vivienda, pese a que los precios del alquiler alcanzaron un nuevo récord en la capital catalana este verano, con una media de 1.200 euros al mes y una subida interanual de 100 euros.

Suben turismo e inmigración

Destaca también el crecimiento de la percepción del turismo como problema de la ciudad. Es el principal problema para el 5,4% de los consultados, el doble que hace un año. También los "problemas asociados a la inmigración" suben y se sitúan en sexta posición con un 3,8% de los encuestados señalándole como primer problema cuando hace un año sólo lo hacía un 1,7%.

Respecto al relevo en la alcaldía, el 80,4% de los consultados aprueban la gestión municipal, nueve puntos más que en la anterior encuesta, en la que se valoraban los últimos meses de gestión de Colau. De hecho, se trata de la primera encuesta que pondera la gestión de los socialistas, puesto que el trabajo de campo de este macro-sondeo se realiza entre los meses de enero y abril.

A este contexto se ha acogido la número dos del Ayuntamiento, Laia Bonet, para restar importancia al crecimiento de la sensación de inseguridad. Bonet ha reconocido que "son percepciones que no pueden ser menospreciadas y deben ser atendidas", pero también ha recordado que los últimos datos de los Mossos muestran una reducción de los delitos en la ciudad.

Durante los meses de julio y agosto los delitos en la ciudad disminuyeron un 7% de media. En el caso de los delitos violentos, el descenso ha sido del 5% y en el de los delitos contra el patrimonio de un 10% según recordó la teniente de alcalde remitiéndose a las cifras anunciadas por la consejera Núria Parlón en la reunión celebrada la semana pasada con Collboni en el Ayuntamiento.

En este contexto, Bonet expresaba su confianza en que en próximas ediciones de la encuesta esta percepción sobre la seguridad mejorará. Deben ayudar, pronosticó, medidas como el incremento de la cifra de agentes patrullando por la ciudad, el abordaje del problema de la multirreincidencia y "la mejora de la coordinación entre Mossos y Guardia Urbana".