El Ministerio de Exteriores ha nombrado a una jefa de visados para la embajada de España en Mauritania. El puesto se cubre tras más de tres meses vacía y después de la publicación de lo que estaba pasando por El Independiente.

Según el Boletín Oficial del Estado (BOE), el departamento que dirige José Manuel Albares ha designado a Mercedes Q. G. como la nueva jefa de visados en Nuakchot, la capital de Mauritania. La plaza estaba vacante desde el 19 de junio, cuando el anterior funcionario fue cesado, un día después de que empezase sus vacaciones.

El nombramiento está firmado por el Subsecretario de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Xavier Martí Martí. La publicación fue oficial el pasado sábado 28 de septiembre, aunque la convocatoria estaba abierta desde el 28 de junio. Este periódico preguntó por primera vez por el vacío que había en un puesto tan sensible como la de jefe de visados en Mauritania el 26 de septiembre.

Es decir, Exteriores sacó adelante un nombramiento para una plaza que llevaba vacante más de tres meses tan sólo dos días después de que El Independiente preguntase para publicar su información. Ante la falta de respuésta, este diario insistió el viernes pasado. Una persona de la subdirección general de Comunicación dijo que les llevaría "una semana por lo menos" hacer la consulta a la embajada o a su base de datos interna.

Puesto clave

El jefe de visados es un puesto clave en materia de inmigración. Es la persona responsable de verificar y comprobar toda la documentación de quienes solicitan un permiso temporal para entrar en España. Es el responsable de identificar si los papeles de una persona son oficiales, si corresponden a ese individuo, si ha viajado a nuestro país con anterioridad, qué hizo en ese tiempo, comprobar que su próximo destino es real... Su trabajo es fundamental, por ejemplo, en materia de seguridad en caso de que algún terrorista quisiese llegar a la península. Más en un país como Mauritania.

El encargado de los visados, una vez hecho el trabajo de comprobación y coordinación, propone a las personas a las que se le va a conceder el permiso. Es el cónsul quien da el visto bueno, aunque por norma general aprueba lo que el funcionario le pone sobre la mesa. España concede unos 20.000 visados al año en Mauritania. Para entender la dimensión, Francia da 1.000 y Alemania 500, según las fuentes consultadas.

Mafias

Antes de llegar a la embajada, los visados pasan por las manos de las mafias. Hay tres niveles. El primero pasa por quienes convencen a los locales y a los migrantes de otros países que se encuentran en Mauritania de que les pueden conseguir un visado para España, a cambio de una importante suma de dinero o de una deuda que asumirá la familia.

Una vez han pagado, confeccionan documentación falsa que entregan a la empresa BLS. Exteriores tiene depositado en esta compañía la recepción y tramitación de las solicitudes de visado en muchos de los países donde tiene embajadas. Muchos solicitantes se han quejado a la legación española en Mauritania acusando a BLS de ser una mafia más para conseguir visados, según la documentación en poder de este periódico. La tercera pata está en las citas que la propia empresa emite para poder llevar la documentación. Estas se agotan enseguida y en la capital, Nuakchot, existe un mercado negro en torno a su reventa. Cuando el jefe de visados rechaza los papeles falsificados, es cuando terminan montándose en los cayucos que llegan a Canarias.

Examen a Albares

José Manuel Albares comparecerá el próximo viernes en el Congreso para dar cuenta de distintas polémicas, entre las que está la presión migratoria y los acuerdos sobre esta materia con Marruecos y Mauritania, precisamente.

Venezuela, los avances con Gibraltar o el reciente enfrentamiento con México después de que este país vetara a Felipe VI en la toma de posesión de la nueva presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, el 1 de octubre, serán otros de los temas a los que tendrá que enfrentarse el ministro.